Una vez más parlamentarios de Chile Vamos recurrieron al Tribunal Constitucional, esta vez para reclamar por la decisión del Gobierno de presentar un veto a la impugnación hecha ante el mismo organismo por la Reforma Laboral.
El senador de Renovación Nacional Andrés Allamand, indicó que se trata de una acción que busca reponer el respeto al TC, el cual a pesar de fallar en contra de una serie de normativas, ha visto cómo el Ejecutivo busca imponer su propuesta en distintas materias contenidas en el proyecto.
“Hemos vuelto a recurrir frente al Tribunal Constitucional frente a un claro desacato por parte del Gobierno respecto del fallo del Tribunal Constitucional. Nosotros recurrimos hace ya más de un mes precisamente para que quedara establecido que en nuestra legislación laboral el derecho a la negociación colectiva lo tienen tanto los sindicatos como los grupos negociadores”, sostuvo el legislador.
Otro de los que se sumó a la presentación fue el diputado de la UDI Patricio Melero, quien indicó que con el veto el Gobierno prefirió seguir por el camino equivocado, ya que se busca dejar una serie de normas que fueron impugnadas por el TC en su fallo a petición de los parlamentarios de Chile Vamos.
Mientras, el diputado de RN Nicolás Monckeberg, el Ejecutivo menosprecia al Tribunal Constitucional.
“El tribunal fue categórico en decir que no se puede nunca discriminar a los trabajadores en cuanto al ejercicio de su derecho a negociar colectivamente. Y me atrevo a decir que este segundo proyecto que ingresa el Gobierno es aún más perjudicial para los trabajadores que quieren negociar colectivamente y no están afiliados a un sindicato”, puntualizó Monckeberg.
La petición presentada por los legisladores de Chile Vamos fue calificada en la Nueva Mayoría como una propuesta con mucha imaginación, como sostuvo el presidente de la Cámara de Diputados y ex ministro del Trabajo, Osvaldo Andrade.
Vicepresidente de la CUT: “Nos parece ridículo”
El vicepresidente de la Central Unitaria de Trabajadores, Nolberto Díaz, criticó duramente la presentación ante el Tribunal Constitucional que hizo un grupo de parlamentarios de Chile Vamos acusando un desacato del Gobierno al fallo por la reforma laboral.
El dirigente comentó que la decisión del Ejecutivo de vetar algunos aspectos de la reforma para mantener conceptos como negociación colectiva, están plenamente ajustados al derecho.
“Nos parece ridículo, nos parece un chiste, nos parece lamentable. Tal vez lo único que haya que saludar es que ahora la derecha no toca la puerta de los cuarteles para pedir golpe militar y va al Tribunal Constitucional. Pero me parece francamente ridículo que una derecha que negó los votos para hacer reforma laboral, para legislar hoy día además acusa al Gobierno que ejerció un legítimo derecho de vetar los pactos de adaptabilidad y vetar el aumento de quórum que ellos se vayan de picados a acusar al Gobierno de desacato”, comentó Díaz.
Para el representante de la entidad sindical es necesario que el Ejecutivo cumpla con su compromiso hecho en campaña con los trabajadores, en el sentido de reponer la titularidad sindical y asegurar el derecho a huelga.
Nolberto Díaz indicó que de otra forma la Nueva Mayoría no tiene posibilidad de subsistir como proyecto político porque no estaría cumpliendo con lo prometido a la gente.
“Nosotros vamos a insistir porque el Gobierno haga una nueva reforma laboral. Sino, la Nueva Mayoría no tiene autoridad moral para seguir gobernando en este país. La Concertación ayer y la Nueva Mayoría, hicieron una promesa hace 26 años, en 1989, que todavía no han cumplido. No la cumplían con su propia reforma, fue golpeada y desahuciada en el Tribunal Constitucional con la derecha, entonces los temas siguen pendientes”, subrayó.
Para el dirigente sindical con la actual reforma es muy poco lo que se avanza, por lo que adelantó que continuarán insistiendo al Gobierno en reponer una reforma de fondo que restituya los derechos laborales que fueron suspendidos con los cambios hechos bajo la dictadura cívico-militar por el entonces ministro del Trabajo, José Piñera.
