Este lunes la Comisión de Trabajo de la Cámara debatió sobre las condiciones de empleo en al país, luego de conocida la tasa desocupación que alcanzó el 9,4 por ciento en Santiago, aumentando 2,6 puntos porcentuales respecto de la medición de 2015.
Sin embargo, una de las principales encuestas que da a conocer estas cifras, elaborada por el Centro de Microdatos del Departamento de Economía de la Universidad de Chile, mantendría en incertidumbre su financiamiento para los próximos años.
El costo de este informe económico, que registra datos desde 1957, es aproximadamente de 105 millones de pesos, financiados por el Banco Central. Sin embargo, la entidad sólo renovó sus aportes hasta el próximo 2 de enero de 2017.
El director del centro, Jaime Ruiz-Tagle, recalcó que no se ha adoptado ninguna decisión al respecto, pero al menos es preocupante poner en cuestión la realización de esta encuesta que, indicó, es el “mejor termómetro para medir lo que está ocurriendo en el mercado laboral de Santiago”.
Además, cuestionó la eventual inexistencia de una herramienta que corrobore los datos de la encuesta realizada por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE), que además, señaló, no pasaría por su mejor momento de credibilidad por su reconocida falta de autonomía demostrada en informes anteriores sobre esta materia.
“A mi parecer es que las condiciones políticas no están dadas para apagar esta encuesta por cuanto la credibilidad del INE puede ser nuevamente cuestionada como lo fue durante el gobierno de Sebastián Piñera, cuando las cifras de desempleo caían y la encuesta del INE no lo reflejaban”, indicó.
Mientras, para el diputado de la Democracia Cristiana y presidente de la Comisión de Trabajo, Patricio Vallespín, este es un tema debatible porque algunos han planteado que la medición y financiamiento se concentre en el INE.
En ese sentido, planteó la necesidad de lograr la independencia del INE, sin que ello desplace a otros mecanismos de medición como esta encuesta de la Universidad de Chile.
De esta manera, el parlamentario aseguró que desde la comisión no se puede llegar a un acuerdo sobre el financiamiento de este instrumento, porque no estaría dentro de sus atribuciones.
“Es relevante que se pueda mantener esta encuesta, sin embargo, el Banco Central debe evaluar sobre la entrega de sus recursos. Los contenidos y aportes que puede entregar este informe aporta a la discusión de políticas públicas de todas maneras”, sostuvo.
La directora del INE, Ximena Clark, por su parte, aseguró que es una utilización ineficiente de los recursos mantener dos encuestas que estén evaluando el desempleo a la vez, criticando la falta de reestructuración de la metodología del informe de la Universidad de Chile. Esto, a pesar que las críticas apuntan a la independencia que tendría este organismo dependiente del Ministerio de Economía.
Este lunes la Comisión de Trabajo de la Cámara debatió sobre las condiciones de empleo en al país, luego de conocida la tasa desocupación que alcanzó el 9,4 por ciento en Santiago, aumentando 2,6 puntos porcentuales respecto de la medición de 2015.
Sin embargo, una de las principales encuestas que da a conocer estas cifras, elaborada por el Centro de Microdatos del Departamento de Economía de la Universidad de Chile, mantendría en incertidumbre su financiamiento para los próximos años.
El costo de este informe económico, que registra datos desde 1957, es aproximadamente de 105 millones de pesos, financiados por el Banco Central. Sin embargo, la entidad sólo renovó sus aportes hasta el próximo 2 de enero de 2017.
El director del centro, Jaime Ruiz-Tagle, recalcó que no se ha adoptado ninguna decisión al respecto, pero al menos es preocupante poner en cuestión la realización de esta encuesta que, indicó, es el “mejor termómetro para medir lo que está ocurriendo en el mercado laboral de Santiago”.
Además, cuestionó la eventual inexistencia de una herramienta que corrobore los datos de la encuesta realizada por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE), que además, señaló, no pasaría por su mejor momento de credibilidad por su reconocida falta de autonomía demostrada en informes anteriores sobre esta materia.
