DC se cuadra contra la reforma tributaria: “Este es un proyecto pro evasión”
A pocos días de haberse reavivado la pugna en torno a la continuidad del subsecretario de Redes Asistenciales, Luis Castillo, desde la DC vuelven a discrepar con el Gobierno, esta vez, ante la Modernización Tributaria, la cual califican como un proyecto "pro evasión".
Lunes 4 de marzo 2019 19:34 hrs.
Continúa el distanciamiento entre el Gobierno y la Democracia Cristiana. Si primero fue la pugna a raíz del respaldo público que entregó el Presidente Sebastián Piñera al subsecretario de Redes Asistenciales, Luis Castillo -envuelto en el tardío esclarecimiento del magnicidio de Eduardo Frei Montalva- ahora la disputa se trasladó al ámbito legislativo. Específicamente, hacia el futuro de la reforma tributaria.
“El proyecto que presentó el Gobierno no es pro crecimiento, es pro evasión. El sistema integrado lo que fortalece y facilita es el retiro, no la inversión”, señaló el líder de la DC, Fuad Chahín.
Por su parte, el diputado de la misma bancada y actual presidente de la Comisión de Hacienda del Parlamento, Pablo Lorenzini, aseguró que en la propuesta gubernamental “no está todo lo queremos, por lo tanto, nos tomaremos los próximos días para hacer los planteamientos totales”.
La clave de la integración tributaria
“El sistema integrado lo que fortalece y facilita es el retiro, no la inversión”, fue una de las principales críticas realizadas por Chahín a la Modernización Tributaria. ¿Pero, cuál es la clave fundamental de este cuestionamiento?
La integración tributaria lo que propone es que los impuestos pagados por las empresas podrán servir como crédito para los impuestos que deban pagar las personas. Hoy en nuestro país rige la reforma de 2014, que, impulsada por Michelle Bachelet, asoma como un punto medio entre un sistema integrado y uno desintegrado.
Es así como, bajo el marco actual, tanto propietarios como accionistas solo pueden utilizar un 65 por ciento de los impuestos pagados por la empresa como crédito contra sus impuestos personales.
Ante la modernización del Presidente Sebastián Piñera, Fuad Chahín afirmó que “hemos planteado como una alternativa que se establezca un impuesto diferenciado a las megaempresas, aquellas que facturan más de un millón de UF al año. Creemos que aquellos conglomerados, aquellos grupos económicos, no pueden pagar las mismas tasas que la pequeña y mediana empresa. Aquí, efectivamente, tenemos que tener una sobretasa para estos grupos económicos”.
El proyecto de Modernización Tributaria, luego de la espera que significó el receso legislativo, por fin será sometido a revisión de ambas cámaras este mes de marzo.
Continúa el distanciamiento entre el Gobierno y la Democracia Cristiana. Si primero fue la pugna a raíz del respaldo público que entregó el Presidente Sebastián Piñera al subsecretario de Redes Asistenciales, Luis Castillo -envuelto en el tardío esclarecimiento del magnicidio de Eduardo Frei Montalva- ahora la disputa se trasladó al ámbito legislativo. Específicamente, hacia el futuro de la reforma tributaria.
“El proyecto que presentó el Gobierno no es pro crecimiento, es pro evasión. El sistema integrado lo que fortalece y facilita es el retiro, no la inversión”, señaló el líder de la DC, Fuad Chahín.
Por su parte, el diputado de la misma bancada y actual presidente de la Comisión de Hacienda del Parlamento, Pablo Lorenzini, aseguró que en la propuesta gubernamental “no está todo lo queremos, por lo tanto, nos tomaremos los próximos días para hacer los planteamientos totales”.
La clave de la integración tributaria
“El sistema integrado lo que fortalece y facilita es el retiro, no la inversión”, fue una de las principales críticas realizadas por Chahín a la Modernización Tributaria. ¿Pero, cuál es la clave fundamental de este cuestionamiento?
La integración tributaria lo que propone es que los impuestos pagados por las empresas podrán servir como crédito para los impuestos que deban pagar las personas. Hoy en nuestro país rige la reforma de 2014, que, impulsada por Michelle Bachelet, asoma como un punto medio entre un sistema integrado y uno desintegrado.
Es así como, bajo el marco actual, tanto propietarios como accionistas solo pueden utilizar un 65 por ciento de los impuestos pagados por la empresa como crédito contra sus impuestos personales.
Ante la modernización del Presidente Sebastián Piñera, Fuad Chahín afirmó que “hemos planteado como una alternativa que se establezca un impuesto diferenciado a las megaempresas, aquellas que facturan más de un millón de UF al año. Creemos que aquellos conglomerados, aquellos grupos económicos, no pueden pagar las mismas tasas que la pequeña y mediana empresa. Aquí, efectivamente, tenemos que tener una sobretasa para estos grupos económicos”.
El proyecto de Modernización Tributaria, luego de la espera que significó el receso legislativo, por fin será sometido a revisión de ambas cámaras este mes de marzo.
Continúa el distanciamiento entre el Gobierno y la Democracia Cristiana. Si primero fue la pugna a raíz del respaldo público que entregó el Presidente Sebastián Piñera al subsecretario de Redes Asistenciales, Luis Castillo -envuelto en el tardío esclarecimiento del magnicidio de Eduardo Frei Montalva- ahora la disputa se trasladó al ámbito legislativo. Específicamente, hacia el futuro de la reforma tributaria.
“El proyecto que presentó el Gobierno no es pro crecimiento, es pro evasión. El sistema integrado lo que fortalece y facilita es el retiro, no la inversión”, señaló el líder de la DC, Fuad Chahín.
Por su parte, el diputado de la misma bancada y actual presidente de la Comisión de Hacienda del Parlamento, Pablo Lorenzini, aseguró que en la propuesta gubernamental “no está todo lo queremos, por lo tanto, nos tomaremos los próximos días para hacer los planteamientos totales”.
La clave de la integración tributaria
“El sistema integrado lo que fortalece y facilita es el retiro, no la inversión”, fue una de las principales críticas realizadas por Chahín a la Modernización Tributaria. ¿Pero, cuál es la clave fundamental de este cuestionamiento?
La integración tributaria lo que propone es que los impuestos pagados por las empresas podrán servir como crédito para los impuestos que deban pagar las personas. Hoy en nuestro país rige la reforma de 2014, que, impulsada por Michelle Bachelet, asoma como un punto medio entre un sistema integrado y uno desintegrado.
Es así como, bajo el marco actual, tanto propietarios como accionistas solo pueden utilizar un 65 por ciento de los impuestos pagados por la empresa como crédito contra sus impuestos personales.
Ante la modernización del Presidente Sebastián Piñera, Fuad Chahín afirmó que “hemos planteado como una alternativa que se establezca un impuesto diferenciado a las megaempresas, aquellas que facturan más de un millón de UF al año. Creemos que aquellos conglomerados, aquellos grupos económicos, no pueden pagar las mismas tasas que la pequeña y mediana empresa. Aquí, efectivamente, tenemos que tener una sobretasa para estos grupos económicos”.
El proyecto de Modernización Tributaria, luego de la espera que significó el receso legislativo, por fin será sometido a revisión de ambas cámaras este mes de marzo.