Una vez más parlamentarios de Chile Vamos recurrieron al Tribunal Constitucional, esta vez para reclamar por la decisión del Gobierno de presentar un veto a la impugnación hecha ante el mismo organismo por la Reforma Laboral.
El senador de Renovación Nacional Andrés Allamand, indicó que se trata de una acción que busca reponer el respeto al TC, el cual a pesar de fallar en contra de una serie de normativas, ha visto cómo el Ejecutivo busca imponer su propuesta en distintas materias contenidas en el proyecto.
“Hemos vuelto a recurrir frente al Tribunal Constitucional frente a un claro desacato por parte del Gobierno respecto del fallo del Tribunal Constitucional. Nosotros recurrimos hace ya más de un mes precisamente para que quedara establecido que en nuestra legislación laboral el derecho a la negociación colectiva lo tienen tanto los sindicatos como los grupos negociadores”, sostuvo el legislador.
Otro de los que se sumó a la presentación fue el diputado de la UDI Patricio Melero, quien indicó que con el veto el Gobierno prefirió seguir por el camino equivocado, ya que se busca dejar una serie de normas que fueron impugnadas por el TC en su fallo a petición de los parlamentarios de Chile Vamos.
Mientras, el diputado de RN Nicolás Monckeberg, el Ejecutivo menosprecia al Tribunal Constitucional.
“El tribunal fue categórico en decir que no se puede nunca discriminar a los trabajadores en cuanto al ejercicio de su derecho a negociar colectivamente. Y me atrevo a decir que este segundo proyecto que ingresa el Gobierno es aún más perjudicial para los trabajadores que quieren negociar colectivamente y no están afiliados a un sindicato”, puntualizó Monckeberg.
La petición presentada por los legisladores de Chile Vamos fue calificada en la Nueva Mayoría como una propuesta con mucha imaginación, como sostuvo el presidente de la Cámara de Diputados y ex ministro del Trabajo, Osvaldo Andrade.
Vicepresidente de la CUT: “Nos parece ridículo”
El vicepresidente de la Central Unitaria de Trabajadores, Nolberto Díaz, criticó duramente la presentación ante el Tribunal Constitucional que hizo un grupo de parlamentarios de Chile Vamos acusando un desacato del Gobierno al fallo por la reforma laboral.
El dirigente comentó que la decisión del Ejecutivo de vetar algunos aspectos de la reforma para mantener conceptos como negociación colectiva, están plenamente ajustados al derecho.
“Nos parece ridículo, nos parece un chiste, nos parece lamentable. Tal vez lo único que haya que saludar es que ahora la derecha no toca la puerta de los cuarteles para pedir golpe militar y va al Tribunal Constitucional. Pero me parece francamente ridículo que una derecha que negó los votos para hacer reforma laboral, para legislar hoy día además acusa al Gobierno que ejerció un legítimo derecho de vetar los pactos de adaptabilidad y vetar el aumento de quórum que ellos se vayan de picados a acusar al Gobierno de desacato”, comentó Díaz.
Para el representante de la entidad sindical es necesario que el Ejecutivo cumpla con su compromiso hecho en campaña con los trabajadores, en el sentido de reponer la titularidad sindical y asegurar el derecho a huelga.
Nolberto Díaz indicó que de otra forma la Nueva Mayoría no tiene posibilidad de subsistir como proyecto político porque no estaría cumpliendo con lo prometido a la gente.
“Nosotros vamos a insistir porque el Gobierno haga una nueva reforma laboral. Sino, la Nueva Mayoría no tiene autoridad moral para seguir gobernando en este país. La Concertación ayer y la Nueva Mayoría, hicieron una promesa hace 26 años, en 1989, que todavía no han cumplido. No la cumplían con su propia reforma, fue golpeada y desahuciada en el Tribunal Constitucional con la derecha, entonces los temas siguen pendientes”, subrayó.
Para el dirigente sindical con la actual reforma es muy poco lo que se avanza, por lo que adelantó que continuarán insistiendo al Gobierno en reponer una reforma de fondo que restituya los derechos laborales que fueron suspendidos con los cambios hechos bajo la dictadura cívico-militar por el entonces ministro del Trabajo, José Piñera.
