Este miércoles llegaron hasta las oficinas del Ministerio de Transportes las empresas que participarán en la nueva licitación de Transantiago, que abarca el 50 por ciento de los recorridos en la Región Metropolitana. Fueron siete las que se presentaron con sus propuestas, en un trámite que no estuvo exento de polémicas durante los últimos días, cuando una compañía recurrió al Tribunal de la Libre Competencia para aplicar una suspensión acusando barreras para los nuevos postulantes.
El fin de esta etapa de la licitación incorporó aspectos que fueron destacados por el subsecretario de Transportes, Carlos Melo, respecto del trabajo zonal que se realizó en los distintos sectores para disponer de servicios que se hagan cargo, en cierta medida, de las carencias del sistema..
“En esa consulta se analizaron algunos recorridos que tenían muchos trasbordos, entonces se modificaron ciertos trazados para que fueran recorridos más directos. En cierta medida, es volver a los recorridos antiguos de las micros amarillas, que eran más largos. Hay hartos cambios también: el pago por kilómetro recorrido, el tema de estándar de calidad y servicio. Es una licitación que es un avance”, dice Rodrigo Martin, experto en transporte urbano y académico de la Universidad de Santiago.
La falta de competencia
Al lado de las más de 60 empresas que compraron las bases de licitación, que solo sean siete las que decidieron participar, resulta desilusionante. Así lo afirma Franco Basso, académico de la Facultad de Ingeniería y Ciencias de la Universidad Diego Portales. El experto además aborda una particularidad que se dio en relación a las empresas que ya están dentro del sistema y que volvieron a participar.
“Si nosotros analizamos las seis unidades de negocio que se están licitando en este caso para el 50 por ciento de la operación, nosotros vemos que de los incumbentes hay solo una postulación por unidad de negocio. Hubiera sido deseable que justamente esos operadores con más experiencia en el sistema, hubiesen podido participar por mayores unidades de negocios, de modo de mejorar la competencia”, expresa.
El precedente anterior hace referencia a las empresas Redbus, Vulebus, STP y Metbus. “Desde un punto de vista del usuario se podría prestar para interpretaciones”, agrega Franco Basso.
La situación se le consultó este jueves en la mañana a la ministra de Transportes, Paola Tapia, quien evitó referirse al tema.
“No nos corresponde como autoridad referirnos a eso. Sí al proceso público y transparente que hemos realizado, y por tanto nosotros estamos muy claro que esta licitación ha sido un éxito en esta fase en cuanto a recibir ofertas”, manifestó.
Los resultados deberían estar en 70 días, y se anunciaría antes del comienzo del segundo mandato de Sebastián Piñera. Se sospechó que las palabras del futuro Presidente para potenciar el Metro en desmedro de las micros impactó en el interés de las empresas por participar del proceso. Pero igual se valoró de manera transversal que en las bases se hayan incluido estándares como la contaminación, renovación de flota, buses de mejor calidad.
Este miércoles llegaron hasta las oficinas del Ministerio de Transportes las empresas que participarán en la nueva licitación de Transantiago, que abarca el 50 por ciento de los recorridos en la Región Metropolitana. Fueron siete las que se presentaron con sus propuestas, en un trámite que no estuvo exento de polémicas durante los últimos días, cuando una compañía recurrió al Tribunal de la Libre Competencia para aplicar una suspensión acusando barreras para los nuevos postulantes.
El fin de esta etapa de la licitación incorporó aspectos que fueron destacados por el subsecretario de Transportes, Carlos Melo, respecto del trabajo zonal que se realizó en los distintos sectores para disponer de servicios que se hagan cargo, en cierta medida, de las carencias del sistema..
“En esa consulta se analizaron algunos recorridos que tenían muchos trasbordos, entonces se modificaron ciertos trazados para que fueran recorridos más directos. En cierta medida, es volver a los recorridos antiguos de las micros amarillas, que eran más largos. Hay hartos cambios también: el pago por kilómetro recorrido, el tema de estándar de calidad y servicio. Es una licitación que es un avance”, dice Rodrigo Martin, experto en transporte urbano y académico de la Universidad de Santiago.
La falta de competencia
Al lado de las más de 60 empresas que compraron las bases de licitación, que solo sean siete las que decidieron participar, resulta desilusionante. Así lo afirma Franco Basso, académico de la Facultad de Ingeniería y Ciencias de la Universidad Diego Portales. El experto además aborda una particularidad que se dio en relación a las empresas que ya están dentro del sistema y que volvieron a participar.
