Novak Djokovic logra marcar diferencia y se consagra como campeón de Wimbledon 2019
En un apretado partido, el tenista serbio se coronó campeón del torneo más antiguo del mundo tras vencer al suizo Roger Federer por 7-6, 1-6, 7-6, 4-6 y 13-12 en una final histórica que se extendió por casi cinco horas.
Diario UChile
Domingo 14 de julio 2019 14:32 hrs.
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Novak Djokovic (1°) sigue firme en su camino por convertirse en el tenista con más Grand Slams de la historia. En la final de Wimbledon, el número uno del mundo se impuso a Roger Federer (3°) en un ejercicio de resistencia extenuante (7-6, 1-6, 7-6, 2-6 y 13-12 en 4 horas y 55 minutos), en el que incluso debió defender dos puntos de partido en el quinto y definitivo set.
Supo sufrir “Nole” en un partido en el que tuvo que sacar todos sus recursos defensivos desde el fondo de la pista para resistir las acometidas de Federer y conquistar su quinto Wimbledon. Un triunfo que llegó en el tie break del quinto set (7-3) y que supone su 16º Grand Slam, ubicándose a dos de Rafael Nadal y cuatro del suizo en la carrera que mantienen los tres por ser el tenista más laureado de la historia.
Novak Djokovic y Roger Federer animaron una final histórica en el torneo de tenis más antiguo del planeta, la que duró casi cinco horas.
El duelo comenzó vibrante. Federer atacaba, jugándose cada bola, y el serbio resistía las acometidas del suizo con una formidable defensa desde la línea de fondo. Así se llegó hasta el primer tie break, donde el número uno levantó dos minibreaks y, a la primera bola de set de la que dispuso, se adueñó del parcial.
La tensión del primer parcial pesó en el serbio, que se desconectó al iniciar el segundo set. Lo percibió Federer, que siguió con su estrategia y rápidamente se puso 4-0 arriba. Incluso tuvo tiempo para quebrar el servicio de Djokovic una vez más antes de llevarse un set que Djokovic ni luchó, pensando en lo que quedaba por delante.
El extraño desenlace del segundo parcial adormeció el partido y en el tercero ambos tenistas volvieron a encontrarse en el tie break. Ahí, se repitió el guion del primer set. El serbio aprovechó un par de errores de Federer para tomar ventaja y, a la primera pelota de set, volvió a tomar la delantera.
El tenista suizo Roger Federer tuvo dos puntos para llevarse el partido en el quinto y definitivo set.
Y en ese momento, volvió a sufrir otro apagón. Federer quebró su saque en el quinto y en el séptimo, y los gestos de contradicción aparecieron de nuevo en el rostro del Djokovic que, pese a que opuso algo más de resistencia llegando a quebrar por primera vez el servicio de Federer, no pudo evitar que el suizo mandara el partido a la quinta y definitiva manga.
Ahí llegó el drama. El último set se convirtió en un ejercicio de supervivencia que exprimió a ambos hasta el límite de sus fuerzas, tanto físicamente como mentalmente. Rompió ‘Nole’ en el sexto, respondió inmediatamente ‘Su Majestad’ en el séptimo y la tensión se apoderó de la pista central de Wimbledon. En el decimoquinto juego volvió a romper Federer, que solo tenía que ganar su saque para levantar su noveno Wimbledon. Pero Djokovic no cedió. El serbio levantó dos puntos de partido y alargó la agonía. Hasta el 12-12 se fueron, estrenando el tie break del quinto set, donde el serbio se terminó decantando la balanza por 7-3.
Novak Djokovic (1°) sigue firme en su camino por convertirse en el tenista con más Grand Slams de la historia. En la final de Wimbledon, el número uno del mundo se impuso a Roger Federer (3°) en un ejercicio de resistencia extenuante (7-6, 1-6, 7-6, 2-6 y 13-12 en 4 horas y 55 minutos), en el que incluso debió defender dos puntos de partido en el quinto y definitivo set.
Supo sufrir “Nole” en un partido en el que tuvo que sacar todos sus recursos defensivos desde el fondo de la pista para resistir las acometidas de Federer y conquistar su quinto Wimbledon. Un triunfo que llegó en el tie break del quinto set (7-3) y que supone su 16º Grand Slam, ubicándose a dos de Rafael Nadal y cuatro del suizo en la carrera que mantienen los tres por ser el tenista más laureado de la historia.
Novak Djokovic y Roger Federer animaron una final histórica en el torneo de tenis más antiguo del planeta, la que duró casi cinco horas.
El duelo comenzó vibrante. Federer atacaba, jugándose cada bola, y el serbio resistía las acometidas del suizo con una formidable defensa desde la línea de fondo. Así se llegó hasta el primer tie break, donde el número uno levantó dos minibreaks y, a la primera bola de set de la que dispuso, se adueñó del parcial.
