Organizaciones mapuches acusan montaje de PDI en detenciones por caso Luchsinger-Mackay

Esto, luego de que fueran formalizados once comuneros, quienes quedaron en prisión preventiva. Familiares y abogados aseguran que ante las presiones, la policía se vio obligada a presentar pruebas de baja calidad y declaraciones de testigos que se han retractado.

Esto, luego de que fueran formalizados once comuneros, quienes quedaron en prisión preventiva. Familiares y abogados aseguran que ante las presiones, la policía se vio obligada a presentar pruebas de baja calidad y declaraciones de testigos que se han retractado.

Luego de la detención efectuada por la Policía de Investigaciones (PDI) a once comuneros mapuche por su presunta responsabilidad en el ataque incendiario que dio muerte al matrimonio Luchsinger Mackay en 2013, organizaciones mapuches acusaron un montaje por parte de la policía.

Alejandro Peralino, hermano de José Peralino Huinca, sostuvo que esto responde a un chantaje de la PDI y que “llegaron y lo detuvieron, si ningún papel. Los PDI lo están chantajeando, le ofrecieron dinero para que sea testigo y dijera quién fue a quemar la casa de los Luchsinger”.

Versión que también planteó la lonko Juana Calfunao, quien dijo que este hombre manejaba poco el español y fue presionado a delatar al resto de los comuneros detenidos, porque estaba amenazado de muerte por los efectivos de la PDI.

La lonko agregó que es una burla también para la familia de los Lucksinger- Mackay para dejarlos tranquilos a costa de la represión de las comunidades.

Mientras que el abogado defensor Pablo Ardouin afirmó que no existen antecedentes que ameriten, ni la prisión preventiva, ni condena para los comuneros. Además ratificó que José Peralino confesó en la audiencia que la policía lo había extorsionado durante años y que él apenas sabía leer y escribir.

Además, manifestó que “si la policía estaba tan presionada para obtener resultados, entonces lo único que obtiene son pruebas de baja calidad, con declaración de testigos que luego se retractan”.

El plazo de investigación se extenderá por dos meses y luego se realizaría la preparación para el juicio oral, si el Ministerio Público no solicita una ampliación de las indagatorias, según indicó el abogado.

Los hechos del caso tuvieron lugar la madrugada del 4 de enero de 2013, cuando Werner Luchsinger y su esposa Vivianne Mackay murieron calcinados en su domicilio, luego de un ataque incendiario, en el marco de las acciones de protesta por el aniversario de la muerte de Matías Catrileo.

Hasta ahora, el único condenado en la causa es el machi Celestino Córdova, quien fue encontrado a metros del lugar de los hechos. El primero de marzo de 2014 el Tribunal oral de Temuco lo sentenció a la pena de 18 años de presidio, juzgado bajo la Ley Antiterrorista.

En esta ocasión, fue detenido su hermano José Arturo Córdova y la machi Francisca Linconao Huircapán. Carabineros ya había allanado su hogar en 2013, en busca de armas que la pudiesen vincular al caso.

En ese momento, Linconao determinó demandar al Estado por daño moral, ya que no se pudo acreditar su participación, por lo que el Fisco resultó condenado a pagarle 30 millones de pesos.





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