Universidad de Chile realiza homenaje en memoria de Marta Harnecker
En el salón de honor de la Casa Central se llevó a cabo un acto dedicado a la académica, instancia en la que el rector Ennio Vivaldi, autoridades de la Universidad y familiares y amigos de la investigadora dieron a conocer sus experiencias junto a ella y el valor de su obra.
Diario UChile
Sábado 10 de agosto 2019 10:29 hrs.
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Marta Harnecker nació en 1937 y el pasado mes de junio falleció a sus 82 años. Psicóloga de profesión, fue una de las intelectuales más destacadas de la izquierda latinoamericana durante la segunda parte del siglo XX.
La académica publicó más de 80 libros, destacando entre sus obras más conocidas los textos ‘Conceptos Elementales del Materialismo Histórico’, ‘El capital: conceptos fundamentales’, ‘Cuba: ¿dictadura o democracia?’ , ‘Pueblos en armas’, ‘La revolución social (Lenin y América Latina)’, entre otros.
Además, luego del golpe de Estado liderado por Augusto Pinochet, vivió en La Habana, lugar en el que se desempeñó como asesora del Gobierno de Fidel Castro, y posteriormente hizo lo mismo con Hugo Chávez en Venezuela, donde recibió el Premio Nacional del Libro en 2006.
Así, por su importante labor en la academia, el pensamiento y el desarrollo de la izquierda latinoamericana, es que el pasado viernes la Universidad de Chile realizó una ceremonia de homenaje en su memoria.
El rector de la Universidad, Ennio Vivaldi, destacó en este acto el rol que tuvo la investigadora en las experiencias de transformación social.
“Se es un joven de izquierda por motivos primariamente emocionales, es el impacto que produce la pobreza, la injusticia, el ver las desigualdades sociales intolerables. Si uno es estudiante de medicina verá esos lactantes brutalmente desnutridos que estremecen, y es natural que los jóvenes por estos motivos, primariamente emocionales, adhieran a una idea de cambio drástico en la sociedad, una revolución. Es natural”, reflexionó el rector.
El rector de la Universidad de Chile, Ennio Vivaldi, participó en la ceremonia de homenaje.
Y agregó que “en lo que Marta -y eso es un primer disenso entre comillas-, se esfuerza, es por dar un sustento racional, que es una palabra recurrente en el pensamiento de esa época. Está la Escuela de Frankfurt, en la necesidad de situar a la razón como un elemento ineludible si es que uno quiere que el accionar político y, por lo tanto, el cambio social realmente sean exitosos”.
Marta Harnecker, tuvo una importante formación intelectual en Francia junto a los filósofos Paul Ricoeur y Louis Althusser, mientras que en Chile fue académica de Materialismo Histórico y Economía Política en la carrera de Sociología de la Universidad de Chile y parte del equipo del Centro de Estudios Socio-económicos (CESO) de la Facultad de Ciencias Económicas -clausurado en dictadura-, y también directora del semanario político Chile Hoy.
La vicerrectora de Extensión y Comunicaciones de la Universidad de Chile, Faride Zerán, homenajeó también en el Salón de Honor el aporte de Marta Harnecker.
“No fue solo la discípula de Althusser ni la directora de la emblemática revista Chile Hoy, con quien tuve el privilegio de trabajar hasta el golpe de Estado. Como ya en el exilio tampoco fue sólo la colaboradora de Fidel, fundadora del Memoria Popular Latinoamericana o la asesora de Hugo Chávez”, dijo.
“Su nombre y su figura asociadas a una época de sueños y derrotas transitaron con lucidez desde los momentos de certezas hasta las incertidumbres de los tiempos actuales, siguiendo las experiencias de la articulación de las izquierdas, incluidas la chilena, ya no solo desde la teoría, sino que desde sus propias prácticas de gobiernos locales, de poder popular, de organizaciones de bases, asumiendo que uno de los errores de las izquierdas de los ’70 había sido justamente copiar, expandiendo el marxismo, sin analizar las realidades, las historias, las tradiciones locales”, comentó la periodista.
