La Corte Suprema de Colombia ordenó este 4 de agosto el arresto domiciliario del expresidente y senador Álvaro Uribe, el político más influyente del país suramericano en este siglo, dentro del proceso que le sigue por manipulación de testigos contra un opositor.
En 2012, el expresidente de Colombia Álvaro Uribe presentó una denuncia contra el senador de izquierda Iván Cepeda, por un supuesto complot en su contra apoyado en falsos testimonios. Lo acusó de contactar a ex paramilitares presos para que lo involucraran en actividades criminales.
La Corte Suprema de Justicia no enjuició a Cepeda y por el contrario, en 2018 abrió una investigación contra Uribe, por la misma sospecha: manipular testigos contra su opositor. Finalmente, la Corte Suprema dictó medida de aseguramiento contra Uribe mientras más adelante resuelve si lo llama a juicio en su calidad de senador.
“Yo lo que puedo decir es que la Corte contaba con un acervo probatorio muy amplio, que son dos años prácticamente de investigación. A mi no me sorprende la medida porque era la que correspondía al derecho”, reaccionó Reinaldo Villalba, abogado del senador Iván Cepeda.
Duque: “Inocencia y honorabilidad”
El exmandatario de 68 años siempre ha alegado inocencia y cuenta con un sólido apoyo popular. Incluso del actual presidente, Iván Duque. Sólo un par de horas después de conocerse la noticia, Duque salió en defensa de su mentor, quien es también jefe de su partido de derecha, llamado Centro Democrático.
“Soy y seré siempre un creyente en la inocencia y honorabilidad de quien con su ejemplo se ha ganado un lugar en la historia de Colombia”, dijo Duque en un mensaje a los ciudadanos. “Duele como colombiano que muchos de los que han lacerado al país con barbarie se defiendan en libertad o, inclusive, tengan garantizado jamás ir a prisión, y que a un servidor público ejemplar, que ha ocupado la más alta dignidad del Estado, no se le permita defenderse en libertad, con la presunción de inocencia”, indicó.
¿Qué sigue?
Los uribistas cierran filas alrededor de su líder mientras que los políticos de centro y de oposición exigen respeto por la justicia, la institucionalidad y el debido proceso.
Ayer en la noche, informa nuestra corresponsal Natalia Orozco, desafiando la prohibición que, por la pandemia, hicieron las alcaldías de manifestaciones, numerosos colombianos salieron en sus carros tocando sus bocinas para protestar contra la medida tomada por la Corte Suprema. Otros con cacerolas y aplausos desde sus balcones quisieron apoyar la decisión de los juristas y la independencia de poderes.
La noticia anuncia un cambio en el mapa político del país. Por ahora el tribunal deberá seguir investigando, para decidir si lo llama a juicio o precluye el proceso. El eventual juicio señalaría si es culpable o inocente de manipulación de testigos, aunque lo que gran parte del país quiere saber, es si es culpable o inocente de vínculos con militares corruptos, agentes de inteligencia y lideres paramilitares que en nombre de la lucha contra las guerrillas dejaron miles de víctimas.
Foto: AFP.
La Corte Suprema de Colombia ordenó este 4 de agosto el arresto domiciliario del expresidente y senador Álvaro Uribe, el político más influyente del país suramericano en este siglo, dentro del proceso que le sigue por manipulación de testigos contra un opositor.
En 2012, el expresidente de Colombia Álvaro Uribe presentó una denuncia contra el senador de izquierda Iván Cepeda, por un supuesto complot en su contra apoyado en falsos testimonios. Lo acusó de contactar a ex paramilitares presos para que lo involucraran en actividades criminales.
La Corte Suprema de Justicia no enjuició a Cepeda y por el contrario, en 2018 abrió una investigación contra Uribe, por la misma sospecha: manipular testigos contra su opositor. Finalmente, la Corte Suprema dictó medida de aseguramiento contra Uribe mientras más adelante resuelve si lo llama a juicio en su calidad de senador.
“Yo lo que puedo decir es que la Corte contaba con un acervo probatorio muy amplio, que son dos años prácticamente de investigación. A mi no me sorprende la medida porque era la que correspondía al derecho”, reaccionó Reinaldo Villalba, abogado del senador Iván Cepeda.
Duque: “Inocencia y honorabilidad”
El exmandatario de 68 años siempre ha alegado inocencia y cuenta con un sólido apoyo popular. Incluso del actual presidente, Iván Duque. Sólo un par de horas después de conocerse la noticia, Duque salió en defensa de su mentor, quien es también jefe de su partido de derecha, llamado Centro Democrático.
