La primera Conferencia de Estados Africanos Independientes (All-African Peoples Conference) se celebró en Accra, Ghana, el 15 de abril de 1958. Organizada por líderes políticos africanos para celebrar por primera vez una conferencia de unidad panafricana (unidad, integración y soberanía de África independiente) en territorio africano. Esta contó con la participación de representantes de: Etiopía, Ghana, Guinea, Liberia, Libia, Marruecos, Sudán; Túnez, República Árabe Unida (Egipto y Siria) y del Frente de Liberación Nacional (Argelia) y de la Unión de los Pueblos de Camerún.
La histórica Conferencia fue liderada por Nkwame Nkrumah, quien fue el primer presidente de Ghana en 1957 al convertirse en la primera nación independiente del África Subsahariana. Nkrumah fue uno de los líderes más influyentes del movimiento panafricanista y de la lucha anticolonialista y antiimperialista por la liberación, independencia e integración africana. Activo militante de la unidad africana y gran impulsor de la que sería la Organización para la Unidad Africana (OUA) , instancia antecesora de la actual Unión Africana.
El pueblo chileno a través de sus organizaciones sociales y políticas construyó una temprana relación con los países del África independiente que se reunieron en abril de 1958 en Accra y que apoyaron resueltamente la lucha de los fuerzas y movimientos de liberación anticolonialistas africanos. La activa solidaridad del Comité Chileno Pro-Autodeterminación de Argelia con el Frente de Liberación Nacional Argelino en su guerra de liberación contra el colonialismo francés fue inspiradora para gestar una precursora relación entre los pueblos del África y de Chile. En septiembre de 1958, aterrizó en Santiago de Chile, por primera vez, una delegación africana encabezada por un embajador representante personal del presidente Nkrumah junto a embajadores de Ghana, Etiopía y Egipto. La alta delegación africana vino a Chile mandatada por la Conferencia de Estados Africanos Independientes reunida unos meses antes en Accra, para expresar al pueblo chileno, a sus organizaciones sociales y políticas y al gobierno chileno su visión sobre el proceso de descolonización y de unidad africana en curso y expresar oficialmente el resuelto apoyo del África Independiente con la lucha Independentista argelina y la descolonización total del África. La primera delegación conjunta del África Independiente priorizó visitar Chile entre los primeros países latinoamericanos, pues el pueblo chileno organizado había sido precursor en manifestar una activa solidaridad con la heroica lucha contra el colonialismo por la autodeterminación del pueblo argelino, conducida por el Frente de Liberación Nacional de Argelia. La diplomacia de los pueblos en lucha, fue el puente de plata para conocerse mutuamente y estrechar las relaciones entre el pueblo chileno y el África anticolonialista. En 1962, Argelia conquistaría su independencia y Chile le reconocería inmediatamente estableciendo relaciones diplomáticas.
El 25 de mayo de 1963, en Addis Abeba, Etiopía, se produjo otro encuentro histórico, que le dio continuidad a la Primera Conferencia de Estados Africanos Independientes al constituirse la Organización para la Unidad Africana (OUA). A partir de ese día se ratificó y se instauró la conmemoración del Día del África. Día que conmemora la liberación Africana contra el colonialismo, el apartheid y por la autodeterminación y soberanía e integración de los pueblos del África. En este día de conmemoración de la liberación y de la Unidad Africana, rendimos homenaje los pueblos africanos en lucha. A las mujeres y hombres del continente africano que resistieron y lucharon contra la esclavitud, el genocidio, el apartheid y el saqueo de sus recursos estratégicos perpetrado por el colonialismo y el imperialismo Occidental.
Simbolizamos la conmemoración del Día del África en la actual lucha de liberación que sigue librando hoy en pleno siglo XXI el Frente Polisario y la República Árabe Saharaui Democrática (país fundador de la Unión Africana) para conquistar la total soberanía e independencia sobre el conjunto del territorio del Sáhara Occidental que pertenece al pueblo saharaui. El último vestigio de colonialismo que subsiste en territorio Africano.