El Consejo de Estado, mayor jurisdicción administrativa francesa, estimó este 1° de febrero que el riesgo de violencias en las manifestaciones vuelve “necesario permitir a las fuerzas del orden recurrir” al LBD, un arma no letal que dispara balas de caucho de 40 milímetros, y que ha dejado decenas de tuertos y heridos.
En plena polémica sobre la represión policial en las manifestaciones de los “chalecos amarillos”, el sindicato CGT y la Liga de Derechos Humanos habían pedido a la justicia prohibir su uso, por considerarla un arma “mutiladora”, cuyas condiciones de uso no se respetan siempre.
El juez estimó que “contrariamente a lo que los demandantes afirmaban, la organización de las operaciones policiales llevadas a cabo durante las recientes manifestaciones no revela una intención de las autoridades de no respetar las condiciones de uso estrictas” de estas armas “de fuerza intermediaria”.
Esta decisión llega en la víspera del Acto 12 de los “chalecos amarillos”, que será dedicado a los heridos –más de 1.900 desde el principio del movimiento, según cifras oficiales. Fuentes policiales afirman que la Inspección General de la Policía Nacional (IGPN) está investigando 116 denuncias de manifestantes y que hasta ahora, “diez heridas muy graves a nivel de los ojos” han sido contabilizadas.
Gran decepción
“Extremadamente decepcionados”, los demandantes anunciaron enseguida que interpondrán un recurso que no será examinado antes de meses, dijo Patrice Spinosi, el abogado de la LDH.
“Esta decisión me sorprende. Mi ojo es el vigésimo que cae en este movimiento. Es aberrante, incomprensible”, comentó Jérôme Rodrigues, un líder “amarillo” gravemente herido en un ojo.
El primer sindicato de policías, Alliance, aplaudió por su parte una “sabia decisión”. Sin esta arma no letal, “vista la violencia de algunos vándalos, corremos el riesgo de ver a funcionarios de policía obligados a usar su arma de servicio en legítima defensa”, declaró Frédéric Lagache, el secretario general adjunto.
En Francia, las fuerzas del orden pueden usar el LBD en condiciones cercanas a la legítima defensa y deben apuntar únicamente el torso o los miembros. Videos difundidos en internet y las redes sociales desde el principio de la crisis de los “chalecos amarillos” parecen mostrar que no siempre es el caso.