La petrolera, con sede en Chile, actualmente tiene licencia para explorar en el Lote 64 en Perú. La federación, FENAP, también acusó a GeoPark de fomentar conflictos entre comunidades indígenas en esta zona.
Además de los múltiples pronunciamientos públicos desde diciembre de 2016, cuando el gobierno peruano aprobó los planes de la empresa, los Achuar de la cuenca del Río Pastaza reiteraron en un nuevo video, publicado por la ONG estadounidense Amazon Watch, su rechazo a las operaciones petroleras en su territorio ancestral.
El Lote 64, localizado en el norte de la Amazonía peruana, al lado de la frontera con Ecuador, fue creado en 1995. Desde esa fecha, varias petroleras internacionales han adquirido la concesión para luego abandonarla. En el medio local “Contra Luz”, el presidente de FENAP, Jeremías Petseín, explicó las razones del descontento.
“Para ingresar en nuestro territorio, esta empresa no ha consultado a las autoridades de la comunidad ni a las organizaciones, entonces nosotros hemos dicho no a las empresas petroleras”
Geopark, que cotiza en la bolsa de Nueva York, es una empresa constituida por capitales estadounidenses, chilenos y de la Corporación Financiera Internacional (IFC) del Banco Mundial. En la actualidad, esta transnacional opera en Argentina, Brasil, Chile, Colombia y Perú.
El dirigente indígena en Perú advirtió sobre las posibles consecuencias de este tipo de proyectos.
“Enfermedades comunes que nuestros ancestros no conocían, las contaminaciones, hepatitis b, todas estas enfermedades están sufriendo los hermanos Achuar del Río corrientes y los Achuar de Morona”.
Previo a la Junta, Andrew Miller, Director de Incidencia para Amazon Watch, agregó: “sus inversionistas deben anticipar que la actividad de GeoPark en territorio Achuar será una desventaja con riesgos legales, financieros y de reputación”.
En nuestro país, desde el Observatorio Latinoamericano de Conflicto Ambientales – OLCA, expresaron su “profunda solidaridad con pueblo Achuar”.
Agregaron que el actuar de Geopark “no ha estado exento de conflictividad y la situación de irregularidades denunciadas en Perú, se han visto a lo largo de sus operaciones en Latinoamérica”.
En el Observatorio plantearon que “en Chile, por ejemplo, la empresa posee cargos de incumplimientos ambientales en diversas instituciones a cargo de fiscalizar sus operaciones, en 2016, ya que desarrolló durante al menos 2014 y 2015 acciones de fractura hidráulica o Fracking en diferentes pozos en Tierra del Fuego, sin contar con los permisos ambientales para su realización, además de poseer denuncias de incumplimiento de contratos de operación con el Estado”.
Recordando que dichas operaciones en la región magallánica son realizadas en sociedad con el Estado chileno, a través de la Empresa Nacional del Petróleo – ENAP”.
En junio pasado, el diario “Gestión” de Perú informó que GeoPark invertirá US$ 200 millones para poner en producción dos pozos en el lote 64 de Loreto. Ese mes presentarían el estudio de Impacto ambiental y esperaban su aprobación para finales de este año. Desde la empresa se informó que también avanzan en otros estudios de exploración.
La petrolera, con sede en Chile, actualmente tiene licencia para explorar en el Lote 64 en Perú. La federación, FENAP, también acusó a GeoPark de fomentar conflictos entre comunidades indígenas en esta zona.
Además de los múltiples pronunciamientos públicos desde diciembre de 2016, cuando el gobierno peruano aprobó los planes de la empresa, los Achuar de la cuenca del Río Pastaza reiteraron en un nuevo video, publicado por la ONG estadounidense Amazon Watch, su rechazo a las operaciones petroleras en su territorio ancestral.
El Lote 64, localizado en el norte de la Amazonía peruana, al lado de la frontera con Ecuador, fue creado en 1995. Desde esa fecha, varias petroleras internacionales han adquirido la concesión para luego abandonarla. En el medio local “Contra Luz”, el presidente de FENAP, Jeremías Petseín, explicó las razones del descontento.
“Para ingresar en nuestro territorio, esta empresa no ha consultado a las autoridades de la comunidad ni a las organizaciones, entonces nosotros hemos dicho no a las empresas petroleras”
Geopark, que cotiza en la bolsa de Nueva York, es una empresa constituida por capitales estadounidenses, chilenos y de la Corporación Financiera Internacional (IFC) del Banco Mundial. En la actualidad, esta transnacional opera en Argentina, Brasil, Chile, Colombia y Perú.
El dirigente indígena en Perú advirtió sobre las posibles consecuencias de este tipo de proyectos.
“Enfermedades comunes que nuestros ancestros no conocían, las contaminaciones, hepatitis b, todas estas enfermedades están sufriendo los hermanos Achuar del Río corrientes y los Achuar de Morona”.
