La tarde de este martes se llevó a cabo una reunión entre el ministro de Educación, Raúl Figueroa, y directivos del Colegio de Profesores, esto en el marco del anunció del Mineduc respecto de realizar este año –pese a las críticas- la prueba Simce.
Aunque según aseguró el presidente del magisterio, Mario Aguilar, esta reunión ya estaba pactada desde la semana pasada, fue inevitable tener como punto principal de tabla su rechazo a la aplicación de la prueba mencionada.
Además de esto, agregó Aguilar en su balance posterior, se le hizo llegar al ministro Figueroa un documento donde se explicita diversas posturas y recomendaciones tanto del ámbito pedagógico como sanitario, en la cuales se sustenta su rechazo la vuelta a clases de forma presencial.
“Nos parece absolutamente impensable que se pueda volver a clases en el corto plazo. Hemos dicho que aquellas condiciones que los expertos han determinado que tienen que existir en los colegios, esas condiciones deben estar garantizadas al momento de que se esté pensando en retornar a las clases presenciales. Esas condiciones no pueden ser ideales, tienen que ser mínimas”, señaló el dirigente.
Asimismo. Aguilar se refirió a las prioridades que se debería tener en cuenta en el trabajo pedagógico de este año, esto en medio de una crisis sanitaria que obliga a las comunidades educativas a replantear sus mecanismos de enseñanza y aprendizaje.
“Creemos que el propósito fundamental del trabajo pedagógico en este tiempo tiene que ser lo socioemocional más que la cobertura curricular, y respecto al tema curricular mismo estimamos que tiene que tenderse más que a una priorización de contenidos, pero basándose en la misma lógica que ha seguido el currículum en tiempos de normalidad, tiene que haber una nuclearización de contenidos”, sostuvo.
Además, tal y como se hizo apenas se conoció el anunció del Mineduc respecto de la prueba Simce, Aguilar reiteró su rechazo a la aplicación de dicha prueba, justamente porque desviaría las prioridades en las que la comunidad educativa debería estar concentrada.
“Nos parece absolutamente impropio someter a las comunidades escolares a esa presión, a ese despliegue de energía que significa la prueba Simce, donde hay que hacer preparación, donde los colegios muchas veces concentran todo su esfuerzo en eso, y que va a implicar necesariamente desatender otros aspectos que a nuestro entender hoy día son muchísimo más importantes”, subrayó.
Sumado a este rechazo, el presidente del gremio de profesores también incluyó sus cuestionamientos a la evaluación docente de este año, enfatizando los diversos problemas de salud mental por las que muchos miembros de la comunidad educativa ya están atravesando en medio de la crisis.
“Estamos viviendo una situación de anormalidad que presiona a nuestra gente. Ya se están produciendo problemas de salud mental, muy importantes de atender según el comité de expertos. En la priorización que se tiene que dar al aspecto socioemocional, debemos focalizar los esfuerzos de las comunidades educativas, por lo tanto, qué sentido tiene que la evaluación docente se pueda realizar en estas condiciones de absoluta anormalidad”, criticó.
Finalmente, Aguilar aseguró que el ministro de Educación ha mantenido su postura respecto de la prueba Simce, pero aseguró que evaluará lo manifestado por el Colegio de Profesores sobre la evaluación docente.
Otra de las críticas que según el presidente del gremio se le hizo llegar a Raúl Figueroa tuvieron que ver con los acuerdos logrados con la anterior gestión después del paro de profesores de mediados de 2019. “Muchos de esos puntos no se han concretado”, manifestó Aguilar.