El próximo dos de enero, la comisión investigadora de TVN deberá entregar las conclusiones de su labor. Sin embargo, ya se anticipan algunos de los puntos que serán claves en el informe elaborado por los parlamentarios, entre ellos, la situación de Jaime de Aguirre, cuyo contrato dio cuenta de una situación privilegiada dentro de la señal; la filtración de un informe interno de Contraloría; y el futuro administrativo del canal.
Frente a ello, el diputado Luciano Cruz Coke, miembro de la comisión investigadora, señaló que los más perjudicados dentro de la crisis han sido los trabajadores y que hoy es urgente reformular el modelo de financiamiento del canal.
“No quiero acusar negligencia, pero hubo, al menos, una dejación importante por parte de quienes lideraron TVN en el periodo donde se producen las pérdidas”, dijo el parlamentario.
¿Cómo evalúa el trabajo de la comisión?
Avanzamos en un diagnóstico compartido, tanto los diputados de Gobierno como los de oposición respecto de varias materias. El primer punto fue tratar de determinar si hubo filtración de documentos relevantes del directorio a los medios. El segundo fue establecer si el directorio estaba en conocimiento total de los sueldos que se le pagaba a los altos directivos del canal y, por último, tratar de comprender cómo se llegó a esta debacle financiera. Ahora, eso es algo que todavía tenemos que votar. También, tuvimos la posibilidad de citar a una gran mayoría de personas. Algunas asistieron y otras no aceptaron la invitación, como es el caso de Ricardo Solari, que me hubiera gustado que asistiera. Pero ha avanzado bien. Lo importante, en adelante, es tratar de determinar cómo tener una televisión pública de acuerdo a las condiciones de la televisión actual, porque si hay un consenso general es que la televisión pública cumple un rol relevante y que hay que tratar de que no sea un canal permanentemente deficitario.
Cuándo uno trata de armar este puzzle de la crisis financiera de TVN, aparece el 2014, como un año clave, pero de acuerdo a la información que ustedes han podido reunir: ¿qué es lo que gatilla esta crisis?
Lamentablemente ahí echamos mucho de menos la presencia de Ricardo Solari, quien fue precisamente el presidente de TVN, desde abril de 2014 hasta finales del año 2017. Pero no tenemos todavía un juicio exacto. Tenemos ciertas intuiciones generales respecto de lo que sucedió y es que, en términos de gobierno corporativo, nadie se hace responsable de la administración de recursos públicos, porque no están, por ejemplo, bajo los controles del sistema de empresas del Estado o bajo los controles de la Dirección de Presupuestos de Chile (Dipres) como sí sucede con el Banco del Estado, con Enap o con otras empresas públicas. Entonces, aquello que sucede es que se siguió gastando a un ritmo propio de lo que era la televisión de los ‘90.
¿De ahí se explica que existan ciertas remuneraciones de “rostros” o de ejecutivos que no puedan conocerse?
Como comisión investigadora solicitamos a TVN, en varias ocasiones, tener acceso a la planilla de sueldos, tanto de los ejecutivos como de los “rostros”. ¿Cuál fue el resultado? Supimos la de los ejecutivos, la de los “rostros”, en cambio, no logramos conocerla, porque la ley autoriza a TVN en su autonomía a no dar esta información, porque supuestamente afectaría su competitividad. Es bien paradojal que nieguen esa información, porque el Estado puso recursos y no solo a través de la Ley de capitalización. Por otra parte, que digan que estos sueldos afectan la competitividad … Pero, ¡qué competitividad! La competitividad se perdió hace mucho tiempo. Lo que pasa es que estamos tan amparados en la ley orgánica actual de TVN, que es del año 92.
Se ha señalado que próximamente se van a realizar más despidos al interior de TVN. ¿Cree que el canal podrá seguir funcionando si se realizan nuevas desvinculaciones?
Lamentablemente el manejo irresponsable de los recursos de TVN ha golpeado a quienes menos lo merecen, que son los trabajadores, que tienen poca responsabilidad en la crisis. Las personas que están siendo despedidas son personas que reciben 800 mil pesos para abajo, donde hay técnicos, secretarias, camarógrafos, personal de audio. Durante el periodo de 2014 – 2017 se produjeron gastos, sobre todo en “rostros” muy caros que tiene hoy a la empresa en una situación que en la práctica es de quiebra. TVN fue administrado de forma irresponsable y las consecuencias están hoy a la vista. Lamentablemente no la están pagando los altos ejecutivos, lo están pagando los trabajadores.
Uno de los puntos del informe ha sido la filtración de un informe de Contraloría sobre el canal. ¿Cómo interpreta la filtración de este documento?
Por lo que pudo explicar el Contralor, este documento se entregó a cada uno de los directores en una reunión. Si no me equivoco un día viernes y el día martes siguiente, es decir, cinco días después, aparece en la prensa, por ende, la filtración se podría haber producido por cualquiera de los que estaban presentes. Ahora, esas conclusiones las vamos a tener que poner en el informe, porque la verdad es que todavía no logramos encontrar quienes son las personas responsables, pero se supone que solo tres personas quedaron con copias, más el presidente del directorio, porque cuatro habrían devuelto las copias. Además, hay una partida de investigación en la Fiscalía respecto de este mismo tema, por tanto, las conclusiones que saquemos, obviamente van a acompañar una opinión, pero la información de la investigación, en el caso de producirse un delito van por el lado de la Fiscalía.
Durante la semana pasada usted, junto al diputado Marcelo Díaz, fueron citados por las autoridades de gobierno para tratar el tema de TVN. ¿Cuáles fueron los objetivos de dicha reunión?
Buscamos comenzar a delinear, en conjunto, las propuestas que tiene el Gobierno respecto de lo que debiese ser la ley orgánica nueva de TVN en tres aspectos fundamentales: primero, la modificación del gobierno corporativo, para que tanto los presidentes como el directorio y el gerente o director ejecutivo del canal, tengan responsabilidades administrativas respecto del patrimonio público que administra. Ahí, en materia de financiamiento es donde hay varios modelos: el primer modelo es un financiamiento en modo privado; el segundo, es un financiamiento a través de una partida presupuestaria.
¿Por cuál se inclina usted?
El más razonable y el más claro, es aquel que financia, directamente, a través de una glosa presupuestaria toda vez que cumpla su misión, es decir, contenido educativo, cultural y de interés público. Me parece que esa es la manera más sana de tener una televisión pública y que tenga los controles, en términos de los contenidos, de personas elegidas por alta dirección pública y con un cierto equilibrio político de todos lados para que nadie crea que los contenidos son manipulados políticamente.
¿Se ha hablado algo respecto de una fecha para conocer al reemplazo de Francisco Orrego, ex presidente del directorio de TVN?
No. Hemos tratado de ser lo más respetuosos en eso, porque sabemos que este no es un cargo muy apetecido. TVN es un fierro caliente, un canal con déficit, donde se está despidiendo a buena parte de los trabajadores. Entonces, asumir ese cargo es una labor compleja.
¿Exista alguna posibilidad de que TVN llegue a privatizarse?
Ninguna. Nadie lo ha planteado y es natural que alguien lo plantee, pero hay alternativas para que pueda ser un modelo con capacidades financieras reales y, por qué no, que contribuya con contenidos de calidad y que no signifique una merma permanente a los recursos del fisco. No he escuchado alguien que diga: privaticemos de buenas a primeras. TVN es un patrimonio importante, pero creo que tiene que ser bien gestionada y con responsabilidad financiera también. Lo que ha sucedido acá es una irresponsabilidad enorme.