Alemania: Elecciones regionales clave para los conservadores de Merkel el domingo
En Alemania, los conservadores de la canciller Angela Merkel, envueltos en un escándalo financiero y una serie de fracasos en la gestión de la pandemia de Covid-19, temen recibir un voto de castigo en dos elecciones regionales clave el domingo.
Viernes 12 de marzo 2021 12:26 hrs.
Son dos de los estados federales más importantes de Alemania, Renania-Palatinado y Baden-Wurtemberg, llenos de industrias de gran potencia exportadora.
En estas elecciones de parlamentos de los estados federales, el gran experimento parece ser el de Baden-Wurtemberg, donde a todas luces será reelegido Winfried Kretschmann, el primer y único jefe de gobierno de Los Verdes de un Land, un estado federal en Alemania.
Kretschmann es parte del ala conservadora del partido ecologista, católico practicante y de un pragmatismo que asusta a sus compañeros de partido, pero que podría ser la clave que lleve a este partido boutique en una fuerza nacional capaz de gobernar al país entero.
En Renania-Palatinado el tono es muy distinto, porque aquí se juega la vida y la supervivencia de los socialdemócratas, el SPD alemán. Al parecer la actual jefe de gobierno, Malu Dreyer, logrará, sin bien arañando, mantener su cargo.
Preocupante es el avance del partido de extrema derecha Alianza por Alemania, el AfD, que en Baden-Wurtemberg y en Renania-Palatinado ya ocupan la cuarta posición de intenciones de voto en estas elecciones.
Y todavía se mantiene la enorme brecha mental del Muro de Berlín: el partido La Izquierda, nacido de los restos de la Alemania del Este, no alcanzaría ni una sola plaza en ninguno de los dos parlamentos.
Son dos de los estados federales más importantes de Alemania, Renania-Palatinado y Baden-Wurtemberg, llenos de industrias de gran potencia exportadora.
En estas elecciones de parlamentos de los estados federales, el gran experimento parece ser el de Baden-Wurtemberg, donde a todas luces será reelegido Winfried Kretschmann, el primer y único jefe de gobierno de Los Verdes de un Land, un estado federal en Alemania.
Kretschmann es parte del ala conservadora del partido ecologista, católico practicante y de un pragmatismo que asusta a sus compañeros de partido, pero que podría ser la clave que lleve a este partido boutique en una fuerza nacional capaz de gobernar al país entero.
En Renania-Palatinado el tono es muy distinto, porque aquí se juega la vida y la supervivencia de los socialdemócratas, el SPD alemán. Al parecer la actual jefe de gobierno, Malu Dreyer, logrará, sin bien arañando, mantener su cargo.
Preocupante es el avance del partido de extrema derecha Alianza por Alemania, el AfD, que en Baden-Wurtemberg y en Renania-Palatinado ya ocupan la cuarta posición de intenciones de voto en estas elecciones.
Y todavía se mantiene la enorme brecha mental del Muro de Berlín: el partido La Izquierda, nacido de los restos de la Alemania del Este, no alcanzaría ni una sola plaza en ninguno de los dos parlamentos.
Son dos de los estados federales más importantes de Alemania, Renania-Palatinado y Baden-Wurtemberg, llenos de industrias de gran potencia exportadora.
En estas elecciones de parlamentos de los estados federales, el gran experimento parece ser el de Baden-Wurtemberg, donde a todas luces será reelegido Winfried Kretschmann, el primer y único jefe de gobierno de Los Verdes de un Land, un estado federal en Alemania.
Kretschmann es parte del ala conservadora del partido ecologista, católico practicante y de un pragmatismo que asusta a sus compañeros de partido, pero que podría ser la clave que lleve a este partido boutique en una fuerza nacional capaz de gobernar al país entero.
En Renania-Palatinado el tono es muy distinto, porque aquí se juega la vida y la supervivencia de los socialdemócratas, el SPD alemán. Al parecer la actual jefe de gobierno, Malu Dreyer, logrará, sin bien arañando, mantener su cargo.
Preocupante es el avance del partido de extrema derecha Alianza por Alemania, el AfD, que en Baden-Wurtemberg y en Renania-Palatinado ya ocupan la cuarta posición de intenciones de voto en estas elecciones.
Y todavía se mantiene la enorme brecha mental del Muro de Berlín: el partido La Izquierda, nacido de los restos de la Alemania del Este, no alcanzaría ni una sola plaza en ninguno de los dos parlamentos.
