Camila Vallejo por Reforma a la Educación Superior: "El gobierno ha tenido un rol débil"

La diputada comunista repasa el proyecto de Educación Superior y su cruzada por destrabar los nudos críticos. Además, señala que la responsabilidad de la lentitud en la tramitación no es achacable sólo al ministerio de Educación, sino que también al pobre convencimiento que ha existido de parte del gobierno a la hora de sacar la reforma.

La diputada comunista repasa el proyecto de Educación Superior y su cruzada por destrabar los nudos críticos. Además, señala que la responsabilidad de la lentitud en la tramitación no es achacable sólo al ministerio de Educación, sino que también al pobre convencimiento que ha existido de parte del gobierno a la hora de sacar la reforma.

En medio de las diferencias que han presentado los diversos actores del mundo de la educación, el día de ayer ministra de la cartera, Adriana Delpiano, se reunió con los diputados oficialistas de la comisión de Educación para zanjar el futuro de la reforma a la Educación Superior. En la instancia se comenzaron a acercar las posiciones para tomar las primeras definiciones que ayuden a sacar el proyecto antes de que el gobierno de Michelle Bachelet llegue a su fin.

La diputada Camila Vallejo, representante del Partido Comunista en dicha comisión, en conversación con Radio y Diario Universidad de Chile, esclarece las primeras conclusiones.

¿Cuál era el objetivo de la reunión y qué se resolvió en ella?

El objetivo de la reunión era esclarecer temas no resueltos dentro de la Nueva Mayoría (NM) respecto a la reforma. A mí me causó un poco de impresión porque pensé que eran  obvios y básicos, pero al parecer no era así para el resto de los partidos de la NM ni para el gobierno. Definimos común denominador de la reforma: el fortalecimiento a las instituciones del Estado. Esto implica un plan de desarrollo integral para las instituciones estatales que aspira a expandir matrículas, fortalecer ciertas áreas, mejorar su calidad. Y eso se quedó acordado transversalmente desde la DC hasta nosotros. También abordamos la necesidad de la regulación al mercado educacional a través de la Superintendencia, el combate al lucro tipificándolo como delito, la incorporación de la eliminación del CAE en la reforma -y no como proyecto aparte-, y el reconocimiento a las instituciones del G9 del Consejo de Rectores (CRUCh), su rol histórico y colaboración en la función pública que hacen con el Estado.

¿Se logró resolver el conflicto asociado con el CRUCh?

Al menos dentro de la NM quedó claro que no se puede no reconocer a las instituciones del G9. También en temas de financiamiento. Porque la primera propuesta planteaba eliminar el Aporte Fiscal Directo (AFD). Eso está descartado, el AFD se mantiene. Propuse un cambio en la fórmula de distribución del AFD porque tiene criterios históricos bien discriminatorios. Con eso yo creo que pueden destrabarse algunos temas. Ahora, así como un acuerdo escrito no hay todavía.

Esta constituye una de las reformas medulares del gobierno de Michelle Bachelet y su discusión se ha dilatado largamente. En ese contexto ¿cómo evalúa el manejo que ha tenido el ministerio de Educación para destrabar la tramitación?

Yo creo que no es sólo un problema de educación. Yo creo que es un problema de gobierno que ha tenido un rol débil y muy conflictuado. Es evidente que la discusión sobre la reforma de educación superior está atravesada por intereses, políticos, ideológicos, económicos y religiosos. Dentro de la NM yo creo que no ha habido un convencimiento o pasión muy fuerte con en el tema en particular y yo creo que eso se ha ido desarrollando en el transcurso del debate. Entonces, para mí, cuestiones que obvias no estaba resueltas tanto en algunos partidos de la NM como en el gobierno. Entonces es un tema que ha tenido que ir madurando, lamentablemente lento. Todos queremos que este gobierno saque la reforma a la educación superior, pero la saque de buena manera.

 





Presione Escape para Salir o haga clic en la X