“Su nombre y su figura asociadas a una época de sueños y derrotas transitaron con lucidez desde los momentos de certezas hasta las incertidumbres de los tiempos actuales”, dijo Faride Zerán.
También participó en este acto de memoria la presidenta de la Asociación de Académicos y Académicas, Kemy Oyarzún, quien también se refirió a la obra de Harnecker.
“La re lectura de Marta Harnecker, a 50 años de su producción inicial, nos remite hoy a pliegues de una memoria personal política e histórica para debatir y repensarnos a partir de las posdictaduras del Cono Sur y la lucha por establecer nuevos polos articuladores de resistencias antineoliberales”, dijo la dirigenta.
Agregó que “lo cierto es que entre los ’90 y el comienzo del siglo XXI, Marta Harnecker da cuenta de una reflexión sobre revolución y democracia entendiendo esos términos como procesos abiertos a prácticas concretas y a la deliberación cívica como una sinergia capaz de transformar las relaciones de dominación en formas de autonomía por y para las ciudadanías”.
Estuvieron presentes también en esta ceremonia integrantes de la Corporación Memorial Economía de la Facultad de Economía y Negocios, e Inés Harnecker, hermana de Marta.
Ella destacó a nombre de Camila Piñeiro -hija de la fallecida académica-, que ésta durante sus últimos años “se enorgullecía ante todas las demostraciones de niveles mayores de organización y conciencia política de la sociedad chilena, especialmente las lideradas por los jóvenes”, y agregó que con la muerte de los pensadores solo llegan más y renovadas energías para seguir luchando.
En la ceremonia de homenaje participaron autoridades de la Universidad de Chile y familiares y amigos de Marta Harnecker.
Créditos fotografías en texto: Alejandra Fuenzalida / UChile.
Marta Harnecker nació en 1937 y el pasado mes de junio falleció a sus 82 años. Psicóloga de profesión, fue una de las intelectuales más destacadas de la izquierda latinoamericana durante la segunda parte del siglo XX.
La académica publicó más de 80 libros, destacando entre sus obras más conocidas los textos ‘Conceptos Elementales del Materialismo Histórico’, ‘El capital: conceptos fundamentales’, ‘Cuba: ¿dictadura o democracia?’ , ‘Pueblos en armas’, ‘La revolución social (Lenin y América Latina)’, entre otros.
Además, luego del golpe de Estado liderado por Augusto Pinochet, vivió en La Habana, lugar en el que se desempeñó como asesora del Gobierno de Fidel Castro, y posteriormente hizo lo mismo con Hugo Chávez en Venezuela, donde recibió el Premio Nacional del Libro en 2006.
Así, por su importante labor en la academia, el pensamiento y el desarrollo de la izquierda latinoamericana, es que el pasado viernes la Universidad de Chile realizó una ceremonia de homenaje en su memoria.
El rector de la Universidad, Ennio Vivaldi, destacó en este acto el rol que tuvo la investigadora en las experiencias de transformación social.
“Se es un joven de izquierda por motivos primariamente emocionales, es el impacto que produce la pobreza, la injusticia, el ver las desigualdades sociales intolerables. Si uno es estudiante de medicina verá esos lactantes brutalmente desnutridos que estremecen, y es natural que los jóvenes por estos motivos, primariamente emocionales, adhieran a una idea de cambio drástico en la sociedad, una revolución. Es natural”, reflexionó el rector.
El rector de la Universidad de Chile, Ennio Vivaldi, participó en la ceremonia de homenaje.
Y agregó que “en lo que Marta -y eso es un primer disenso entre comillas-, se esfuerza, es por dar un sustento racional, que es una palabra recurrente en el pensamiento de esa época. Está la Escuela de Frankfurt, en la necesidad de situar a la razón como un elemento ineludible si es que uno quiere que el accionar político y, por lo tanto, el cambio social realmente sean exitosos”.
Marta Harnecker, tuvo una importante formación intelectual en Francia junto a los filósofos Paul Ricoeur y Louis Althusser, mientras que en Chile fue académica de Materialismo Histórico y Economía Política en la carrera de Sociología de la Universidad de Chile y parte del equipo del Centro de Estudios Socio-económicos (CESO) de la Facultad de Ciencias Económicas -clausurado en dictadura-, y también directora del semanario político Chile Hoy.
