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Alberto Robles: “Será difícil generar consenso para un proyecto único de educación superior”

El Presidente de la Comisión de Educación de la Cámara de Diputados se refirió a la posibilidad que expresó la ministra Adriana Delpiano respecto de presentar un proyecto único de Reforma a la Educación Superior. "Soy partidario de avanzar en lo que estamos de acuerdo y fortalecer la educación pública".

Claudio Medrano

  Martes 28 de febrero 2017 19:06 hrs. 
alberto robles

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El legislador radical, Alberto Robles, será el encargado de presidir la comisión de Educación en la Cámara Baja este año, y desde ese punto de vista, conversó con Radio Universidad de Chile respecto de la tramitación de la Reforma a la Educación Superior en el último año de gobierno de Michelle Bachelet.

Al respecto, el diputado se refirió a las declaraciones que entregó hace unos días la ministra del ramo Adriana Delpiano sobre la posibilidad de presentar la Reforma a la Educación Superior en un solo proyecto, en esa línea, el parlamentario aseguró que le confidenció a la ministra que “será extremadamente difícil generar un consenso al respecto” y agregó que es partidario de avanzar en los acuerdos y fortalecer la educación pública.

¿Qué expectativas tiene del trabajo que se realizará en el parlamento este 2017?

Creo que la reforma más importante que está hoy en día en el Parlamento, en términos de la visión personal, es la reforma de la Nueva Educación Pública que está en el Senado y que espero se apruebe lo antes posible. Espero que el Senado la despache antes de abril para que ya en mayo sea ley de la República y la Presidenta lo pueda anunciar el próximo 21 de mayo. La otra reforma importante, y que está en la Cámara de Diputados, es la reforma a la educación superior. Esperamos que el Ejecutivo envíe luego las indicaciones para poder avanzar porque todavía estamos entrampados. No hemos tenido una respuesta, no solo del Ejecutivo, sino que del punto de vista legislativo para poder resolver un tema que para la sociedad chilena es muy importante.

Respecto de la ley de Nueva Educación Pública, se anunció que se presentará un nuevo proyecto de ley por la ley de Subvención de Educación Preferencial. ¿Qué le parece esa medida?

Es una cosa muy importante y requiere de una urgencia inmediata y por una razón muy simple: es un proyecto que tiene que ver con varias comunas de nuestro país, en donde hay alcaldes que lo hicieron mal, donde se hizo una muy mala gestión y donde los nuevos alcaldes no puedes hacerse cargo de la mala gestión del alcalde anterior. Hay que buscar una forma de arreglar esa situación.

Respecto de la reforma a la educación superior, la ministra Delpiano señaló que la Presidenta es partidaria presentar un solo proyecto. ¿Usted concuerda con eso?

Desde que partió la discusión le planteé a la ministra que a mi me parecía que tratar de lograr consensos, en todos los ámbitos de la educación superior en un solo proyecto, iba a ser extremadamente difícil, sobre todo, pensando en los intereses que están en juego de muchos planteles que ven un riesgo en términos de una reforma, sobre todo en lo financiero.

Planteé a la ministra que lo que no podemos hacer hoy en día es no avanzar. Siempre he sido partidario de avanzar en aquello que tenemos acuerdo. Uno de los acuerdos que tomamos antes de fin de año es que, a lo menos, tenemos que sacar una reforma que fortalezca la educación pública y eso significa que fortalezca a los planteles del Estado, con un sistema nuevo de gobernanza, con un apoyo fuerte a las universidades del Estado, pero también sin dejar de pensar que en Chile la contribución pública de las universidades del CRUCH es muy importante, algo que no podemos desconocer.

Ese es el foco desde donde debemos partir este año, ya sea a través de una indicación sustitutiva del mismo proyecto o a través de otro proyecto.

¿Que le parece que se incluya un capítulo especial para el Consejo de Rectores?

