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Instructor del juicio político contra Dilma Rousseff pide su destitución

El senador que instruye el impeachment contra Dilma Rousseff presentó ante el Congreso un informe favorable a la continuidad del proceso que busca la destitución de la presidenta electa. Si dos tercios de los senadores aprueban este informe, el presidente interino Michel Temer ocupará la presidencia hasta enero de 2019.

Oriana Miranda

  Miércoles 3 de agosto 2016 10:55 hrs. 
fora temer

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El Senado brasileño reinició este martes la discusión sobre la demanda de destitución de la presidenta Dilma Rousseff, apartada de su cargo el 12 de mayo pasado.

El instructor del proceso, senador Antonio Anastasia, quien está siendo investigado por corrupción en el marco de la Operación Lava Jato por haber recibido coimas de un millón de reales en 2010, presentó un informe favorable a la continuidad del proceso de impeachment contra la presidenta.

En el texto de 441 páginas leído en la Comisión de Impeachment de la Cámara, el senador del PMDB argumentó que Dilma no respetó la Ley de Responsabilidad Fiscal, al contar con un presupuesto público antes de que fuese aprobado por el Congreso. A su juicio, los delitos por los que Rousseff ha sido acusada suponen un “atentado a la Constitución” y provocaron un “descontrol fiscal” que alteró los presupuestos de la nación.

El informe de Antonio Anastasia será presentado al pleno del Senado este viernes 5 de agosto, mientras los ojos de los brasileños estén puestos en la inauguración de los Juegos Olímpicos de Río.

Si una mayoría simple de los 81 senadores aprueba el documento, la Corte Suprema convocará a una última sesión, donde se requerirá del voto de dos tercios de los senadores para destituir definitivamente a la presidenta que siempre ha clamado su inocencia.

De acuerdo con el calendario definido por el presidente del Supremo Tribunal Federal (STF), la etapa final del juicio político se iniciará el 29 de agosto y se espera que se extienda por al menos cinco días.

¿De qué está acusada Rousseff?

El procedimiento de impeachment contra la primera mujer presidenta de Brasil se basa en acusaciones de que cometió un “crimen de responsabilidad” al pedir préstamos a bancos estatales para ocultar déficit presupuestarios durante su campaña a la reelección en 2014 y varios meses de 2015.

Sin embargo, un informe elaborado por técnicos del Senado brasileño y dado a conocer a fines de junio señaló que no existen pruebas de que Dilma Rousseff participara en las maniobras fiscales que se le imputan.

Si el voto en el Senado no supera los dos tercios, Dilma recuperará su cargo. En caso contrario el presidente interino, Michel Temer, ocupará la presidencia hasta enero del 2019.

Cabe destacar que dos tercios de los senadores que decidirán si Dilma Rousseff debe o no terminar su mandato presidencial tienen causas pendientes con la justicia.

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