Ya es una realidad lo que muchos en un principio creyeron imposible. El magnate estadounidense Donald Trump, quien hasta antes de esta campaña era una figura más ligada a la farándula que la política, se convirtió en el candidato presidencial del Partido Republicano para las elecciones presidenciales de ese país.
Luego de una convención republicana donde se evidenciaron las diferencias internas que vive esa colectividad, Trump ahora se abocará en enfrentar esta campaña presidencial, que lo enfrentará ante la representante del Partido Demócrata, Hillary Clinton.
El discurso puso fin a una accidentada Convención Republicana, que le proclamó candidato a las elecciones de noviembre, pero fracasó en el intento de calmar el escepticismo que provocan su temperamento volátil y sus indefiniciones ideológicas.
El candidato prometió una era de prosperidad y seguridad en Estados Unidos, luego de años de supuesto declive y corrupción asociados a su rival, Hillary Clinton, al presidente Barack Obama y a sus antecesores, demócratas y republicanos.
“El crimen y la violencia que hoy afligen a nuestra nación pronto terminarán. El 20 de enero de 2017 se restaurará la seguridad”, dijo Trump en alusión a la fecha en la que asumirá el cargo en caso de victoria.
Trump además acusó a Hillary Clinton de ser responsable de la sensación de inseguridad que afecta a los Estados Unidos, luego de los últimos ataques terroristas en el mundo: “Para protegernos contra el terrorismo necesitamos lo mejor a nivel de inteligencia y abandonar las políticas fallidas de construcción de naciones que Hillary Clinton empujó en Egipto, Libia, Irak y Siria”.
Respecto de lo que representa el candidato republicano, el analista internacional de la Universidad de Santiago (USACh) Fernando Estenssoro sostuvo que su postulación recoge una serie de planteamientos de la extrema derecha e izquierda norteamericanas para crear un solo relato.
“Lo que hace Trump es recoger esos elementos y transformarlos en un discurso político, prometiendo que Estados Unidos volverá a una gloria pasada y recoge distintos elementos de la izquierda y la extrema derecha”, señaló.
Asimismo, sostiene que es posible que Donald Trump capture parte del electorado demócrata que “es un votante que tradicionalmente ha votado por el Partido Demócrata y este ciudadano del mediooeste, que no es rico, pero que es muy conservador y religioso, es la base del electorado de Trump”, agregó.
Precisamente, Hillary Clinton reaccionó a través de las redes sociales respecto de las palabras de Trump y afirmó que “somos mejores que esto”, agregando que su postulación “construirá un muro” entre el postulante republicano y la presidencia.
En tanto, la organización “Black Lives Matter” afirmó que el discurso de Trump “es el más negativo de la historia” y que “logró vilipendiar y criminalizar a personas de todo tipo, desde los inmigrantes latinos a los musulmanes y los negros”.
Se espera que durante esta jornada la candidata demócrata de a conocer el nombre de su compañero de fórmula en la contienda presidencial del mes de noviembre.