El pasado lunes, el Presidente Sebastián Piñera hizo un llamado a un “gran acuerdo nacional” con el fin de delinear el actuar del Gobierno y los organismos estatales para enfrentar la pandemia y los tiempos posteriores a ella. “El diálogo y la colaboración son más necesarios que nunca”, dijo en dicha oportunidad.

Por su parte, el ministro del Interior, Gonzalo Blumel, tras una reunión con los representantes de los partidos de Chile Vamos, estableció  junio como el mes idóneo para que este acuerdo se lleve a cabo con todos los sectores políticos.

El pacto, muy similar a lo ocurrido en noviembre de 2019 cuando se firmó la hoja de ruta para la realización de un plebiscito, ha generado críticas de distintos sectores ajenos a la llamada “cúpula política”.

Este miércoles, convocados por el Colegio de Profesores, distintas agrupaciones sociales dieron su parecer ante el llamado del Presidente, declarando el acuerdo como “ilegítimo” al no contar con la participación transversal de todos los agentes de la sociedad.

“Rechazamos este intento, una vez más, de generar un acuerdo de cúpulas, un acuerdo a espaldas de la gente, a espaldas de la ciudadanía. Un acuerdo que pretende sepultar la movilización social, pero es una vana pretensión, es una absurda pretensión. Primero, porque la movilización social está más activa que nunca, está activa en los barrios, está activa en las ollas comunes, está activa en la participación de la gente para organizarse y dar respuesta a esta grave crisis”, dijo el presidente del Colegio de Profesores, Mario Aguilar.

Así vez, la presidenta de la FECh, Emilia Schneider, también presente en dicha instancia, rechazó la intención política de construir esta mesa, por la misma razón: la ausencia de la ciudadanía.

“Desde ya vaticinamos la falta de legitimidad que tendrá este acuerdo en la población. Lo decimos porque somos organizaciones reales y genuinas, con fuerte raigambre en el tejido social que conoce y hace suyo el fuerte rechazo a cualquier acuerdo construido a espaldas de la población. En especial cuando los promotores de éste han manifestado de manera clara su voluntad de impedir el ejercicio democrático de un plebiscito que ponga fin, de una vez por todas, a la Constitución política de la tiranía cívico militar”, declaró Schneider.

Otra de las organizaciones sociales presentes en la transmisión telemática fue el Movimiento de Defensa del Agua, la Tierra y la Protección del Medioambiente (Modatima), quienes denunciaron un relego de los temas medioambientales durante la pandemia.

Al respecto, el pasado viernes el Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) ingresó un recurso de protección en la Corte de Apelaciones de Valparaíso por la decisión del seremi de Salud de la región de rebajar a 50 litros de agua potable por persona en la provincia de Petorca en medio de la pandemia, cuando la escasea del recurso natural escasea por esa zona, el que durante esta jornada fue rechazado por la Corte de Apelaciones de la región.

“Ahí están aquellos que hoy día pretenden, con mano ajena una vez más, imponer una falaz normalidad. Digo una falsa normalidad porque este pacto es uno entre gatopardistas, entre aquellos que proponen y promueven cambiarlo todo para que para que todo siga igual. Nos llama muchísima la atención que este pacto nacional, del cual habla la casta hoy, no tenga ninguna mención con respecto al modelo de desarrollo, no tenga ninguna mención a la forma en la cual el modelo primario exportador chileno que explota de manera intensiva e irracional los recursos naturales”, declaró el presidente de la organización, Rodrigo Mundaca.

A la oposición de las organizaciones sociales, se suma la que desde algunos sectores políticos tradicionales, como el Partido Comunista, han presentado a la propuesta de Gobierno. “Primero vamos a mirar con calma qué va a ofrecer el Gobierno. Tiene que ser muy claro”, dijo su presidente, Guillermo Tellier.