Primero que nada debe haber, si es que la idea es mantener el mismo proyecto, un esfuerzo de potenciar primero las universidades del Estado y, una vez hecho ese esfuerzo, el paso siguiente es fortalecer al CRUCH, ambas cosas son muy necesarias y particularmente las universidades públicas que requieren de un fortalecimiento importante para su desarrollo y seguir contribuyendo al país.

¿Cómo será la relación con los actores sociales durante el debate? Los estudiantes y, en su momento los rectores, denunciaron que se sintieron desplazados de la discusión.

Yo diría que, por lo menos en la Cámara, hemos escuchado absolutamente a todos, hemos invitado a todos los rectores de todos los sistemas. Ahora, si hay una indicación sustitutiva muy distinta a lo que hemos estado discutiendo, tendremos que invitarlos de nuevo a plantear sus puntos de vista, pero mientras no tengamos claridad respecto de las indicaciones, difícilmente podremos avanzar en la discusión legislativa.

Respecto del desarrollo del debate, ¿qué tanto pueden influir las presiones que provienen del sector privado?

Yo creo que en este tema tenemos que tener una mirada de Estado y, en ese sentido, más que las presiones por intereses particulares, hay que mirar aquellos elementos que sirven para el desarrollo del país en su conjunto. El sector privado es un sector importante que ha desarrollado una gestión importante en la educación, particularmente las instituciones privadas del CRUCH, pero no menos importante son las universidades privadas, no CRUCH, que hoy día tienen una cantidad de alumnos relevante desde el punto de vista nacional.

Esos antecedentes me llevan a hablar de la necesidad de una mirada de Estado. No mirarse al ombligo, tampoco privilegiar los intereses personales de cada institución, sino que tener una mirada más amplia. Esa es una posición mayoritaria en el Parlamento.

¿Qué tanto más se podrá profundizar en algunos aspectos como, por ejemplo, la gratuidad?

Con la gratuidad tenemos un conflicto serio porque hemos estado legislando a través de glosa y no se han podido legislar todos los aspectos necesarios del proyecto, por lo tanto, me parece que la gratuidad, dado que influye enormemente en los aspectos financieros de las instituciones, tiene que ser un debate que se dé en forma completa.

El legislar por glosa es inadecuado y, así como van las cosas, en una de esas terminamos este año legislando por glosa nuevamente, algo que a mi no me gustaría.

La ministra Delpiano señaló que los dineros de la Reforma Tributaria destinados a educación ya se gastaron, recursos que supuestamente financiarían la gratuidad.

Lo cierto es que la Reforma Tributaria, que en un minuto se pensó que iba a resolver los temas de la educación de forma completa, nos tiene con un presupuesto muy acotado en otras cosas. Eso no significa que no podamos avanzar en los criterios por los cuales se debe regir la gratuidad, eso puede quedar en la ley, independiente del ritmo de crecimiento que la gratuidad pueda tener.

¿Existe algún tipo de presión respecto de que lo que pueda salir del trabajo parlamentario influya en el debate electoral?

Yo creo que una de las presiones que queremos dar es que salga la Nueva Educación Pública, creemos que es tan importante que, aunque no aparezcan cambios significativos en la reforma a la Educación Superior, es una ley que debe salir, por lo tanto vamos a enfocar nuestra presión allá.

Yo he presionado también, y lamentablemente no he tenido mucho éxito, en términos de dar un debate respecto de la educación inicial. Soy un convencido de que estamos llegando tarde y tenemos que partir fortaleciendo el desarrollo educativo y emocional de los niños entre 0 y 6 años. Es ahí donde se puede hacer el cambio en términos societarios y, si bien hemos avanzado al respecto, creo que falta todavía un esfuerzo mayor, para asegurar a todos los niños una posibilidad real de igualar las oportunidades que tengan esos chicos cuando sean adolescentes y adultos. Creo que en ese sentido, el próximo gobierno debe asumir este problema como un foco importante.

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