“Soy y seré siempre un creyente en la inocencia y honorabilidad de quien con su ejemplo se ha ganado un lugar en la historia de Colombia”, dijo Duque en un mensaje a los ciudadanos. “Duele como colombiano que muchos de los que han lacerado al país con barbarie se defiendan en libertad o, inclusive, tengan garantizado jamás ir a prisión, y que a un servidor público ejemplar, que ha ocupado la más alta dignidad del Estado, no se le permita defenderse en libertad, con la presunción de inocencia”, indicó.
¿Qué sigue?
Los uribistas cierran filas alrededor de su líder mientras que los políticos de centro y de oposición exigen respeto por la justicia, la institucionalidad y el debido proceso.
Ayer en la noche, informa nuestra corresponsal Natalia Orozco, desafiando la prohibición que, por la pandemia, hicieron las alcaldías de manifestaciones, numerosos colombianos salieron en sus carros tocando sus bocinas para protestar contra la medida tomada por la Corte Suprema. Otros con cacerolas y aplausos desde sus balcones quisieron apoyar la decisión de los juristas y la independencia de poderes.
La noticia anuncia un cambio en el mapa político del país. Por ahora el tribunal deberá seguir investigando, para decidir si lo llama a juicio o precluye el proceso. El eventual juicio señalaría si es culpable o inocente de manipulación de testigos, aunque lo que gran parte del país quiere saber, es si es culpable o inocente de vínculos con militares corruptos, agentes de inteligencia y lideres paramilitares que en nombre de la lucha contra las guerrillas dejaron miles de víctimas.
Foto: AFP.
La Corte Suprema de Colombia ordenó este 4 de agosto el arresto domiciliario del expresidente y senador Álvaro Uribe, el político más influyente del país suramericano en este siglo, dentro del proceso que le sigue por manipulación de testigos contra un opositor.
En 2012, el expresidente de Colombia Álvaro Uribe presentó una denuncia contra el senador de izquierda Iván Cepeda, por un supuesto complot en su contra apoyado en falsos testimonios. Lo acusó de contactar a ex paramilitares presos para que lo involucraran en actividades criminales.
La Corte Suprema de Justicia no enjuició a Cepeda y por el contrario, en 2018 abrió una investigación contra Uribe, por la misma sospecha: manipular testigos contra su opositor. Finalmente, la Corte Suprema dictó medida de aseguramiento contra Uribe mientras más adelante resuelve si lo llama a juicio en su calidad de senador.
“Yo lo que puedo decir es que la Corte contaba con un acervo probatorio muy amplio, que son dos años prácticamente de investigación. A mi no me sorprende la medida porque era la que correspondía al derecho”, reaccionó Reinaldo Villalba, abogado del senador Iván Cepeda.
Duque: “Inocencia y honorabilidad”
El exmandatario de 68 años siempre ha alegado inocencia y cuenta con un sólido apoyo popular. Incluso del actual presidente, Iván Duque. Sólo un par de horas después de conocerse la noticia, Duque salió en defensa de su mentor, quien es también jefe de su partido de derecha, llamado Centro Democrático.
“Soy y seré siempre un creyente en la inocencia y honorabilidad de quien con su ejemplo se ha ganado un lugar en la historia de Colombia”, dijo Duque en un mensaje a los ciudadanos. “Duele como colombiano que muchos de los que han lacerado al país con barbarie se defiendan en libertad o, inclusive, tengan garantizado jamás ir a prisión, y que a un servidor público ejemplar, que ha ocupado la más alta dignidad del Estado, no se le permita defenderse en libertad, con la presunción de inocencia”, indicó.
¿Qué sigue?
Los uribistas cierran filas alrededor de su líder mientras que los políticos de centro y de oposición exigen respeto por la justicia, la institucionalidad y el debido proceso.
Ayer en la noche, informa nuestra corresponsal Natalia Orozco, desafiando la prohibición que, por la pandemia, hicieron las alcaldías de manifestaciones, numerosos colombianos salieron en sus carros tocando sus bocinas para protestar contra la medida tomada por la Corte Suprema. Otros con cacerolas y aplausos desde sus balcones quisieron apoyar la decisión de los juristas y la independencia de poderes.
La noticia anuncia un cambio en el mapa político del país. Por ahora el tribunal deberá seguir investigando, para decidir si lo llama a juicio o precluye el proceso. El eventual juicio señalaría si es culpable o inocente de manipulación de testigos, aunque lo que gran parte del país quiere saber, es si es culpable o inocente de vínculos con militares corruptos, agentes de inteligencia y lideres paramilitares que en nombre de la lucha contra las guerrillas dejaron miles de víctimas.
Foto: AFP.
