Un rotundo rechazo a la propuesta de reajuste del sector público fue el que se expresó en las calles de las distintas ciudades del país, en la primera movilización de los trabajadores del Estado en el marco de esta negociación.
Para el vocero de la Mesa del Sector Público, Carlos Insunza se trató de una marcha contundente y que representa una fuerte señal para el Gobierno destrabe las negociaciones.
El dirigente reconoció además que este proceso será particularmente complejo y anunció que estará marcado por movilizaciones.
“Esperamos que este proceso de negociación no se extienda innecesariamente. Este proceso estará marcado por la movilización de los trabajadores y trabajadoras y esperamos que el Gobierno atienda a la masividad de la movilización, pero también atienda a las razones que están exponiendo los dirigentes nacionales de las organizaciones para buscar un camino que llegue a un acuerdo”
Mientras, desde la ANEF, su presidente, Raúl de la Puente pidió no utilizar el bajo crecimiento económico como una excusa para no reajustar el sueldo de los trabajadores del Estado. Además el dirigente, realizó un llamado al ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, a que recapacite.
En tanto desde la Mesa Alternativa del Sector Público, decidieron no participar de esta convocatoria, reiterando que esta negociación está conducida por las “cúpulas sindicales” que mantienen militancia activa en partidos de la Nueva Mayoría.
Asimismo aseguraron que este tipo de movilizaciones se han transformado en un ritual constante en donde se ha dejado fuera de la negociación a más de 300 mil trabajadores a honorarios y subcontratados.
En esa línea la directora de la ANEF y vocera de este movimiento, Ximena Aguirre aseguró que este tipo de acciones resulta ineficaz tomando en cuenta que se produce a un solo día del envío del proyecto de ley de presupuesto para el próximo año.
“Este viernes se va la ley de presupuesto al Congreso. Ese es el punto de la diferencia de esta movilización. Se dijo que nosotros adelantábamos la negociación por un tema de presión hacia el Gobierno. Sin embargo cuando se despacha la ley de presupuesto, la ley de reajuste se ve completamente amarrada (…) ya no hay margen de negociación con el Gobierno, no hay margen de negociación para el reajuste porque la ley ya está enviada”
Si bien los 15 gremios que componen la Mesa del Sector Público adhirieron a esta movilización, los trabajadores del Registro Civil decidieron no plegarse a esta convocatoria.
Los principales motivos, dicen relación con las extensas paralizaciones que han sostenido durante el último tiempo. Así lo explicó la presidenta de los funcionarios de ese servicio, Nelly Díaz, quien descartó un desmarque de la ANEF.
“Esto no significa que nos estemos desmarcando de la ANEF. Esto significa que nosotros estamos en un proceso en el Registro Civil después de la movilización de cercanía con la ciudadanía y es por eso la razón que decidimos no adherirnos al paro (…) estamos de acuerdo con la petición de reajuste que está pidiendo el sector público, pero nosotros tenemos una responsabilidad mayor con la ciudadanía”.
Desde el Gobierno aseguraron estar abiertos al diálogo con los trabajadores del Estado para alcanzar a un acuerdo. Sin embargo, advirtieron que ese diálogo debe pasar por una conciencia del momento económico que vive el país.
Un rotundo rechazo a la propuesta de reajuste del sector público fue el que se expresó en las calles de las distintas ciudades del país, en la primera movilización de los trabajadores del Estado en el marco de esta negociación.
Para el vocero de la Mesa del Sector Público, Carlos Insunza se trató de una marcha contundente y que representa una fuerte señal para el Gobierno destrabe las negociaciones.
El dirigente reconoció además que este proceso será particularmente complejo y anunció que estará marcado por movilizaciones.
“Esperamos que este proceso de negociación no se extienda innecesariamente. Este proceso estará marcado por la movilización de los trabajadores y trabajadoras y esperamos que el Gobierno atienda a la masividad de la movilización, pero también atienda a las razones que están exponiendo los dirigentes nacionales de las organizaciones para buscar un camino que llegue a un acuerdo”
Mientras, desde la ANEF, su presidente, Raúl de la Puente pidió no utilizar el bajo crecimiento económico como una excusa para no reajustar el sueldo de los trabajadores del Estado. Además el dirigente, realizó un llamado al ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, a que recapacite.
En tanto desde la Mesa Alternativa del Sector Público, decidieron no participar de esta convocatoria, reiterando que esta negociación está conducida por las “cúpulas sindicales” que mantienen militancia activa en partidos de la Nueva Mayoría.
Asimismo aseguraron que este tipo de movilizaciones se han transformado en un ritual constante en donde se ha dejado fuera de la negociación a más de 300 mil trabajadores a honorarios y subcontratados.
