La ONU solicitó que el Estado brasileño “tome todas las medidas necesarias para permitir que Lula disfrute y ejerza sus derechos políticos como candidato a las elecciones presidenciales de 2018, desde la prisión, incluido el debido acceso a la prensa y a los integrantes de su partido político”.
Que le permita además “competir las elecciones presidenciales de 2018 hasta que todos los recursos pendientes sean revisados en un proceso justo hasta la decisión final”
Esto no significa que el comité haya encontrado, aún, una violación en contra de Lula. Es una medida urgente para proteger el derecho de Lula mientras se espera una decisión final sobre su caso”, informó a BBC News Brasil el Comité de Derechos Humanos de la ONU
Para la defensa del expresidente, esta recomendación aseguraría a Lula el derecho a participar en las elecciones, aún cuando haya sido condenado en primera y segunda instancia por corrupción pasiva y lavado de dinero a doce años de prisión, condición que lo impide de participar en las elecciones de acuerdo a la ley Ficha Limpia que prohíbe que los condenados por organismos colegiados en segunda instancia sean candidatos.
Sin embargo, incluso los países signatarios de la convención de derechos humanos de ONU no están legalmente obligados a obedecer las recomendaciones del comité, aunque no hacerlo puede tener una influencia negativa en la comunidad internacional.
La defensa de Lula ya ha manifestado que pese a la existencia de la ley Ficha Limpia, Lula podría participar. Según ellos, en uno de sus artículos existe un vacío legal, que establece que los Tribunales de instancias superiores, a pedido de los condenados, pueden suspender la inelegibilidad de los candidatos ya condenados por la Justicia.