En menos de 24 horas el escenario político dentro de la Nueva Mayoría cambió drásticamente. Luego de la decisión del ex presidente Ricardo Lagos de bajarse de la carrera presidencial, -a raíz de la falta de convergencia política en torno a su candidatura-, la Democracia Cristiana transparentó lo que hasta la semana pasada era un secreto a voces: su intención de competir directamente en una primera vuelta presidencial.

Si bien desde los partidos que integran el bloque oficialista han insistido en la necesidad de fortalecer la unidad y los acuerdos para dar continuidad a la Nueva Mayoría, según lo han reconocido sus propios dirigentes, por primera vez desde su conformación, el bloque de centro izquierda corre el riesgo de desmoronarse.

Una tensión que se refleja en las declaraciones de dirigentes del pacto quienes advertían el complejo momento por el que atraviesa la coalición.

El recién asumido presidente del Partido Socialista, Álvaro Elizalde señaló luego del comité político en La Moneda, que la responsabilidad con el país está en realizar primarias legales en julio, lo que generó una fuerte reacción por parte de sus socios históricos de la Falange.

El secretario general de la Democracia Cristiana, Gonzalo Duarte, llamó al líder del PS a tener respeto por las decisiones internas de su partido.

“Está recién iniciando su gestión de presidente, por lo tanto va a tener que aprender a ser más cuidadoso con sus dichos, creo que entrar a calificar y a adjetivar las decisiones autónomas de los partidos no es lo conveniente. Y desde ese punto de vista, como yo respeto al Partido Socialista, le exijo a su presidente que respete la autonomía de decisión de la Democracia Cristiana”, subrayó Duarte.

El senador DC y presidente del Senado, Andrés Zaldívar, -quien desde un comienzo fue partidario de las primarias-, aseguró que “no veo que la Democracia Cristiana pueda ir a una primaria en la cual los otros miembros de la coalición estén con otro candidato, no podemos ir cinco contra uno, es imposible”.

La misma postura expresó la candidata presidencial de ese partido, Carolina Goic, quien dijo que “se hace muy difícil una primaria entre dos candidatos”.

En el Partido Comunista, en tanto, esperarán hasta el 21 de este mes para decidir entre apoyar a Alejandro Guillier o presentar una carta presidencial propia Paralelamente en la colectividad avanza el acuerdo programático con el PRO, el que podría traducirse en un pacto parlamentario.

En relación al escenario interno de la coalición, el líder del PC, Guillermo Teilllier, enfatizó que ahora habrá que “atenerse a las consecuencias”, apuntando a lo que decida la Democracia Cristiana.

“Ahora hay que atenerse a las consecuencias que eso puede tener y que puede tener sobre todo en las decisiones de la Democracia Cristiana y por lo visto ya es muy difícil que se vayan a recomponer primarias (…) estamos ante un escenario en que lo más probable es que tengamos dos candidatos presidenciales de la Nueva Mayoría en primera vuelta”, adelantó el dirigente comunista.

Más categórico fue el presidente del Partido Radical, Ernesto Velasco, quien reiteró que con la llegada de ambos candidatos a primera vuelta se terminaría la actual coalición de centro-izquierda.

“Yo creo que, sin duda, lo que hoy día está en juego es la unidad de la centro-izquierda. Si alguien va a primera vuelta se acaba la Nueva Mayoría y se acaba la centro-izquierda como la conocemos hoy día. El día de mañana podremos reconstruirla, buscaremos mecanismos y eso siempre es posible”, comentó el presidente de los radicales.

Sin embargo, el dirigente del PR afirmó que Alejandro Guillier competirá “hasta el final” y no condicionará su candidatura a una primaria oficialista como lo había asegurado en reiteradas ocasiones.

En tanto el PPD definirá en un próximo Consejo Nacional si respalda al abanderado PR-PS o a Carolina Goic, descartando levantar una carta propia a La Moneda tras la derrota de Lagos.