La Contraloría General de La República se abstuvo de pronunciarse sobre el nombramiento del hermano de Sebastián Piñera, Pablo Piñera, como embajador en Argentina.

El ente fiscalizador tardó tan solo 18 días desde que el Partido Socialista junto con el Comunista presentaran un requerimiento para revertir la decisión del mandatario, que en todo caso declinó de tal solo días después por la polémica en torno al nepotismo que generó el nombramiento.

El comunicado de la Contraloría argumenta que su abstención es motivada por la determinación del mandatario de desistir con el nombramiento.

“En razón de lo expuesto, esta Entidad Fiscalizadora se abstiene de emitir el pronunciamiento solicitado”, concluye el documento, firmado por Camilo Mirosevic Verdugo, jefe de la división jurídica de la Contraloría y hermano del diputado del Partido Liberal Vlado Mirosevic.

Pese a que el contralor general dela República, Jorge Bermúdez, había afirmado que la respuesta de la Contraloría al requerimiento presentado por el grupo de diputados socialistas podía tardar hasta seis meses, ésta se emitió el 9 de mayo, mismo día en que se publicó el dictamen que señalaba que el protocolo de objeción de conciencia del aborto no se ajustaba a derecho.