Ante el atentado que sufrió, el pasado 11 de septiembre, el Paseo de la Memoria de Paine, generó inmediatamente el rechazo de diversas organizaciones de derechos humanos, sociales y culturales.
Por lo mismo, estas colectividades firmaron una declaración conjunta en la que manifiestan su pesar e indignación por loe hechos ocurridos.
A continuación, el texto íntegro:
Las organizaciones firmantes, vienen en denunciar un nuevo ataque a un Sitio de Memoria, esta vez, al Paseo de la Memoria ubicado en la localidad de Paine.
En efecto, el pasado 11 de septiembre, un grupo de desconocidos causó una grave afrenta a los detenidos desaparecidos víctimas de la Dictadura, tapando los rostros de sus retratos que conforman el Paseo de la Memoria, instalado en el Estadio Ferroviario, en la comuna de Paine.
Las características de este ataque son especialmente crueles y dolorosos, pues tal como lo señalan sus familiares, “tapar sus rostros es volver a recordar la tortura por la que atravesaron nuestros seres queridos, es violentar su Memoria, negarlos como personas”.
Cabe recordar que este ataque se suma a la larga lista de atentados que vienen afectando a diversos Sitios de Memoria en nuestro país, como Villa Grimaldi, Estadio Nacional, José Domingo Cañas, ex Clínica Santa Lucía, entre otros, y cuyos autores, permanecen aún en la más completa Impunidad.
Cabe recordar que la obligación de promover y resguardar la Memoria de las víctimas, constituye una obligación internacional ineludible para el Estado chileno y sus tres Poderes, requisito indispensable para avanzar en el anhelado Nunca Más.
Advertimos que la omisión e incumplimiento del Estado de Chile de esta obligación internacional, ha facilitado la aparición de voces negacionistas y de movimientos políticos neofascistas que a través de su actuar, agravian la Memoria de las Víctimas al negar los crímenes cometidos en Dictadura y/o reivindicando a sus autores, y cuyos cultores no sólo gozan de las más completa impunidad, sino que además disponen de una permanente tribuna en los medios de comunicación.
Por tanto, junto con hacer un llamado a las organizaciones sociales a expresar su solidaridad con las víctimas, exigimos del Gobierno una condena pública de estos hechos y la inmediata interposición de una acción judicial para perseguir la responsabilidad penal de sus autores. Continuar con su actitud pasiva e indolente, lo hará cómplice de estas graves afrentas contra la Memoria y su obligación de resguardo, además de incurrir en una grave infracción a la normativa internacional de derechos humanos que se ha obligado a respetar, a través de la suscripción y ratificación de los diversos pactos y convenciones que regulan la materia.
Entre los firmantes se encuentran la Comisión Chilena de Derechos Humanos, la Red de Sitios de Memoria, la Fundación Víctor Jara, y la Asociación por la Memoria y Derechos Humanos Colonia Dignidad, entre otros.
Ante el atentado que sufrió, el pasado 11 de septiembre, el Paseo de la Memoria de Paine, generó inmediatamente el rechazo de diversas organizaciones de derechos humanos, sociales y culturales.
Por lo mismo, estas colectividades firmaron una declaración conjunta en la que manifiestan su pesar e indignación por loe hechos ocurridos.
A continuación, el texto íntegro:
Las organizaciones firmantes, vienen en denunciar un nuevo ataque a un Sitio de Memoria, esta vez, al Paseo de la Memoria ubicado en la localidad de Paine.
En efecto, el pasado 11 de septiembre, un grupo de desconocidos causó una grave afrenta a los detenidos desaparecidos víctimas de la Dictadura, tapando los rostros de sus retratos que conforman el Paseo de la Memoria, instalado en el Estadio Ferroviario, en la comuna de Paine.
Las características de este ataque son especialmente crueles y dolorosos, pues tal como lo señalan sus familiares, “tapar sus rostros es volver a recordar la tortura por la que atravesaron nuestros seres queridos, es violentar su Memoria, negarlos como personas”.
Cabe recordar que este ataque se suma a la larga lista de atentados que vienen afectando a diversos Sitios de Memoria en nuestro país, como Villa Grimaldi, Estadio Nacional, José Domingo Cañas, ex Clínica Santa Lucía, entre otros, y cuyos autores, permanecen aún en la más completa Impunidad.