Previo a la Junta, Andrew Miller, Director de Incidencia para Amazon Watch, agregó: “sus inversionistas deben anticipar que la actividad de GeoPark en territorio Achuar será una desventaja con riesgos legales, financieros y de reputación”.
En nuestro país, desde el Observatorio Latinoamericano de Conflicto Ambientales – OLCA, expresaron su “profunda solidaridad con pueblo Achuar”.
Agregaron que el actuar de Geopark “no ha estado exento de conflictividad y la situación de irregularidades denunciadas en Perú, se han visto a lo largo de sus operaciones en Latinoamérica”.
En el Observatorio plantearon que “en Chile, por ejemplo, la empresa posee cargos de incumplimientos ambientales en diversas instituciones a cargo de fiscalizar sus operaciones, en 2016, ya que desarrolló durante al menos 2014 y 2015 acciones de fractura hidráulica o Fracking en diferentes pozos en Tierra del Fuego, sin contar con los permisos ambientales para su realización, además de poseer denuncias de incumplimiento de contratos de operación con el Estado”.
Recordando que dichas operaciones en la región magallánica son realizadas en sociedad con el Estado chileno, a través de la Empresa Nacional del Petróleo – ENAP”.
En junio pasado, el diario “Gestión” de Perú informó que GeoPark invertirá US$ 200 millones para poner en producción dos pozos en el lote 64 de Loreto. Ese mes presentarían el estudio de Impacto ambiental y esperaban su aprobación para finales de este año. Desde la empresa se informó que también avanzan en otros estudios de exploración.
La petrolera, con sede en Chile, actualmente tiene licencia para explorar en el Lote 64 en Perú. La federación, FENAP, también acusó a GeoPark de fomentar conflictos entre comunidades indígenas en esta zona.
Además de los múltiples pronunciamientos públicos desde diciembre de 2016, cuando el gobierno peruano aprobó los planes de la empresa, los Achuar de la cuenca del Río Pastaza reiteraron en un nuevo video, publicado por la ONG estadounidense Amazon Watch, su rechazo a las operaciones petroleras en su territorio ancestral.
El Lote 64, localizado en el norte de la Amazonía peruana, al lado de la frontera con Ecuador, fue creado en 1995. Desde esa fecha, varias petroleras internacionales han adquirido la concesión para luego abandonarla. En el medio local “Contra Luz”, el presidente de FENAP, Jeremías Petseín, explicó las razones del descontento.
“Para ingresar en nuestro territorio, esta empresa no ha consultado a las autoridades de la comunidad ni a las organizaciones, entonces nosotros hemos dicho no a las empresas petroleras”
Geopark, que cotiza en la bolsa de Nueva York, es una empresa constituida por capitales estadounidenses, chilenos y de la Corporación Financiera Internacional (IFC) del Banco Mundial. En la actualidad, esta transnacional opera en Argentina, Brasil, Chile, Colombia y Perú.
El dirigente indígena en Perú advirtió sobre las posibles consecuencias de este tipo de proyectos.
“Enfermedades comunes que nuestros ancestros no conocían, las contaminaciones, hepatitis b, todas estas enfermedades están sufriendo los hermanos Achuar del Río corrientes y los Achuar de Morona”.
Previo a la Junta, Andrew Miller, Director de Incidencia para Amazon Watch, agregó: “sus inversionistas deben anticipar que la actividad de GeoPark en territorio Achuar será una desventaja con riesgos legales, financieros y de reputación”.
En nuestro país, desde el Observatorio Latinoamericano de Conflicto Ambientales – OLCA, expresaron su “profunda solidaridad con pueblo Achuar”.
Agregaron que el actuar de Geopark “no ha estado exento de conflictividad y la situación de irregularidades denunciadas en Perú, se han visto a lo largo de sus operaciones en Latinoamérica”.
En el Observatorio plantearon que “en Chile, por ejemplo, la empresa posee cargos de incumplimientos ambientales en diversas instituciones a cargo de fiscalizar sus operaciones, en 2016, ya que desarrolló durante al menos 2014 y 2015 acciones de fractura hidráulica o Fracking en diferentes pozos en Tierra del Fuego, sin contar con los permisos ambientales para su realización, además de poseer denuncias de incumplimiento de contratos de operación con el Estado”.
Recordando que dichas operaciones en la región magallánica son realizadas en sociedad con el Estado chileno, a través de la Empresa Nacional del Petróleo – ENAP”.
En junio pasado, el diario “Gestión” de Perú informó que GeoPark invertirá US$ 200 millones para poner en producción dos pozos en el lote 64 de Loreto. Ese mes presentarían el estudio de Impacto ambiental y esperaban su aprobación para finales de este año. Desde la empresa se informó que también avanzan en otros estudios de exploración.
