A finales de marzo de 2020 la actriz Patricia Rivadeneira y el cineasta Esteban Larraín lanzaron una plataforma de streaming que, para el momento, resultaba inédita: Escenix. El proyecto debía presentarse durante el segundo semestre de ese año, pero ante la crisis sanitaria, los gestores decidieron adelantar su trabajo con el objetivo de visibilizar el quehacer de las artes escénicas de cara a una crisis sanitaria que apenas comenzaba a sentirse.
Así, rápidamente Escenix comenzó a instalarse de la mano de una cartelera virtual en la que destacaron montajes como Xuarez de Luis Barrales, La iguana de Alessandra de Ramón Griffero y El Dylan de Bosco Cayo, entre otros.
Hoy, a un año de su puesta en marcha, la plataforma exhibe un ciclo de dramaturgas chilenas desarrollado junto a el Archivo de la Escena Teatral de la Escuela de Teatro UC , una sección dedicada a la danza y distintos registros realizados por Teatro ICTUS entre 1978 y 2006. En total, la iniciativa contabiliza 37 mil suscriptores y 115 mil visualizaciones.
Según Esteban Larraín, las evaluaciones son positivas. Esto, pese a que durante los últimos meses las plataformas de streaming han experimentado una baja en sus audiencias. “El traslado de la cartelera ha sido bastante exitoso: tenemos una programación de 70 obras constantes, han pasado más de 115 obras y, a fines de 2020, partimos con el sistema de pago al interior de la plataforma que ha andado bastante bien”, comenta el cineasta.
“Lo que pasó durante 2020 fue que salimos en marzo, un poco como una forma de contribuir al encierro del resto del país, pero, paralelamente, empezamos un proceso de búsqueda de contenido y, cuando era posible, volvíamos al escenario sin público a grabar”, explica el gestor.
De ese modo, durante 2020, Escenix concretó alianzas con instituciones como GAM, Teatro Mori y Matucana 100, entre otras. Esto les permitió generar una vitrina capaz de exhibir contenido actual y patrimonial: “Siempre estamos buscando contenidos interesantes para ir dándole variedad a la cartelera (…). Este 2021 es como el año de la madurez”, adelanta Larraín.
“Cuando presentamos el proyecto hicimos hincapié en el potencial archivístico que constituía Escenix al no solamente preservar obras contemporáneas en excelente calidad, sino que íbamos a hacer un gran esfuerzo por recolectar obras que se hayan grabado en el pasado (…). Hay una intención de ser un depósito patrimonial que sirva para gente joven o no tan joven, para gente que quiera disfrutar o investigar”, afirma el realizador.
En ese sentido, Larraín comentó que el equipo detrás de la plataforma también está explorando nuevos formatos. Uno de ellos será la realidad virtual, iniciativa que sería lanzada durante el segundo semestre de este año: “Vamos a incursionar con las primeras obras en nuevos formatos de realidad virtual, lo que implica grabar una obra, arriba del escenario desde el punto de vista de un espectador omnisciente en 360º. Después la ves con estos lentes de realidad virtual de forma que sigues la obra arriba del escenario, mirando en todas las direcciones y mirando a los actores como pasan al lado tuyo. Hay una segunda opción que en vez de que adquieras la perspectiva de un testigo invisible, tú adquieres el punto de vista del personaje que escojas”.
En el marco del primer aniversario de la plataforma, Escenix presentó un catálogo con 40 obras al que se podrá acceder, pagando un pase de $3.990 por montaje. Con ello el público podrá acceder a una pieza, todas las veces que se desee, pero por 48 horas.
Por otra parte, el 27 de marzo, en el marco del Día Internacional del Teatro, se realizará un homenaje a la actriz chilena Myriam Palacios a través del lanzamiento del documental La Desmemoriada. Posteriormente, se sumará un ciclo de standuperos desconocidos, músicos independientes y obras internacionales. De esta manera, la plataforma pretende continuar visibilizando el trabajo de los artistas nacionales en medio de una de las crisis más difíciles que ha debido sortear el sector.