En esa línea la directora de la ANEF y vocera de este movimiento, Ximena Aguirre aseguró que este tipo de acciones resulta ineficaz tomando en cuenta que se produce a un solo día del envío del proyecto de ley de presupuesto para el próximo año.
“Este viernes se va la ley de presupuesto al Congreso. Ese es el punto de la diferencia de esta movilización. Se dijo que nosotros adelantábamos la negociación por un tema de presión hacia el Gobierno. Sin embargo cuando se despacha la ley de presupuesto, la ley de reajuste se ve completamente amarrada (…) ya no hay margen de negociación con el Gobierno, no hay margen de negociación para el reajuste porque la ley ya está enviada”
Si bien los 15 gremios que componen la Mesa del Sector Público adhirieron a esta movilización, los trabajadores del Registro Civil decidieron no plegarse a esta convocatoria.
Los principales motivos, dicen relación con las extensas paralizaciones que han sostenido durante el último tiempo. Así lo explicó la presidenta de los funcionarios de ese servicio, Nelly Díaz, quien descartó un desmarque de la ANEF.
“Esto no significa que nos estemos desmarcando de la ANEF. Esto significa que nosotros estamos en un proceso en el Registro Civil después de la movilización de cercanía con la ciudadanía y es por eso la razón que decidimos no adherirnos al paro (…) estamos de acuerdo con la petición de reajuste que está pidiendo el sector público, pero nosotros tenemos una responsabilidad mayor con la ciudadanía”.
Desde el Gobierno aseguraron estar abiertos al diálogo con los trabajadores del Estado para alcanzar a un acuerdo. Sin embargo, advirtieron que ese diálogo debe pasar por una conciencia del momento económico que vive el país.
Un rotundo rechazo a la propuesta de reajuste del sector público fue el que se expresó en las calles de las distintas ciudades del país, en la primera movilización de los trabajadores del Estado en el marco de esta negociación.
Para el vocero de la Mesa del Sector Público, Carlos Insunza se trató de una marcha contundente y que representa una fuerte señal para el Gobierno destrabe las negociaciones.
El dirigente reconoció además que este proceso será particularmente complejo y anunció que estará marcado por movilizaciones.
“Esperamos que este proceso de negociación no se extienda innecesariamente. Este proceso estará marcado por la movilización de los trabajadores y trabajadoras y esperamos que el Gobierno atienda a la masividad de la movilización, pero también atienda a las razones que están exponiendo los dirigentes nacionales de las organizaciones para buscar un camino que llegue a un acuerdo”
Mientras, desde la ANEF, su presidente, Raúl de la Puente pidió no utilizar el bajo crecimiento económico como una excusa para no reajustar el sueldo de los trabajadores del Estado. Además el dirigente, realizó un llamado al ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, a que recapacite.
En tanto desde la Mesa Alternativa del Sector Público, decidieron no participar de esta convocatoria, reiterando que esta negociación está conducida por las “cúpulas sindicales” que mantienen militancia activa en partidos de la Nueva Mayoría.
Asimismo aseguraron que este tipo de movilizaciones se han transformado en un ritual constante en donde se ha dejado fuera de la negociación a más de 300 mil trabajadores a honorarios y subcontratados.
En esa línea la directora de la ANEF y vocera de este movimiento, Ximena Aguirre aseguró que este tipo de acciones resulta ineficaz tomando en cuenta que se produce a un solo día del envío del proyecto de ley de presupuesto para el próximo año.
“Este viernes se va la ley de presupuesto al Congreso. Ese es el punto de la diferencia de esta movilización. Se dijo que nosotros adelantábamos la negociación por un tema de presión hacia el Gobierno. Sin embargo cuando se despacha la ley de presupuesto, la ley de reajuste se ve completamente amarrada (…) ya no hay margen de negociación con el Gobierno, no hay margen de negociación para el reajuste porque la ley ya está enviada”
Si bien los 15 gremios que componen la Mesa del Sector Público adhirieron a esta movilización, los trabajadores del Registro Civil decidieron no plegarse a esta convocatoria.
Los principales motivos, dicen relación con las extensas paralizaciones que han sostenido durante el último tiempo. Así lo explicó la presidenta de los funcionarios de ese servicio, Nelly Díaz, quien descartó un desmarque de la ANEF.
“Esto no significa que nos estemos desmarcando de la ANEF. Esto significa que nosotros estamos en un proceso en el Registro Civil después de la movilización de cercanía con la ciudadanía y es por eso la razón que decidimos no adherirnos al paro (…) estamos de acuerdo con la petición de reajuste que está pidiendo el sector público, pero nosotros tenemos una responsabilidad mayor con la ciudadanía”.
Desde el Gobierno aseguraron estar abiertos al diálogo con los trabajadores del Estado para alcanzar a un acuerdo. Sin embargo, advirtieron que ese diálogo debe pasar por una conciencia del momento económico que vive el país.