“Si nosotros analizamos las seis unidades de negocio que se están licitando en este caso para el 50 por ciento de la operación, nosotros vemos que de los incumbentes hay solo una postulación por unidad de negocio. Hubiera sido deseable que justamente esos operadores con más experiencia en el sistema, hubiesen podido participar por mayores unidades de negocios, de modo de mejorar la competencia”, expresa.
El precedente anterior hace referencia a las empresas Redbus, Vulebus, STP y Metbus. “Desde un punto de vista del usuario se podría prestar para interpretaciones”, agrega Franco Basso.
La situación se le consultó este jueves en la mañana a la ministra de Transportes, Paola Tapia, quien evitó referirse al tema.
“No nos corresponde como autoridad referirnos a eso. Sí al proceso público y transparente que hemos realizado, y por tanto nosotros estamos muy claro que esta licitación ha sido un éxito en esta fase en cuanto a recibir ofertas”, manifestó.
Los resultados deberían estar en 70 días, y se anunciaría antes del comienzo del segundo mandato de Sebastián Piñera. Se sospechó que las palabras del futuro Presidente para potenciar el Metro en desmedro de las micros impactó en el interés de las empresas por participar del proceso. Pero igual se valoró de manera transversal que en las bases se hayan incluido estándares como la contaminación, renovación de flota, buses de mejor calidad.
Este miércoles llegaron hasta las oficinas del Ministerio de Transportes las empresas que participarán en la nueva licitación de Transantiago, que abarca el 50 por ciento de los recorridos en la Región Metropolitana. Fueron siete las que se presentaron con sus propuestas, en un trámite que no estuvo exento de polémicas durante los últimos días, cuando una compañía recurrió al Tribunal de la Libre Competencia para aplicar una suspensión acusando barreras para los nuevos postulantes.
El fin de esta etapa de la licitación incorporó aspectos que fueron destacados por el subsecretario de Transportes, Carlos Melo, respecto del trabajo zonal que se realizó en los distintos sectores para disponer de servicios que se hagan cargo, en cierta medida, de las carencias del sistema..
“En esa consulta se analizaron algunos recorridos que tenían muchos trasbordos, entonces se modificaron ciertos trazados para que fueran recorridos más directos. En cierta medida, es volver a los recorridos antiguos de las micros amarillas, que eran más largos. Hay hartos cambios también: el pago por kilómetro recorrido, el tema de estándar de calidad y servicio. Es una licitación que es un avance”, dice Rodrigo Martin, experto en transporte urbano y académico de la Universidad de Santiago.
La falta de competencia
Al lado de las más de 60 empresas que compraron las bases de licitación, que solo sean siete las que decidieron participar, resulta desilusionante. Así lo afirma Franco Basso, académico de la Facultad de Ingeniería y Ciencias de la Universidad Diego Portales. El experto además aborda una particularidad que se dio en relación a las empresas que ya están dentro del sistema y que volvieron a participar.
“Si nosotros analizamos las seis unidades de negocio que se están licitando en este caso para el 50 por ciento de la operación, nosotros vemos que de los incumbentes hay solo una postulación por unidad de negocio. Hubiera sido deseable que justamente esos operadores con más experiencia en el sistema, hubiesen podido participar por mayores unidades de negocios, de modo de mejorar la competencia”, expresa.
El precedente anterior hace referencia a las empresas Redbus, Vulebus, STP y Metbus. “Desde un punto de vista del usuario se podría prestar para interpretaciones”, agrega Franco Basso.
La situación se le consultó este jueves en la mañana a la ministra de Transportes, Paola Tapia, quien evitó referirse al tema.
“No nos corresponde como autoridad referirnos a eso. Sí al proceso público y transparente que hemos realizado, y por tanto nosotros estamos muy claro que esta licitación ha sido un éxito en esta fase en cuanto a recibir ofertas”, manifestó.
Los resultados deberían estar en 70 días, y se anunciaría antes del comienzo del segundo mandato de Sebastián Piñera. Se sospechó que las palabras del futuro Presidente para potenciar el Metro en desmedro de las micros impactó en el interés de las empresas por participar del proceso. Pero igual se valoró de manera transversal que en las bases se hayan incluido estándares como la contaminación, renovación de flota, buses de mejor calidad.