“A mi parecer es que las condiciones políticas no están dadas para apagar esta encuesta por cuanto la credibilidad del INE puede ser nuevamente cuestionada como lo fue durante el gobierno de Sebastián Piñera, cuando las cifras de desempleo caían y la encuesta del INE no lo reflejaban”, indicó.
Mientras, para el diputado de la Democracia Cristiana y presidente de la Comisión de Trabajo, Patricio Vallespín, este es un tema debatible porque algunos han planteado que la medición y financiamiento se concentre en el INE.
En ese sentido, planteó la necesidad de lograr la independencia del INE, sin que ello desplace a otros mecanismos de medición como esta encuesta de la Universidad de Chile.
De esta manera, el parlamentario aseguró que desde la comisión no se puede llegar a un acuerdo sobre el financiamiento de este instrumento, porque no estaría dentro de sus atribuciones.
“Es relevante que se pueda mantener esta encuesta, sin embargo, el Banco Central debe evaluar sobre la entrega de sus recursos. Los contenidos y aportes que puede entregar este informe aporta a la discusión de políticas públicas de todas maneras”, sostuvo.
La directora del INE, Ximena Clark, por su parte, aseguró que es una utilización ineficiente de los recursos mantener dos encuestas que estén evaluando el desempleo a la vez, criticando la falta de reestructuración de la metodología del informe de la Universidad de Chile. Esto, a pesar que las críticas apuntan a la independencia que tendría este organismo dependiente del Ministerio de Economía.
Este lunes la Comisión de Trabajo de la Cámara debatió sobre las condiciones de empleo en al país, luego de conocida la tasa desocupación que alcanzó el 9,4 por ciento en Santiago, aumentando 2,6 puntos porcentuales respecto de la medición de 2015.
Sin embargo, una de las principales encuestas que da a conocer estas cifras, elaborada por el Centro de Microdatos del Departamento de Economía de la Universidad de Chile, mantendría en incertidumbre su financiamiento para los próximos años.
El costo de este informe económico, que registra datos desde 1957, es aproximadamente de 105 millones de pesos, financiados por el Banco Central. Sin embargo, la entidad sólo renovó sus aportes hasta el próximo 2 de enero de 2017.
El director del centro, Jaime Ruiz-Tagle, recalcó que no se ha adoptado ninguna decisión al respecto, pero al menos es preocupante poner en cuestión la realización de esta encuesta que, indicó, es el “mejor termómetro para medir lo que está ocurriendo en el mercado laboral de Santiago”.
Además, cuestionó la eventual inexistencia de una herramienta que corrobore los datos de la encuesta realizada por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE), que además, señaló, no pasaría por su mejor momento de credibilidad por su reconocida falta de autonomía demostrada en informes anteriores sobre esta materia.
“A mi parecer es que las condiciones políticas no están dadas para apagar esta encuesta por cuanto la credibilidad del INE puede ser nuevamente cuestionada como lo fue durante el gobierno de Sebastián Piñera, cuando las cifras de desempleo caían y la encuesta del INE no lo reflejaban”, indicó.
Mientras, para el diputado de la Democracia Cristiana y presidente de la Comisión de Trabajo, Patricio Vallespín, este es un tema debatible porque algunos han planteado que la medición y financiamiento se concentre en el INE.
En ese sentido, planteó la necesidad de lograr la independencia del INE, sin que ello desplace a otros mecanismos de medición como esta encuesta de la Universidad de Chile.
De esta manera, el parlamentario aseguró que desde la comisión no se puede llegar a un acuerdo sobre el financiamiento de este instrumento, porque no estaría dentro de sus atribuciones.
“Es relevante que se pueda mantener esta encuesta, sin embargo, el Banco Central debe evaluar sobre la entrega de sus recursos. Los contenidos y aportes que puede entregar este informe aporta a la discusión de políticas públicas de todas maneras”, sostuvo.
La directora del INE, Ximena Clark, por su parte, aseguró que es una utilización ineficiente de los recursos mantener dos encuestas que estén evaluando el desempleo a la vez, criticando la falta de reestructuración de la metodología del informe de la Universidad de Chile. Esto, a pesar que las críticas apuntan a la independencia que tendría este organismo dependiente del Ministerio de Economía.
