Un nuevo capítulo, y todo apunta a que será uno de los últimos, fue el que sumó el proceso judicial que se lleva adelante sobre la Universidad Arcis, luego que el Cuarto Juzgado Civil de Santiago decretara liquidación forzosa de la institución, haciendo su cierre cada vez más inminente.
Recordemos que la casa de estudios mantiene una deuda de 85 millones de pesos con una empresa de seguridad que les brindaba servicios, situación que hizo patente la crisis que vivía el plantel luego de la salida del Partido Comunista de su administración, situación que también llevó a que en la Cámara de Diputados se formara una comisión investigadora.
En la resolución del tribunal se indica que el “liquidador titular antes designado deber proceder a la incautación bajo inventario de todos los bienes de la empresa deudora, sus libros y documentos. Para este objeto se le prestar por Carabineros, el auxilio de la fuerza pública, con la sola exhibición de la copia autorizada de la Resolución de Liquidación”.
En tanto, el abogado querellante del caso, Pablo Figueroa, señaló a Radio Bío-Bío que “todos los bienes de la universidad se incautan y quedan a disposición del liquidador. El administrador provisional cesa su cargo, y el futuro de la universidad es liquidado. Se realizará una junta de acreedores con la posibilidad de que se plantee la continuidad de giro, tal como ocurrió con la Universidad del Mar, para iniciar el proceso de cierre de la universidad hasta que se termine o salga el último estudiante”.
El abogado Figueroa, además señaló que la venta de las sedes de las calles Libertad y Compañía seguirá adelante, toda vez que dichos inmuebles no son propiedad de la institución de educación superior.
Esta decisión de la justicia es inapelable, y se da en momentos que el Ministerio de Educación había dado plazo hasta inicios de marzo para evaluar la viabilidad de la universidad, cuando se tuviera certeza del número de matriculados en ella, el que no debía ser menor a 500 estudiantes.
Un nuevo capítulo, y todo apunta a que será uno de los últimos, fue el que sumó el proceso judicial que se lleva adelante sobre la Universidad Arcis, luego que el Cuarto Juzgado Civil de Santiago decretara liquidación forzosa de la institución, haciendo su cierre cada vez más inminente.
Recordemos que la casa de estudios mantiene una deuda de 85 millones de pesos con una empresa de seguridad que les brindaba servicios, situación que hizo patente la crisis que vivía el plantel luego de la salida del Partido Comunista de su administración, situación que también llevó a que en la Cámara de Diputados se formara una comisión investigadora.
En la resolución del tribunal se indica que el “liquidador titular antes designado deber proceder a la incautación bajo inventario de todos los bienes de la empresa deudora, sus libros y documentos. Para este objeto se le prestar por Carabineros, el auxilio de la fuerza pública, con la sola exhibición de la copia autorizada de la Resolución de Liquidación”.
En tanto, el abogado querellante del caso, Pablo Figueroa, señaló a Radio Bío-Bío que “todos los bienes de la universidad se incautan y quedan a disposición del liquidador. El administrador provisional cesa su cargo, y el futuro de la universidad es liquidado. Se realizará una junta de acreedores con la posibilidad de que se plantee la continuidad de giro, tal como ocurrió con la Universidad del Mar, para iniciar el proceso de cierre de la universidad hasta que se termine o salga el último estudiante”.
El abogado Figueroa, además señaló que la venta de las sedes de las calles Libertad y Compañía seguirá adelante, toda vez que dichos inmuebles no son propiedad de la institución de educación superior.
Esta decisión de la justicia es inapelable, y se da en momentos que el Ministerio de Educación había dado plazo hasta inicios de marzo para evaluar la viabilidad de la universidad, cuando se tuviera certeza del número de matriculados en ella, el que no debía ser menor a 500 estudiantes.
Un nuevo capítulo, y todo apunta a que será uno de los últimos, fue el que sumó el proceso judicial que se lleva adelante sobre la Universidad Arcis, luego que el Cuarto Juzgado Civil de Santiago decretara liquidación forzosa de la institución, haciendo su cierre cada vez más inminente.
Recordemos que la casa de estudios mantiene una deuda de 85 millones de pesos con una empresa de seguridad que les brindaba servicios, situación que hizo patente la crisis que vivía el plantel luego de la salida del Partido Comunista de su administración, situación que también llevó a que en la Cámara de Diputados se formara una comisión investigadora.
En la resolución del tribunal se indica que el “liquidador titular antes designado deber proceder a la incautación bajo inventario de todos los bienes de la empresa deudora, sus libros y documentos. Para este objeto se le prestar por Carabineros, el auxilio de la fuerza pública, con la sola exhibición de la copia autorizada de la Resolución de Liquidación”.
En tanto, el abogado querellante del caso, Pablo Figueroa, señaló a Radio Bío-Bío que “todos los bienes de la universidad se incautan y quedan a disposición del liquidador. El administrador provisional cesa su cargo, y el futuro de la universidad es liquidado. Se realizará una junta de acreedores con la posibilidad de que se plantee la continuidad de giro, tal como ocurrió con la Universidad del Mar, para iniciar el proceso de cierre de la universidad hasta que se termine o salga el último estudiante”.
El abogado Figueroa, además señaló que la venta de las sedes de las calles Libertad y Compañía seguirá adelante, toda vez que dichos inmuebles no son propiedad de la institución de educación superior.
Esta decisión de la justicia es inapelable, y se da en momentos que el Ministerio de Educación había dado plazo hasta inicios de marzo para evaluar la viabilidad de la universidad, cuando se tuviera certeza del número de matriculados en ella, el que no debía ser menor a 500 estudiantes.
