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¡Quedémonos despiertos y no compraremos más pescadas!

Columna de opinión por Claudia Farah
Miércoles 20 de noviembre 2019 13:53 hrs.


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Este mes de manifestaciones por una sociedad más justa que nos respete y nos de garantías por igual de una vida digna fue sólo el comienzo. Chile Despertó y es fundamental que con el paso de los días, las semanas y los meses no volvamos a dormir en los laureles porque si no, todo esto habrá sido en vano. ¡Imagínense que en abril resulta que va más gente a votar que NO hay que cambiar la Constitución!

Hay que quedarse con los ojos bien abiertos. Atentos a posibles engaños circulando en redes sociales, atentos a la seguridad, atentos a si tu diputado/a y senador/a fue a votar lo que le corresponde.  Hay que estar PENDIENTES DE TODO porque cuando nos dormimos (¡tantos años!) fue que terminamos así.

De las principales cosas que no debimos perder de vista y a las que ahora debemos estar atentos, hasta que las leyes de una sociedad digna sean instauradas, son:

  1. Asegurémonos que la información es verdadera y la entendamos: no hay que quedarse con lo que le dice una persona ni con los titulares.  Si no entendemos, busquemos a alguien que nos lo explique. Es imperativo formarse una opinión propia porque de lo contrario nos van a seguir vendiendo pescadas.
  2. Recordémosle al alcalde, diputado/a, senador/a y presidente/a que están ahí para representarnos: así tal cual, porque la democracia es de dos vías: nosotros les damos la capacidad de representarnos por lo que ell@s no pueden correr con colores propios.  Hay que revisar que cumplan lo prometido y denunciarlos cuando no.  Revisar que vayan a sesionar y voten de acuerdo a lo que le conviene al territorio, no a sus bolsillos. Está todo en la web del Congreso y de cada municipio.  Si hay un problema por resolver, organicémonos con los vecinos para pedir en masa cierto voto.  Vamos a verlos cuando estén en el territorio. Hay que estar encima permanentemente, no vaya a ser cosa que se les olvide que son nuestros representantes y que su sueldo es para esa pega.
  3. Mantengamos la comunidad: que esto no sea sólo una cosa del momento y no regresen a pelear por wasap por el lugar donde alguien dejó el basurero.  Organícense con los que viven a su alrededor y revivan las Junta de Vecinos: ellas tienen poder local y posibilidad de acceder a recursos desperdiciados.
  4. Vayamos a votar INFORMADOS: sólo 46.7% de las personas habilitadas fueron a votar en la primera vuelta de las elecciones presidenciales del 2017 (49.02% para la segunda vuelta).  Es decir, más de la mitad de los ciudadan@s dejaron que saliera “cualquiera”. ¿Vió que no da lo mismo el/la que resulte electo? ¡No da lo mismo para ningún cargo! Más ahora que la Nueva Constitución será sólo un marco y las cosas importantes serán determinadas por las nuevas leyes que los diputados y senadores elegidos en octubre 2020 redacten.  De ellos y ellas dependerá si hay o no más AFP, cómo tener pensiones dignas, cómo tendremos salud y todo lo que de verdad hará la diferencia en nuestra calidad de vida.
  5. No nos conformemos nunca más con lo que hay:  el país lo hacemos todos, cada día.  Lo hacemos de a poco, con las pequeñas acciones como cuidar al vecino, marcar una preferencia en un voto, no robar en el supermercado, ayudar a quien lo necesita en la escalera, contribuir a la educación y tantos otros gestos pequeños, pero trascendentales, que nos van generando pequeñas alegrías diarias un mejor país para todos nosotros.  Si no hay un candidato/a que te guste, habrá que organizarse y levantar a alguien desde la comunidad. ¿Por qué no? En este nuevo Chile TODO es posible.

Hay que mantener los ojos bien abiertos para que no volvamos a tener que bancarnos otro toque de queda porque alguien siente que tiene que obligarnos a callar, en vez de escuchar nuestras palabras.

Nos queda mucho para armar este nuevo país y lo tenemos que hacer entre tod@s.

El contenido vertido en esta columna de opinión es de exclusiva responsabilidad de su autor y no refleja necesariamente la posición de Diario y Radio Universidad de Chile.