Abogado especialista en Derecho Constitucional, Pablo Ruiz Tagle, tiene una larga carrera en el estudio y enseñanza del derecho y desde hace algunas semanas es el nuevo decano de la Facultad de Ciencias Jurídicas de la Universidad de Chile. En conversación con el periodista Patricio López, director de Radio U.de Chile, analizó su llegada al la institución.
“No esperaba competir. Estaba preparando un libro y haciendo mis cursos”, comentó el académico al referirse a su nuevo cargo. No obstante, señaló que fueron precisamente las divisiones de la institución, lo que determinó que compitiera en las elecciones que se realizaron luego de la salida del abogado Davor Harasic.
“Sentí un deber de responsabilidad. La Facultad ha pasado por muchos años de quiebre y pensé que podía, haciendo un esfuerzo importante, trabajar para unir las divisiones que existían”, apuntó.
“Ahora, se ha instalado un nuevo ambiente, un ambiente mucho más de cooperación. Este no es un asunto que me lo pueda atribuir, sino que es el resultado de los profesores, estudiantes y funcionarios que nos hemos dado una segunda oportunidad (…). Necesitamos un tiempo de paz en la Facultad para desarrollar mejor nuestra docencia, desarrollar mejor nuestra investigación, porque hemos tenido un exceso de paralizaciones y de tomas”, agregó el académico.
El académico, quien encabezará la Facultad hasta 2022, se refirió a la demanda feminista que tuvo paralizada a gran parte de las universidades por varias semanas y la calificó como una petición legítima. En ese sentido, llamó a generar un diálogo entre los diferentes estamentos para generar soluciones respecto de distintos conflictos sociales.
“Creo que ha habido una injusticia histórica respecto de las mujeres, no solo a un nivel de abuso (…). El problema que ha existido es que en la Universidad de Chile y en las universidades, y en esto voy a decir algo que es controvertido, el método que se ha usado para lograr el progreso y la transformación social han sido las tomas y a mí esto me parece profundamente equivocado”, sostuvo.
“El decano anterior llegó a contabilizar, en tres años, 280 días de tomas (…). Entonces, tenemos que buscar un método distinto, la mediación, la conciliación, el hacer propuestas de leyes que vayan a los órganos colectivos de la Facultad en la Universidad para que en el camino institucional seamos capaces de resolver los conflictos que tenemos”, añadió el académico.
Por último, se refirió al rol de la Facultad en la sociedad: “El derecho no es una técnica de control, no es una maquinaria con las cuales uno hace leyes para gobernar a las personas. El derecho tiene que ver con algo muy profundo, que es la forma civilizada en que nosotros podemos vivir juntos, pensando y actuando de manera diferente”.
“A mí me gustaría que esta imagen fuera la imagen de los egresados de la Facultad, que fueran una élite republicana que sirve al país para resaltar y destacar los valores más preciados de nuestra sociedad como son la dignidad, la justicia y la libertad”
“Nuestra responsabilidad como abogado es servir a nuestro país, de una manera armónica, con las metas, con los proyectos de la sociedad”, concluyó.
Abogado especialista en Derecho Constitucional, Pablo Ruiz Tagle, tiene una larga carrera en el estudio y enseñanza del derecho y desde hace algunas semanas es el nuevo decano de la Facultad de Ciencias Jurídicas de la Universidad de Chile. En conversación con el periodista Patricio López, director de Radio U.de Chile, analizó su llegada al la institución.
“No esperaba competir. Estaba preparando un libro y haciendo mis cursos”, comentó el académico al referirse a su nuevo cargo. No obstante, señaló que fueron precisamente las divisiones de la institución, lo que determinó que compitiera en las elecciones que se realizaron luego de la salida del abogado Davor Harasic.
“Sentí un deber de responsabilidad. La Facultad ha pasado por muchos años de quiebre y pensé que podía, haciendo un esfuerzo importante, trabajar para unir las divisiones que existían”, apuntó.
“Ahora, se ha instalado un nuevo ambiente, un ambiente mucho más de cooperación. Este no es un asunto que me lo pueda atribuir, sino que es el resultado de los profesores, estudiantes y funcionarios que nos hemos dado una segunda oportunidad (…). Necesitamos un tiempo de paz en la Facultad para desarrollar mejor nuestra docencia, desarrollar mejor nuestra investigación, porque hemos tenido un exceso de paralizaciones y de tomas”, agregó el académico.
El académico, quien encabezará la Facultad hasta 2022, se refirió a la demanda feminista que tuvo paralizada a gran parte de las universidades por varias semanas y la calificó como una petición legítima. En ese sentido, llamó a generar un diálogo entre los diferentes estamentos para generar soluciones respecto de distintos conflictos sociales.
