Rafael Dochao Moreno, el embajador de la Unión Europea en Chile, conversó este martes en la primera edición de Radioanálisis sobre la identidad de la unión, que sueña ser líder moral, político y ecológico al nivel internacional, pero quien al mismo tiempo se enfrenta con sus propias limitaciones y dudas en cuanto a ser una unión acogedora, inclusiva y multicultural.
Dochao Moreno enfatizó el papel importante que la Unión Europea jugó en preparar y reivindicar la Cumbre de París sobre el clima en noviembre del 2015, cuando 195 países llegaron a un acuerdo histórico para reducir sus emisiones de dióxido de carbono y mantener la temperatura mundial bajo 2 grados menos que los niveles preindustriales. La cumbre fue histórica por su tamaño y por reunir países muy contaminadores y quienes previamente habían rechazado participar en esfuerzos colectivos hacia este objetivo – como los Estados Unidos o China.
Dochao Moreno explicó que las tres mil embajadas de la Unión trabajaron “incansablemente” para preparar los acuerdos en los años y meses previos. Si la cumbre fue un éxito de la diplomacia internacional, el embajador considera que solo es una primera etapa.
“Yo creo que el gran desafío presente ahora es ver hacia el futuro porque la gente piensa ‘no ya es igual el acuerdo, ya está el asunto solucionado’ y no, París es el punto de partida, no es el punto de llegada”, explicó el embajador.
Ahora sí es necesario esperar que los países pongan en marcha legislaciones para limitar la producción de gases contaminadores y se establezcan los mecanismos de control.
Otro tema fue la crisis inmigratoria que enfrenta la unión y que se ha agudizadao desde el inicio de la guerra en Siria. El embajador enfatizó la diferencia entre un refugiado, quien huye de una guerra, y un inmigrante económico. Dochao Moreno argumentó que en cada barco de 500 personas, 300 eran refugiados, y 200 eran inmigrantes económicos –siguiendo las cifras propuestas por Frans Timmerman, el vicepresidente de la Unión en enero de 2016.
Pero lo más inquietante según él, es la reacción de países y de los individuos frente a esas olas de inmigración que bien podrían traicionar las valores fundamentales de la unión.
“Por desgracia en varios países y muchos sitios de Europa se están construyendo muros. Y Europa tradicionalmente parte de nuestros valores es construir puentes y no construir muros. En un momento que Europa deje que ser lo que es, constructor de puentes y no de muros, podemos entrar en un peligro grande y evidentemente los valores más allá de que Schengen se revisite y que en algún momento determinado va a pasar con los atentados de Paris o de Bruselas se cierran las fronteras por temas de orden público por lucha contra la criminalidad o contra el terrorismo, pero más allá de eso, lo que no podemos perder son los valores”, comentó el embajador.
El mandato de Rafael Dochao Moreno como embajador de la Unión Europea en Chile se termina en septiembre 2016.