Abre el Mundial del Circo con fuerte presencia latinoamericana
El Festival Mundial del Circo de Mañana es una competencia internacional y a la vez uno de los mejores espectáculos del circo en el mundo que se hace cada año frente a un público de cuatro mil personas y un jurado de especialistas, en el Circo Phénix de París.
María Carolina Piña / RFI
Lunes 30 de enero 2017 11:19 hrs.
Compartir en
En 2017, este certamen llega a su edición número 38 reuniendo 25 compañías venidas de todo el planeta y de todas las disciplinas modernas y clásicas.
Chile está presente por primera vez en este festival con Alejandro Escobedo, quien trajo un número de malabares con ocho pelotas y mucho humor: “Este espectáculo es un número de malabarismo burlesco, hay un poco de payaso y de técnica de malabar. Se llama ‘Les balles perdues’ [las bolas perdidas], es una batalla entre este personaje y sus pelotas. (…) Empecé muy pequeño, haciendo mis propias pelotas de malabares. En Chile hay mucho circo tradicional”, cuenta el malabarista.
Dos artistas mexicanos prueban suerte en esta 38° edición del festival: Alba Moncayo e Iván Niebla vienen de la compañía Alebrije de Guadalajara, con un número que mezcla cintas aéreas y fuerza capilar, una disciplina muy practicada en América Latina donde el artista se suspende a varios metros del suelo tirado de su cabellera.
“El número fue una creación con la cual trabajamos desde hace un rato. Alba aprendió a hacer fuerza capilar y se nos ocurrió mezclarlo con las cintas, y fue así como presentamos el número, lo mandamos al festival y quedamos seleccionados”, explica Iván. “Es muy interesante y muy sorprendente para le gente. Siempre te preguntan si te duele, qué sientes… Hay gente que incluso no puede verlo. Para prepararlo tienes que calentar todo tu cuerpo, porque implica más tu cuello, la cabeza… Las primeras veces piensas ‘¡me voy a quedar sin cabello!’. La sensación es muy divertida”, añade Alba.
Argentina también está presente en la competencia parisina con un dúo de cuadro aéreo conformado por Josefina Castro y Daniel Ortiz. Una pareja que trabajó los temas del amor y la cólera dentro de un número que desafía la gravedad.
“Es básicamente volar por las aires, pero es diferente al trapecio. (…) Nunca habíamos estado en otro festival tan grande”, precisa Daniel. Josefina destaca la felicidad que sienten al participar de este evento, “más allá de los resultados: el hecho de actuar acá, en esta carpa que es increíble, con todas las comodidades que te dan y el escenario que es maravilloso”.
El Festival Mundial del Circo de Mañana se desarrolla en París hasta el domingo próximo, cuando se entreguen las medallas de oro, plata y bronce y otros premios especiales de este certamen considerado los “Juegos Olímpicos del circo”.
En 2017, este certamen llega a su edición número 38 reuniendo 25 compañías venidas de todo el planeta y de todas las disciplinas modernas y clásicas.
Chile está presente por primera vez en este festival con Alejandro Escobedo, quien trajo un número de malabares con ocho pelotas y mucho humor: “Este espectáculo es un número de malabarismo burlesco, hay un poco de payaso y de técnica de malabar. Se llama ‘Les balles perdues’ [las bolas perdidas], es una batalla entre este personaje y sus pelotas. (…) Empecé muy pequeño, haciendo mis propias pelotas de malabares. En Chile hay mucho circo tradicional”, cuenta el malabarista.
Dos artistas mexicanos prueban suerte en esta 38° edición del festival: Alba Moncayo e Iván Niebla vienen de la compañía Alebrije de Guadalajara, con un número que mezcla cintas aéreas y fuerza capilar, una disciplina muy practicada en América Latina donde el artista se suspende a varios metros del suelo tirado de su cabellera.
“El número fue una creación con la cual trabajamos desde hace un rato. Alba aprendió a hacer fuerza capilar y se nos ocurrió mezclarlo con las cintas, y fue así como presentamos el número, lo mandamos al festival y quedamos seleccionados”, explica Iván. “Es muy interesante y muy sorprendente para le gente. Siempre te preguntan si te duele, qué sientes… Hay gente que incluso no puede verlo. Para prepararlo tienes que calentar todo tu cuerpo, porque implica más tu cuello, la cabeza… Las primeras veces piensas ‘¡me voy a quedar sin cabello!’. La sensación es muy divertida”, añade Alba.
Argentina también está presente en la competencia parisina con un dúo de cuadro aéreo conformado por Josefina Castro y Daniel Ortiz. Una pareja que trabajó los temas del amor y la cólera dentro de un número que desafía la gravedad.
“Es básicamente volar por las aires, pero es diferente al trapecio. (…) Nunca habíamos estado en otro festival tan grande”, precisa Daniel. Josefina destaca la felicidad que sienten al participar de este evento, “más allá de los resultados: el hecho de actuar acá, en esta carpa que es increíble, con todas las comodidades que te dan y el escenario que es maravilloso”.
El Festival Mundial del Circo de Mañana se desarrolla en París hasta el domingo próximo, cuando se entreguen las medallas de oro, plata y bronce y otros premios especiales de este certamen considerado los “Juegos Olímpicos del circo”.
En 2017, este certamen llega a su edición número 38 reuniendo 25 compañías venidas de todo el planeta y de todas las disciplinas modernas y clásicas.
Chile está presente por primera vez en este festival con Alejandro Escobedo, quien trajo un número de malabares con ocho pelotas y mucho humor: “Este espectáculo es un número de malabarismo burlesco, hay un poco de payaso y de técnica de malabar. Se llama ‘Les balles perdues’ [las bolas perdidas], es una batalla entre este personaje y sus pelotas. (…) Empecé muy pequeño, haciendo mis propias pelotas de malabares. En Chile hay mucho circo tradicional”, cuenta el malabarista.
Dos artistas mexicanos prueban suerte en esta 38° edición del festival: Alba Moncayo e Iván Niebla vienen de la compañía Alebrije de Guadalajara, con un número que mezcla cintas aéreas y fuerza capilar, una disciplina muy practicada en América Latina donde el artista se suspende a varios metros del suelo tirado de su cabellera.
“El número fue una creación con la cual trabajamos desde hace un rato. Alba aprendió a hacer fuerza capilar y se nos ocurrió mezclarlo con las cintas, y fue así como presentamos el número, lo mandamos al festival y quedamos seleccionados”, explica Iván. “Es muy interesante y muy sorprendente para le gente. Siempre te preguntan si te duele, qué sientes… Hay gente que incluso no puede verlo. Para prepararlo tienes que calentar todo tu cuerpo, porque implica más tu cuello, la cabeza… Las primeras veces piensas ‘¡me voy a quedar sin cabello!’. La sensación es muy divertida”, añade Alba.
Argentina también está presente en la competencia parisina con un dúo de cuadro aéreo conformado por Josefina Castro y Daniel Ortiz. Una pareja que trabajó los temas del amor y la cólera dentro de un número que desafía la gravedad.
“Es básicamente volar por las aires, pero es diferente al trapecio. (…) Nunca habíamos estado en otro festival tan grande”, precisa Daniel. Josefina destaca la felicidad que sienten al participar de este evento, “más allá de los resultados: el hecho de actuar acá, en esta carpa que es increíble, con todas las comodidades que te dan y el escenario que es maravilloso”.
El Festival Mundial del Circo de Mañana se desarrolla en París hasta el domingo próximo, cuando se entreguen las medallas de oro, plata y bronce y otros premios especiales de este certamen considerado los “Juegos Olímpicos del circo”.