“Creo que ha habido una injusticia histórica respecto de las mujeres, no solo a un nivel de abuso (…). El problema que ha existido es que en la Universidad de Chile y en las universidades, y en esto voy a decir algo que es controvertido, el método que se ha usado para lograr el progreso y la transformación social han sido las tomas y a mí esto me parece profundamente equivocado”, sostuvo.
“El decano anterior llegó a contabilizar, en tres años, 280 días de tomas (…). Entonces, tenemos que buscar un método distinto, la mediación, la conciliación, el hacer propuestas de leyes que vayan a los órganos colectivos de la Facultad en la Universidad para que en el camino institucional seamos capaces de resolver los conflictos que tenemos”, añadió el académico.
Por último, se refirió al rol de la Facultad en la sociedad: “El derecho no es una técnica de control, no es una maquinaria con las cuales uno hace leyes para gobernar a las personas. El derecho tiene que ver con algo muy profundo, que es la forma civilizada en que nosotros podemos vivir juntos, pensando y actuando de manera diferente”.
“A mí me gustaría que esta imagen fuera la imagen de los egresados de la Facultad, que fueran una élite republicana que sirve al país para resaltar y destacar los valores más preciados de nuestra sociedad como son la dignidad, la justicia y la libertad”
“Nuestra responsabilidad como abogado es servir a nuestro país, de una manera armónica, con las metas, con los proyectos de la sociedad”, concluyó.
Abogado especialista en Derecho Constitucional, Pablo Ruiz Tagle, tiene una larga carrera en el estudio y enseñanza del derecho y desde hace algunas semanas es el nuevo decano de la Facultad de Ciencias Jurídicas de la Universidad de Chile. En conversación con el periodista Patricio López, director de Radio U.de Chile, analizó su llegada al la institución.
“No esperaba competir. Estaba preparando un libro y haciendo mis cursos”, comentó el académico al referirse a su nuevo cargo. No obstante, señaló que fueron precisamente las divisiones de la institución, lo que determinó que compitiera en las elecciones que se realizaron luego de la salida del abogado Davor Harasic.
“Sentí un deber de responsabilidad. La Facultad ha pasado por muchos años de quiebre y pensé que podía, haciendo un esfuerzo importante, trabajar para unir las divisiones que existían”, apuntó.
“Ahora, se ha instalado un nuevo ambiente, un ambiente mucho más de cooperación. Este no es un asunto que me lo pueda atribuir, sino que es el resultado de los profesores, estudiantes y funcionarios que nos hemos dado una segunda oportunidad (…). Necesitamos un tiempo de paz en la Facultad para desarrollar mejor nuestra docencia, desarrollar mejor nuestra investigación, porque hemos tenido un exceso de paralizaciones y de tomas”, agregó el académico.
El académico, quien encabezará la Facultad hasta 2022, se refirió a la demanda feminista que tuvo paralizada a gran parte de las universidades por varias semanas y la calificó como una petición legítima. En ese sentido, llamó a generar un diálogo entre los diferentes estamentos para generar soluciones respecto de distintos conflictos sociales.
“Creo que ha habido una injusticia histórica respecto de las mujeres, no solo a un nivel de abuso (…). El problema que ha existido es que en la Universidad de Chile y en las universidades, y en esto voy a decir algo que es controvertido, el método que se ha usado para lograr el progreso y la transformación social han sido las tomas y a mí esto me parece profundamente equivocado”, sostuvo.
“El decano anterior llegó a contabilizar, en tres años, 280 días de tomas (…). Entonces, tenemos que buscar un método distinto, la mediación, la conciliación, el hacer propuestas de leyes que vayan a los órganos colectivos de la Facultad en la Universidad para que en el camino institucional seamos capaces de resolver los conflictos que tenemos”, añadió el académico.
Por último, se refirió al rol de la Facultad en la sociedad: “El derecho no es una técnica de control, no es una maquinaria con las cuales uno hace leyes para gobernar a las personas. El derecho tiene que ver con algo muy profundo, que es la forma civilizada en que nosotros podemos vivir juntos, pensando y actuando de manera diferente”.
“A mí me gustaría que esta imagen fuera la imagen de los egresados de la Facultad, que fueran una élite republicana que sirve al país para resaltar y destacar los valores más preciados de nuestra sociedad como son la dignidad, la justicia y la libertad”
“Nuestra responsabilidad como abogado es servir a nuestro país, de una manera armónica, con las metas, con los proyectos de la sociedad”, concluyó.
