Fueron semanas tensas las que se vivieron al interior de la ANFP producto de la negociación para aprobar el sistema de campeonato que se implementará de ahora en adelante en el fútbol profesional chileno.
Esto por la negativa de los clubes de Primera B de aprobar un campeonato que no contemplara ascensos directos en el campeonato de transición que se jugará en el segundo semestre de este año, norma que llevó incluso a los presidentes de la segunda división a boicotear la votación de las bases provocando la molestia del directorio que encabeza Arturo Salah.
Incluso se habló de la posibilidad de que Salah y su directorio renunciaran a sus cargos y que el Sindicato de Futbolistas Profesionales amenazaran con paralizar la competencia si es que no se aprobaba el campeonato acordado con la ANFP.
Finalmente y luego de varias reuniones, la Primera B dio pie atrás en su postura y decidió apoyar la propuesta del directorio, pese a que no los convencía plenamente. De esta forma, el campeón de la Primera B del torneo de Transición, deberá jugar un partido de definición con el peor promedio de la Primera A.
Pablo Milad, presidente de Curicó Unido y uno de los voceros de la Primera B, analizó con Radio y Diario Universidad de Chile las implicancias que tendrá este acuerdo para el fútbol nacional.
¿Cuál es el balance que hace usted de todo este proceso de negociación que se vivió en la ANFP?
El proceso tuvo sus inconvenientes porque nos sentimos vulnerados por nuestros derechos competitivos, por el pacto que se hizo con el SIFUP, pero bueno, tu sabes que esto tiene sus pros y sus contras siempre y alguien tiene que salir perjudicado. Lamentablemente salimos un poco perjudicados nosotros pero en pos de una mejora y de solucionar los problemas aceptamos el pacto que hubo con el Sindicato de Futbolistas que fue una solución en la cual también participé como Comisión de competiciones y se llegó al acuerdo que es conocido por todos. Nosotros siempre quisimos llegar a un acuerdo donde todos tuviesen las mismas oportunidades que tiene la Primera A normalmente que es una opción más de salvarse del descenso y así lo pretendíamos también con el último que salga del equipo B, lamentablemente no se consiguió pero con altura de miras y una visión de arreglar una vez por todas el problema que hubo en el Consejo, donde se retiraron la mayoría de los presidentes, llegar a un equilibrio, llegar a un consenso, igual sentimos que cedimos bastante para arreglar este paro que hubo del SIFUP y nosotros fuimos los perjudicados en el fondo, pero todo es para mejorar la competición y sacar esto adelante.
¿La decisión de aprobar la propuesta del directorio pasó únicamente por el acuerdo que existía con el SIFUP, no por un convencimiento de que era lo mejor para el campeonato?
Exactamente, además que si nos pegamos a lo que es los estatutos y las bases era ir en contra de ello, o sea, seamos francos, así no se podía solucionar si nos ceñimos solamente a las bases del campeonato no se podría haber considerado el campeonato 2016/17 con coeficiente de rendimiento si no aparecía en las bases y sí aparece en las bases del campeonato de transición 2017 que si apeláramos o acudiéramos a otra instancia no se tendría que aprobar, pero nosotros optamos por la vía más limpia, más llana para solucionar de una vez por todas y no seguir dando espectáculo e incongruencias y de tanta diferencias que hay a veces con el directorio, pero sacamos algo muy bueno que es mejorar la comunicación que es el fondo de llegar a desacuerdos, llegar a un equilibrio, para eso se requiere trabajar con tiempo cuando las cosas están dadas y manifestadas en una forma total, sino que con unos meses de anticipación porque este era un punto de desequilibrio entre nosotros, donde nos abstuvimos completamente de esta negociación con el SIFUP por encontrar en ese momento que nos perjudicaba.
¿Qué se necesita cambiar para evitar llegar a escenarios como el que pasó?
Primero detectar cuáles son los puntos de conflicto y en base a esos puntos tratarlos con anticipación, que es una de las sugerencias que le hicimos al directorio, pero esto tiene que ser en todos los temas no solamente en esto, hay temas que nosotros hemos estado tratando que nos escuchen hace mucho tiempo y no ha sido así. Pero ellos están conscientes de la situación y mostraron la mejor disposición para hacer un cambio y tener reuniones periódicas con nosotros que siempre los de la B somos un poquito, por decirlo, más perjudicados siempre porque los presidentes de la A han botado por nuestros campeonatos y hemos tenido unos campeonatos horribles, como este por ejemplo, donde sube un solo equipo, no hay liguillas, no hay nada y también así los que han sido en los últimos años, donde los equipos que estaban en la medianía de la tabla ya no tenían nada qué jugarse, todo eso hay que considerarlo cuando se hacen campeonatos y qué mejor que hablar con nosotros que somos los que hemos vivido esos campeonatos tan aburridos.
Las declaraciones de parte de la directiva de la ANFP, incluyendo su presidente, donde se dejó de manifiesto la posibilidad de que renunciaran a sus cargos ¿condicionaron mucho el debate?
No, creo que fue una situación puntual y quedó claro de que siempre nosotros, de cierta forma, tenemos una visión diferente a ellos, pero más que nada por el manejo, por a lo mejor, la forma de llevar esto. Más que el fondo es la forma y eso lo aclaramos, ellos están conscientes de la situación y quedamos en buena lid, en una relación muy buena y eso es lo que queremos. No buscamos que las cosas se impongan, queremos que las cosas se conversen, que se llegue a un equilibrio, una armonía porque cada uno va a defender los derechos de su club y de su división. Te diría que nosotros los de la B estamos mucho más unidos que los de la A, tenemos una visión homogénea, una visión globalista y de grupo y eso ha ayudado a que seamos compactos y más escuchado hoy en día, antiguamente no teníamos ni voz, ni voto.