Durante una sesión especialmente convocada al efecto, la Alta Comisionada para los Derechos Humanos de Naciones Unidas manifestó su inquietud por la escalada bélica en Gaza. Durante su intervención, Michelle Bachelet señaló que los ataques de Israel en la zona “siembran dudas sobre el cumplimiento israelí de los principios de distinción y proporcionalidad en la ley humanitaria internacional”.
Si se demuestra que esos ataques fueron indiscriminados y desproporcionados, “tales ataques podrían constituir crímenes de guerra”, agregó la representante de Naciones Unidas.
La ex presidenta chilena apuntó a los argumentos del país israelita que señalan que los edificios que recibieron bombardeos “acogían grupos armados o eran utilizados con propósitos militares”, sin embargo, aún no se han podido recabar evidencias que demuestren tales afirmaciones. Además, Bachelet se refirió a las acciones del grupo yihadista y aseguró que ellas también constituyen “una violación de la ley internacional ubicar recursos militares en zonas civiles densamente pobladas, o atacar desde ellas”, y que las acciones de una de las partes no eximen a la otra de sus obligaciones”.
A la vez, la Alta Comisionada hizo énfasis en las diferencias que viven los civiles israelíes y palestinos, ya que los primeros “disponen de la cúpula de hierro y fuerzas militares profesionales para defenderlos, mientras que los segundos carecen totalmente de protección ante ataques aéreos”.
Según lo informado por la cadena alemana Deutsche Welle, en la instancia celebrada este jueves, Michelle Bachelet recalcó que la de Gaza es “una de las zonas más densamente pobladas del mundo” y que los palestinos hace 14 años que se encuentran bloqueados por tierra, aire y mar, por lo tanto, no tienen dónde escapar.
A su vez, el relator de la ONU para los DDHH en Palestina, Michael Lynk, aseguró que la situación de los habitantes de ese lugar es “desesperada” y que la Organización de Naciones Unidas ha calificado como ” insostenible e invivible, una forma de castigo colectivo”. En paralelo, Lynk denunció que los desalojos de palestinos en Jerusalén Este forman parte del plan de Israel para aumentar los asentamientos ilegales y así lograr interponer un reclamo ilegal de soberanía, una práctica a la que se le ha instado a detener por la propia ONU.
Finalmente el relator en Palestina volvió a solicitar que los hechos ocurridos en Gaza en las últimas semanas sean objeto de una investigación por parte de la Corte Penal Internacional.
Por su parte, la administración israelita solicitó a la ONU una condena expresa a las acciones del grupo Hamas, argumentando que de no existir esta condena se “dará a ése y otros grupos terroristas excusa para seguir usando inocentes como escudos humanos”.
De acuerdo con lo que manifestó Meirav Eilon Shahar, embajadora de Israel ante la ONU, el Consejo de Naciones Unidas “debe elegir entre una organización terrorista que glorifica la muerte, o entre una democracia que valora la vida”.
Durante una sesión especialmente convocada al efecto, la Alta Comisionada para los Derechos Humanos de Naciones Unidas manifestó su inquietud por la escalada bélica en Gaza. Durante su intervención, Michelle Bachelet señaló que los ataques de Israel en la zona “siembran dudas sobre el cumplimiento israelí de los principios de distinción y proporcionalidad en la ley humanitaria internacional”.
Si se demuestra que esos ataques fueron indiscriminados y desproporcionados, “tales ataques podrían constituir crímenes de guerra”, agregó la representante de Naciones Unidas.
La ex presidenta chilena apuntó a los argumentos del país israelita que señalan que los edificios que recibieron bombardeos “acogían grupos armados o eran utilizados con propósitos militares”, sin embargo, aún no se han podido recabar evidencias que demuestren tales afirmaciones. Además, Bachelet se refirió a las acciones del grupo yihadista y aseguró que ellas también constituyen “una violación de la ley internacional ubicar recursos militares en zonas civiles densamente pobladas, o atacar desde ellas”, y que las acciones de una de las partes no eximen a la otra de sus obligaciones”.
A la vez, la Alta Comisionada hizo énfasis en las diferencias que viven los civiles israelíes y palestinos, ya que los primeros “disponen de la cúpula de hierro y fuerzas militares profesionales para defenderlos, mientras que los segundos carecen totalmente de protección ante ataques aéreos”.
