Este lunes, la Unidad Nacional de Pensionados se pronunció respecto de lo que considera una nueva injusticia en contra de los adultos mayores: el cobro de contribuciones a personas de dicho rango etario, quienes han experimentado alzas sostenidas en su avalúo.
Fue en abril de este año cuando el Gobierno, en el marco de la Reforma Tributaria, anunció que tenía considerado eximir del pago de contribuciones a hogares de adultos mayores y de clase media, siempre que sean sin fines de lucro.
Sin embargo, para la Unidad Nacional de Pensionados, esto ya estaba considerado anteriormente en la ley 20732, promulgada en el 2014, y no había resuelto el problema de fondo. Así lo manifestó, en conversación con Diario y Radio Universidad de Chile, el vicepresidente de dicha asociación, Eduardo Caruz.
“Esta ley decía que un jubilado que tuviera una propiedad cuyo valor fiscal era de hasta 85 millones, les rebajaban las contribuciones de bienes raíz. Todos los veteranos felices porque dijeron por fin nos hicieron caso, pero no se fijaron los legisladores que hay una ley más antigua, que dice que, cada cuatro años, se reajustan las propiedades o bienes raíces, agrícolas y no agrícolas”, explicó el dirigente.
Caruz recordó que, a través de iniciativas como la Ley Pereira, de 1984, muchos trabajadores adquirieron casas con avalúos bajos, pero que, con el tiempo, las modificaciones a las mismas y los cambios en los barrios hicieron que dichos avalúos subieran y los dejaran nuevamente obligados a pagar contribuciones.
“Hay personas que compraron su casa con harto esfuerzo y le ponen una línea de metro, un supermercado o un mall, la plusvalía de ese terreno le sube enorme, por lo tanto, también le sube las contribuciones. Eso es lo que estamos viendo, que aquí se está favoreciendo más a un sector que a los jubilados y pensionados”, criticó Caruz.
Esta situación ha provocado que muchos jubilados, ante el incremento de las contribuciones, se vean obligados a vender sus propiedades y a salir de sus barrios. Es por eso que la propuesta planteada desde la Unidad Nacional de Pensionados incluye la eximición de contribuciones no solo a los jubilados, sino a todas las personas de la tercera edad.
Finalmente, desde dicha organización se recordó que esto se suma a la deuda pendiente que el Gobierno mantiene con la tercera edad, y que incluye el poco acceso rebajado al transporte público, la discriminación en las isapres y seguros, y la mejoría en las pensiones recibidas.