La vicerrectora de Extensión y Comunicaciones de la Universidad de Chile, Faride Zerán, homenajeó también en el Salón de Honor el aporte de Marta Harnecker.
“No fue solo la discípula de Althusser ni la directora de la emblemática revista Chile Hoy, con quien tuve el privilegio de trabajar hasta el golpe de Estado. Como ya en el exilio tampoco fue sólo la colaboradora de Fidel, fundadora del Memoria Popular Latinoamericana o la asesora de Hugo Chávez”, dijo.
“Su nombre y su figura asociadas a una época de sueños y derrotas transitaron con lucidez desde los momentos de certezas hasta las incertidumbres de los tiempos actuales, siguiendo las experiencias de la articulación de las izquierdas, incluidas la chilena, ya no solo desde la teoría, sino que desde sus propias prácticas de gobiernos locales, de poder popular, de organizaciones de bases, asumiendo que uno de los errores de las izquierdas de los ’70 había sido justamente copiar, expandiendo el marxismo, sin analizar las realidades, las historias, las tradiciones locales”, comentó la periodista.
“Su nombre y su figura asociadas a una época de sueños y derrotas transitaron con lucidez desde los momentos de certezas hasta las incertidumbres de los tiempos actuales”, dijo Faride Zerán.
También participó en este acto de memoria la presidenta de la Asociación de Académicos y Académicas, Kemy Oyarzún, quien también se refirió a la obra de Harnecker.
“La re lectura de Marta Harnecker, a 50 años de su producción inicial, nos remite hoy a pliegues de una memoria personal política e histórica para debatir y repensarnos a partir de las posdictaduras del Cono Sur y la lucha por establecer nuevos polos articuladores de resistencias antineoliberales”, dijo la dirigenta.
Agregó que “lo cierto es que entre los ’90 y el comienzo del siglo XXI, Marta Harnecker da cuenta de una reflexión sobre revolución y democracia entendiendo esos términos como procesos abiertos a prácticas concretas y a la deliberación cívica como una sinergia capaz de transformar las relaciones de dominación en formas de autonomía por y para las ciudadanías”.
Estuvieron presentes también en esta ceremonia integrantes de la Corporación Memorial Economía de la Facultad de Economía y Negocios, e Inés Harnecker, hermana de Marta.
Ella destacó a nombre de Camila Piñeiro -hija de la fallecida académica-, que ésta durante sus últimos años “se enorgullecía ante todas las demostraciones de niveles mayores de organización y conciencia política de la sociedad chilena, especialmente las lideradas por los jóvenes”, y agregó que con la muerte de los pensadores solo llegan más y renovadas energías para seguir luchando.
En la ceremonia de homenaje participaron autoridades de la Universidad de Chile y familiares y amigos de Marta Harnecker.
Créditos fotografías en texto: Alejandra Fuenzalida / UChile.
Marta Harnecker nació en 1937 y el pasado mes de junio falleció a sus 82 años. Psicóloga de profesión, fue una de las intelectuales más destacadas de la izquierda latinoamericana durante la segunda parte del siglo XX.
La académica publicó más de 80 libros, destacando entre sus obras más conocidas los textos ‘Conceptos Elementales del Materialismo Histórico’, ‘El capital: conceptos fundamentales’, ‘Cuba: ¿dictadura o democracia?’ , ‘Pueblos en armas’, ‘La revolución social (Lenin y América Latina)’, entre otros.
Además, luego del golpe de Estado liderado por Augusto Pinochet, vivió en La Habana, lugar en el que se desempeñó como asesora del Gobierno de Fidel Castro, y posteriormente hizo lo mismo con Hugo Chávez en Venezuela, donde recibió el Premio Nacional del Libro en 2006.
Así, por su importante labor en la academia, el pensamiento y el desarrollo de la izquierda latinoamericana, es que el pasado viernes la Universidad de Chile realizó una ceremonia de homenaje en su memoria.
El rector de la Universidad, Ennio Vivaldi, destacó en este acto el rol que tuvo la investigadora en las experiencias de transformación social.