Una vez más parlamentarios de Chile Vamos recurrieron al Tribunal Constitucional, esta vez para reclamar por la decisión del Gobierno de presentar un veto a la impugnación hecha ante el mismo organismo por la Reforma Laboral.
El senador de Renovación Nacional Andrés Allamand, indicó que se trata de una acción que busca reponer el respeto al TC, el cual a pesar de fallar en contra de una serie de normativas, ha visto cómo el Ejecutivo busca imponer su propuesta en distintas materias contenidas en el proyecto.
“Hemos vuelto a recurrir frente al Tribunal Constitucional frente a un claro desacato por parte del Gobierno respecto del fallo del Tribunal Constitucional. Nosotros recurrimos hace ya más de un mes precisamente para que quedara establecido que en nuestra legislación laboral el derecho a la negociación colectiva lo tienen tanto los sindicatos como los grupos negociadores”, sostuvo el legislador.
Otro de los que se sumó a la presentación fue el diputado de la UDI Patricio Melero, quien indicó que con el veto el Gobierno prefirió seguir por el camino equivocado, ya que se busca dejar una serie de normas que fueron impugnadas por el TC en su fallo a petición de los parlamentarios de Chile Vamos.
Mientras, el diputado de RN Nicolás Monckeberg, el Ejecutivo menosprecia al Tribunal Constitucional.
“El tribunal fue categórico en decir que no se puede nunca discriminar a los trabajadores en cuanto al ejercicio de su derecho a negociar colectivamente. Y me atrevo a decir que este segundo proyecto que ingresa el Gobierno es aún más perjudicial para los trabajadores que quieren negociar colectivamente y no están afiliados a un sindicato”, puntualizó Monckeberg.
La petición presentada por los legisladores de Chile Vamos fue calificada en la Nueva Mayoría como una propuesta con mucha imaginación, como sostuvo el presidente de la Cámara de Diputados y ex ministro del Trabajo, Osvaldo Andrade.
Vicepresidente de la CUT: “Nos parece ridículo”
El vicepresidente de la Central Unitaria de Trabajadores, Nolberto Díaz, criticó duramente la presentación ante el Tribunal Constitucional que hizo un grupo de parlamentarios de Chile Vamos acusando un desacato del Gobierno al fallo por la reforma laboral.
El dirigente comentó que la decisión del Ejecutivo de vetar algunos aspectos de la reforma para mantener conceptos como negociación colectiva, están plenamente ajustados al derecho.
“Nos parece ridículo, nos parece un chiste, nos parece lamentable. Tal vez lo único que haya que saludar es que ahora la derecha no toca la puerta de los cuarteles para pedir golpe militar y va al Tribunal Constitucional. Pero me parece francamente ridículo que una derecha que negó los votos para hacer reforma laboral, para legislar hoy día además acusa al Gobierno que ejerció un legítimo derecho de vetar los pactos de adaptabilidad y vetar el aumento de quórum que ellos se vayan de picados a acusar al Gobierno de desacato”, comentó Díaz.
Para el representante de la entidad sindical es necesario que el Ejecutivo cumpla con su compromiso hecho en campaña con los trabajadores, en el sentido de reponer la titularidad sindical y asegurar el derecho a huelga.
Nolberto Díaz indicó que de otra forma la Nueva Mayoría no tiene posibilidad de subsistir como proyecto político porque no estaría cumpliendo con lo prometido a la gente.
“Nosotros vamos a insistir porque el Gobierno haga una nueva reforma laboral. Sino, la Nueva Mayoría no tiene autoridad moral para seguir gobernando en este país. La Concertación ayer y la Nueva Mayoría, hicieron una promesa hace 26 años, en 1989, que todavía no han cumplido. No la cumplían con su propia reforma, fue golpeada y desahuciada en el Tribunal Constitucional con la derecha, entonces los temas siguen pendientes”, subrayó.
Para el dirigente sindical con la actual reforma es muy poco lo que se avanza, por lo que adelantó que continuarán insistiendo al Gobierno en reponer una reforma de fondo que restituya los derechos laborales que fueron suspendidos con los cambios hechos bajo la dictadura cívico-militar por el entonces ministro del Trabajo, José Piñera.
