La inédita obra en que Carlos Droguett reinterpreta el cuento de la Caperucita Roja
El Premio Nacional de Literatura quiso revisar la tradicional historia desde el sicoanálsis, pero la dictadura y el exilio le dieron un nuevo sentido. Nunca dejó de ser un borrador y ahora se presenta en la Sala Sergio Aguirre, bajo la dirección de Daniel Ramírez.
Diario Uchile
Martes 1 de diciembre 2015 20:23 hrs.
Compartir en
Hasta mediados de diciembre se presenta Cómo Caperucita Roja fue finalmente violada, obra inédita del escritor Carlos Droguett que fue llevada a escena por el director Daniel Ramírez.
Hasta ahora, el texto -de unas 300 páginas- había permanecido entre los archivos que conforman el Fondo Carlos Droguett, administrado por la Universidad de Poitiers, en Francia, y como una de las pocas piezas dramáticas creadas por el Premio Nacional de Literatura de 1970.
Eso, hasta que a mediados de noviembre comenzó a presentarse en la Sala Sergio Aguirre, con actuaciones de Valentina Acuña, Daniela Otaegui, Bárbara Santander, José Tomás González, Pasquinel Martínez y Daniel Parra.
“Droguett empieza a escribir la obra en 1971, en Chile, y se propone hacer una lectura sicoanalítica del cuento. Después de un tiempo se va al exilio, a Suiza, y en ese proceso deja un primer borrador acabado, en 1976. Lo retoma en 1986, hace algunas correcciones y es muy bonito porque en el manuscrito están las huellas de todo eso. Ese segundo borrador lo dejó guardado y, finalmente, muere en 1996 sin que haya una versión definitiva”, explicó el director Daniel Ramírez en el programa Radiópolis de Radio Universidad de Chile.
Aunque la intención inicial de Carlos Droguett era revisar el tradicional cuento desde el sicoanálisis, las circunstancias de Chile y de su propia vida fueron influyendo en la obra. Así, las detenciones y desapariciones que perpetró la dictadura provocaron una lectura también política sobre la obra.
“Él parte de una idea bien sicoanalítica, que es el cuerpo como vehículo del placer. Si bien, socialmente, durante varios siglos el cuerpo femenino ha sido reprimido en ese sentido, Droguett plantea esa búsqueda: cómo el cuerpo -en general y, específicamente, el femenino- es un vehículo para encontrarse con el placer y desligarse de la presión del mundo civilizado. Es una lectura bien marcusiana: civilización se opone al placer. En el camino, con el tema de la dictadura, lo que ocurre es que el mismo cuerpo que puede ser un vehículo para el placer, también lo es para el control y el sometimiento más fuerte”, añadió.
Cómo Caperucita Roja fue finalmente violada se presenta de jueves a sábado, a las 20:30 horas y hasta el 12 de diciembre, en la Sala Sergio Aguirre del Departamento de Teatro de la Universidad de Chile, ubicada en Morandé 750. Las entradas tienen valores entre dos y cuatro mil pesos.
Hasta mediados de diciembre se presenta Cómo Caperucita Roja fue finalmente violada, obra inédita del escritor Carlos Droguett que fue llevada a escena por el director Daniel Ramírez.
Hasta ahora, el texto -de unas 300 páginas- había permanecido entre los archivos que conforman el Fondo Carlos Droguett, administrado por la Universidad de Poitiers, en Francia, y como una de las pocas piezas dramáticas creadas por el Premio Nacional de Literatura de 1970.
Eso, hasta que a mediados de noviembre comenzó a presentarse en la Sala Sergio Aguirre, con actuaciones de Valentina Acuña, Daniela Otaegui, Bárbara Santander, José Tomás González, Pasquinel Martínez y Daniel Parra.
“Droguett empieza a escribir la obra en 1971, en Chile, y se propone hacer una lectura sicoanalítica del cuento. Después de un tiempo se va al exilio, a Suiza, y en ese proceso deja un primer borrador acabado, en 1976. Lo retoma en 1986, hace algunas correcciones y es muy bonito porque en el manuscrito están las huellas de todo eso. Ese segundo borrador lo dejó guardado y, finalmente, muere en 1996 sin que haya una versión definitiva”, explicó el director Daniel Ramírez en el programa Radiópolis de Radio Universidad de Chile.