Cabe recordar que la obligación de promover y resguardar la Memoria de las víctimas, constituye una obligación internacional ineludible para el Estado chileno y sus tres Poderes, requisito indispensable para avanzar en el anhelado Nunca Más.
Advertimos que la omisión e incumplimiento del Estado de Chile de esta obligación internacional, ha facilitado la aparición de voces negacionistas y de movimientos políticos neofascistas que a través de su actuar, agravian la Memoria de las Víctimas al negar los crímenes cometidos en Dictadura y/o reivindicando a sus autores, y cuyos cultores no sólo gozan de las más completa impunidad, sino que además disponen de una permanente tribuna en los medios de comunicación.
Por tanto, junto con hacer un llamado a las organizaciones sociales a expresar su solidaridad con las víctimas, exigimos del Gobierno una condena pública de estos hechos y la inmediata interposición de una acción judicial para perseguir la responsabilidad penal de sus autores. Continuar con su actitud pasiva e indolente, lo hará cómplice de estas graves afrentas contra la Memoria y su obligación de resguardo, además de incurrir en una grave infracción a la normativa internacional de derechos humanos que se ha obligado a respetar, a través de la suscripción y ratificación de los diversos pactos y convenciones que regulan la materia.
Entre los firmantes se encuentran la Comisión Chilena de Derechos Humanos, la Red de Sitios de Memoria, la Fundación Víctor Jara, y la Asociación por la Memoria y Derechos Humanos Colonia Dignidad, entre otros.
Ante el atentado que sufrió, el pasado 11 de septiembre, el Paseo de la Memoria de Paine, generó inmediatamente el rechazo de diversas organizaciones de derechos humanos, sociales y culturales.
Por lo mismo, estas colectividades firmaron una declaración conjunta en la que manifiestan su pesar e indignación por loe hechos ocurridos.
A continuación, el texto íntegro:
Las organizaciones firmantes, vienen en denunciar un nuevo ataque a un Sitio de Memoria, esta vez, al Paseo de la Memoria ubicado en la localidad de Paine.
En efecto, el pasado 11 de septiembre, un grupo de desconocidos causó una grave afrenta a los detenidos desaparecidos víctimas de la Dictadura, tapando los rostros de sus retratos que conforman el Paseo de la Memoria, instalado en el Estadio Ferroviario, en la comuna de Paine.
Las características de este ataque son especialmente crueles y dolorosos, pues tal como lo señalan sus familiares, “tapar sus rostros es volver a recordar la tortura por la que atravesaron nuestros seres queridos, es violentar su Memoria, negarlos como personas”.
Cabe recordar que este ataque se suma a la larga lista de atentados que vienen afectando a diversos Sitios de Memoria en nuestro país, como Villa Grimaldi, Estadio Nacional, José Domingo Cañas, ex Clínica Santa Lucía, entre otros, y cuyos autores, permanecen aún en la más completa Impunidad.
Cabe recordar que la obligación de promover y resguardar la Memoria de las víctimas, constituye una obligación internacional ineludible para el Estado chileno y sus tres Poderes, requisito indispensable para avanzar en el anhelado Nunca Más.
Advertimos que la omisión e incumplimiento del Estado de Chile de esta obligación internacional, ha facilitado la aparición de voces negacionistas y de movimientos políticos neofascistas que a través de su actuar, agravian la Memoria de las Víctimas al negar los crímenes cometidos en Dictadura y/o reivindicando a sus autores, y cuyos cultores no sólo gozan de las más completa impunidad, sino que además disponen de una permanente tribuna en los medios de comunicación.
Por tanto, junto con hacer un llamado a las organizaciones sociales a expresar su solidaridad con las víctimas, exigimos del Gobierno una condena pública de estos hechos y la inmediata interposición de una acción judicial para perseguir la responsabilidad penal de sus autores. Continuar con su actitud pasiva e indolente, lo hará cómplice de estas graves afrentas contra la Memoria y su obligación de resguardo, además de incurrir en una grave infracción a la normativa internacional de derechos humanos que se ha obligado a respetar, a través de la suscripción y ratificación de los diversos pactos y convenciones que regulan la materia.
Entre los firmantes se encuentran la Comisión Chilena de Derechos Humanos, la Red de Sitios de Memoria, la Fundación Víctor Jara, y la Asociación por la Memoria y Derechos Humanos Colonia Dignidad, entre otros.