Según lo informado por la cadena alemana Deutsche Welle, en la instancia celebrada este jueves, Michelle Bachelet recalcó que la de Gaza es “una de las zonas más densamente pobladas del mundo” y que los palestinos hace 14 años que se encuentran bloqueados por tierra, aire y mar, por lo tanto, no tienen dónde escapar.
A su vez, el relator de la ONU para los DDHH en Palestina, Michael Lynk, aseguró que la situación de los habitantes de ese lugar es “desesperada” y que la Organización de Naciones Unidas ha calificado como ” insostenible e invivible, una forma de castigo colectivo”. En paralelo, Lynk denunció que los desalojos de palestinos en Jerusalén Este forman parte del plan de Israel para aumentar los asentamientos ilegales y así lograr interponer un reclamo ilegal de soberanía, una práctica a la que se le ha instado a detener por la propia ONU.
Finalmente el relator en Palestina volvió a solicitar que los hechos ocurridos en Gaza en las últimas semanas sean objeto de una investigación por parte de la Corte Penal Internacional.
Por su parte, la administración israelita solicitó a la ONU una condena expresa a las acciones del grupo Hamas, argumentando que de no existir esta condena se “dará a ése y otros grupos terroristas excusa para seguir usando inocentes como escudos humanos”.
De acuerdo con lo que manifestó Meirav Eilon Shahar, embajadora de Israel ante la ONU, el Consejo de Naciones Unidas “debe elegir entre una organización terrorista que glorifica la muerte, o entre una democracia que valora la vida”.
Durante una sesión especialmente convocada al efecto, la Alta Comisionada para los Derechos Humanos de Naciones Unidas manifestó su inquietud por la escalada bélica en Gaza. Durante su intervención, Michelle Bachelet señaló que los ataques de Israel en la zona “siembran dudas sobre el cumplimiento israelí de los principios de distinción y proporcionalidad en la ley humanitaria internacional”.
Si se demuestra que esos ataques fueron indiscriminados y desproporcionados, “tales ataques podrían constituir crímenes de guerra”, agregó la representante de Naciones Unidas.
La ex presidenta chilena apuntó a los argumentos del país israelita que señalan que los edificios que recibieron bombardeos “acogían grupos armados o eran utilizados con propósitos militares”, sin embargo, aún no se han podido recabar evidencias que demuestren tales afirmaciones. Además, Bachelet se refirió a las acciones del grupo yihadista y aseguró que ellas también constituyen “una violación de la ley internacional ubicar recursos militares en zonas civiles densamente pobladas, o atacar desde ellas”, y que las acciones de una de las partes no eximen a la otra de sus obligaciones”.
A la vez, la Alta Comisionada hizo énfasis en las diferencias que viven los civiles israelíes y palestinos, ya que los primeros “disponen de la cúpula de hierro y fuerzas militares profesionales para defenderlos, mientras que los segundos carecen totalmente de protección ante ataques aéreos”.
Según lo informado por la cadena alemana Deutsche Welle, en la instancia celebrada este jueves, Michelle Bachelet recalcó que la de Gaza es “una de las zonas más densamente pobladas del mundo” y que los palestinos hace 14 años que se encuentran bloqueados por tierra, aire y mar, por lo tanto, no tienen dónde escapar.
A su vez, el relator de la ONU para los DDHH en Palestina, Michael Lynk, aseguró que la situación de los habitantes de ese lugar es “desesperada” y que la Organización de Naciones Unidas ha calificado como ” insostenible e invivible, una forma de castigo colectivo”. En paralelo, Lynk denunció que los desalojos de palestinos en Jerusalén Este forman parte del plan de Israel para aumentar los asentamientos ilegales y así lograr interponer un reclamo ilegal de soberanía, una práctica a la que se le ha instado a detener por la propia ONU.
Finalmente el relator en Palestina volvió a solicitar que los hechos ocurridos en Gaza en las últimas semanas sean objeto de una investigación por parte de la Corte Penal Internacional.
Por su parte, la administración israelita solicitó a la ONU una condena expresa a las acciones del grupo Hamas, argumentando que de no existir esta condena se “dará a ése y otros grupos terroristas excusa para seguir usando inocentes como escudos humanos”.
De acuerdo con lo que manifestó Meirav Eilon Shahar, embajadora de Israel ante la ONU, el Consejo de Naciones Unidas “debe elegir entre una organización terrorista que glorifica la muerte, o entre una democracia que valora la vida”.