“Se es un joven de izquierda por motivos primariamente emocionales, es el impacto que produce la pobreza, la injusticia, el ver las desigualdades sociales intolerables. Si uno es estudiante de medicina verá esos lactantes brutalmente desnutridos que estremecen, y es natural que los jóvenes por estos motivos, primariamente emocionales, adhieran a una idea de cambio drástico en la sociedad, una revolución. Es natural”, reflexionó el rector.
El rector de la Universidad de Chile, Ennio Vivaldi, participó en la ceremonia de homenaje.
Y agregó que “en lo que Marta -y eso es un primer disenso entre comillas-, se esfuerza, es por dar un sustento racional, que es una palabra recurrente en el pensamiento de esa época. Está la Escuela de Frankfurt, en la necesidad de situar a la razón como un elemento ineludible si es que uno quiere que el accionar político y, por lo tanto, el cambio social realmente sean exitosos”.
Marta Harnecker, tuvo una importante formación intelectual en Francia junto a los filósofos Paul Ricoeur y Louis Althusser, mientras que en Chile fue académica de Materialismo Histórico y Economía Política en la carrera de Sociología de la Universidad de Chile y parte del equipo del Centro de Estudios Socio-económicos (CESO) de la Facultad de Ciencias Económicas -clausurado en dictadura-, y también directora del semanario político Chile Hoy.
La vicerrectora de Extensión y Comunicaciones de la Universidad de Chile, Faride Zerán, homenajeó también en el Salón de Honor el aporte de Marta Harnecker.
“No fue solo la discípula de Althusser ni la directora de la emblemática revista Chile Hoy, con quien tuve el privilegio de trabajar hasta el golpe de Estado. Como ya en el exilio tampoco fue sólo la colaboradora de Fidel, fundadora del Memoria Popular Latinoamericana o la asesora de Hugo Chávez”, dijo.
“Su nombre y su figura asociadas a una época de sueños y derrotas transitaron con lucidez desde los momentos de certezas hasta las incertidumbres de los tiempos actuales, siguiendo las experiencias de la articulación de las izquierdas, incluidas la chilena, ya no solo desde la teoría, sino que desde sus propias prácticas de gobiernos locales, de poder popular, de organizaciones de bases, asumiendo que uno de los errores de las izquierdas de los ’70 había sido justamente copiar, expandiendo el marxismo, sin analizar las realidades, las historias, las tradiciones locales”, comentó la periodista.
“Su nombre y su figura asociadas a una época de sueños y derrotas transitaron con lucidez desde los momentos de certezas hasta las incertidumbres de los tiempos actuales”, dijo Faride Zerán.
También participó en este acto de memoria la presidenta de la Asociación de Académicos y Académicas, Kemy Oyarzún, quien también se refirió a la obra de Harnecker.
“La re lectura de Marta Harnecker, a 50 años de su producción inicial, nos remite hoy a pliegues de una memoria personal política e histórica para debatir y repensarnos a partir de las posdictaduras del Cono Sur y la lucha por establecer nuevos polos articuladores de resistencias antineoliberales”, dijo la dirigenta.
Agregó que “lo cierto es que entre los ’90 y el comienzo del siglo XXI, Marta Harnecker da cuenta de una reflexión sobre revolución y democracia entendiendo esos términos como procesos abiertos a prácticas concretas y a la deliberación cívica como una sinergia capaz de transformar las relaciones de dominación en formas de autonomía por y para las ciudadanías”.
Estuvieron presentes también en esta ceremonia integrantes de la Corporación Memorial Economía de la Facultad de Economía y Negocios, e Inés Harnecker, hermana de Marta.
Ella destacó a nombre de Camila Piñeiro -hija de la fallecida académica-, que ésta durante sus últimos años “se enorgullecía ante todas las demostraciones de niveles mayores de organización y conciencia política de la sociedad chilena, especialmente las lideradas por los jóvenes”, y agregó que con la muerte de los pensadores solo llegan más y renovadas energías para seguir luchando.
En la ceremonia de homenaje participaron autoridades de la Universidad de Chile y familiares y amigos de Marta Harnecker.
Créditos fotografías en texto: Alejandra Fuenzalida / UChile.