Aunque la intención inicial de Carlos Droguett era revisar el tradicional cuento desde el sicoanálisis, las circunstancias de Chile y de su propia vida fueron influyendo en la obra. Así, las detenciones y desapariciones que perpetró la dictadura provocaron una lectura también política sobre la obra.
“Él parte de una idea bien sicoanalítica, que es el cuerpo como vehículo del placer. Si bien, socialmente, durante varios siglos el cuerpo femenino ha sido reprimido en ese sentido, Droguett plantea esa búsqueda: cómo el cuerpo -en general y, específicamente, el femenino- es un vehículo para encontrarse con el placer y desligarse de la presión del mundo civilizado. Es una lectura bien marcusiana: civilización se opone al placer. En el camino, con el tema de la dictadura, lo que ocurre es que el mismo cuerpo que puede ser un vehículo para el placer, también lo es para el control y el sometimiento más fuerte”, añadió.
Cómo Caperucita Roja fue finalmente violada se presenta de jueves a sábado, a las 20:30 horas y hasta el 12 de diciembre, en la Sala Sergio Aguirre del Departamento de Teatro de la Universidad de Chile, ubicada en Morandé 750. Las entradas tienen valores entre dos y cuatro mil pesos.
Hasta mediados de diciembre se presenta Cómo Caperucita Roja fue finalmente violada, obra inédita del escritor Carlos Droguett que fue llevada a escena por el director Daniel Ramírez.
Hasta ahora, el texto -de unas 300 páginas- había permanecido entre los archivos que conforman el Fondo Carlos Droguett, administrado por la Universidad de Poitiers, en Francia, y como una de las pocas piezas dramáticas creadas por el Premio Nacional de Literatura de 1970.
Eso, hasta que a mediados de noviembre comenzó a presentarse en la Sala Sergio Aguirre, con actuaciones de Valentina Acuña, Daniela Otaegui, Bárbara Santander, José Tomás González, Pasquinel Martínez y Daniel Parra.
“Droguett empieza a escribir la obra en 1971, en Chile, y se propone hacer una lectura sicoanalítica del cuento. Después de un tiempo se va al exilio, a Suiza, y en ese proceso deja un primer borrador acabado, en 1976. Lo retoma en 1986, hace algunas correcciones y es muy bonito porque en el manuscrito están las huellas de todo eso. Ese segundo borrador lo dejó guardado y, finalmente, muere en 1996 sin que haya una versión definitiva”, explicó el director Daniel Ramírez en el programa Radiópolis de Radio Universidad de Chile.
Aunque la intención inicial de Carlos Droguett era revisar el tradicional cuento desde el sicoanálisis, las circunstancias de Chile y de su propia vida fueron influyendo en la obra. Así, las detenciones y desapariciones que perpetró la dictadura provocaron una lectura también política sobre la obra.
“Él parte de una idea bien sicoanalítica, que es el cuerpo como vehículo del placer. Si bien, socialmente, durante varios siglos el cuerpo femenino ha sido reprimido en ese sentido, Droguett plantea esa búsqueda: cómo el cuerpo -en general y, específicamente, el femenino- es un vehículo para encontrarse con el placer y desligarse de la presión del mundo civilizado. Es una lectura bien marcusiana: civilización se opone al placer. En el camino, con el tema de la dictadura, lo que ocurre es que el mismo cuerpo que puede ser un vehículo para el placer, también lo es para el control y el sometimiento más fuerte”, añadió.
Cómo Caperucita Roja fue finalmente violada se presenta de jueves a sábado, a las 20:30 horas y hasta el 12 de diciembre, en la Sala Sergio Aguirre del Departamento de Teatro de la Universidad de Chile, ubicada en Morandé 750. Las entradas tienen valores entre dos y cuatro mil pesos.