La tensión del primer parcial pesó en el serbio, que se desconectó al iniciar el segundo set. Lo percibió Federer, que siguió con su estrategia y rápidamente se puso 4-0 arriba. Incluso tuvo tiempo para quebrar el servicio de Djokovic una vez más antes de llevarse un set que Djokovic ni luchó, pensando en lo que quedaba por delante.
El extraño desenlace del segundo parcial adormeció el partido y en el tercero ambos tenistas volvieron a encontrarse en el tie break. Ahí, se repitió el guion del primer set. El serbio aprovechó un par de errores de Federer para tomar ventaja y, a la primera pelota de set, volvió a tomar la delantera.
El tenista suizo Roger Federer tuvo dos puntos para llevarse el partido en el quinto y definitivo set.
Y en ese momento, volvió a sufrir otro apagón. Federer quebró su saque en el quinto y en el séptimo, y los gestos de contradicción aparecieron de nuevo en el rostro del Djokovic que, pese a que opuso algo más de resistencia llegando a quebrar por primera vez el servicio de Federer, no pudo evitar que el suizo mandara el partido a la quinta y definitiva manga.
Ahí llegó el drama. El último set se convirtió en un ejercicio de supervivencia que exprimió a ambos hasta el límite de sus fuerzas, tanto físicamente como mentalmente. Rompió ‘Nole’ en el sexto, respondió inmediatamente ‘Su Majestad’ en el séptimo y la tensión se apoderó de la pista central de Wimbledon. En el decimoquinto juego volvió a romper Federer, que solo tenía que ganar su saque para levantar su noveno Wimbledon. Pero Djokovic no cedió. El serbio levantó dos puntos de partido y alargó la agonía. Hasta el 12-12 se fueron, estrenando el tie break del quinto set, donde el serbio se terminó decantando la balanza por 7-3.
Novak Djokovic (1°) sigue firme en su camino por convertirse en el tenista con más Grand Slams de la historia. En la final de Wimbledon, el número uno del mundo se impuso a Roger Federer (3°) en un ejercicio de resistencia extenuante (7-6, 1-6, 7-6, 2-6 y 13-12 en 4 horas y 55 minutos), en el que incluso debió defender dos puntos de partido en el quinto y definitivo set.
Supo sufrir “Nole” en un partido en el que tuvo que sacar todos sus recursos defensivos desde el fondo de la pista para resistir las acometidas de Federer y conquistar su quinto Wimbledon. Un triunfo que llegó en el tie break del quinto set (7-3) y que supone su 16º Grand Slam, ubicándose a dos de Rafael Nadal y cuatro del suizo en la carrera que mantienen los tres por ser el tenista más laureado de la historia.
Novak Djokovic y Roger Federer animaron una final histórica en el torneo de tenis más antiguo del planeta, la que duró casi cinco horas.
El duelo comenzó vibrante. Federer atacaba, jugándose cada bola, y el serbio resistía las acometidas del suizo con una formidable defensa desde la línea de fondo. Así se llegó hasta el primer tie break, donde el número uno levantó dos minibreaks y, a la primera bola de set de la que dispuso, se adueñó del parcial.
La tensión del primer parcial pesó en el serbio, que se desconectó al iniciar el segundo set. Lo percibió Federer, que siguió con su estrategia y rápidamente se puso 4-0 arriba. Incluso tuvo tiempo para quebrar el servicio de Djokovic una vez más antes de llevarse un set que Djokovic ni luchó, pensando en lo que quedaba por delante.
El extraño desenlace del segundo parcial adormeció el partido y en el tercero ambos tenistas volvieron a encontrarse en el tie break. Ahí, se repitió el guion del primer set. El serbio aprovechó un par de errores de Federer para tomar ventaja y, a la primera pelota de set, volvió a tomar la delantera.
El tenista suizo Roger Federer tuvo dos puntos para llevarse el partido en el quinto y definitivo set.
Y en ese momento, volvió a sufrir otro apagón. Federer quebró su saque en el quinto y en el séptimo, y los gestos de contradicción aparecieron de nuevo en el rostro del Djokovic que, pese a que opuso algo más de resistencia llegando a quebrar por primera vez el servicio de Federer, no pudo evitar que el suizo mandara el partido a la quinta y definitiva manga.
Ahí llegó el drama. El último set se convirtió en un ejercicio de supervivencia que exprimió a ambos hasta el límite de sus fuerzas, tanto físicamente como mentalmente. Rompió ‘Nole’ en el sexto, respondió inmediatamente ‘Su Majestad’ en el séptimo y la tensión se apoderó de la pista central de Wimbledon. En el decimoquinto juego volvió a romper Federer, que solo tenía que ganar su saque para levantar su noveno Wimbledon. Pero Djokovic no cedió. El serbio levantó dos puntos de partido y alargó la agonía. Hasta el 12-12 se fueron, estrenando el tie break del quinto set, donde el serbio se terminó decantando la balanza por 7-3.
