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Año XVI, 18 de abril de 2024


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Naftali Bennett, un nacionalista religioso en vías de gobernar Israel

El acuerdo de coalición anunciado el miércoles 2 de junio en Israel aún debe ser validado por el Parlamento israelí. Si el gobierno obtiene la confianza, pasará la página de los 12 años en los que Benyamin Netanyahu ha llevado las riendas del país.

RFI

  Jueves 3 de junio 2021 13:16 hrs. 
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Naftali Bennett no vive en un asentamiento, sino en Raanana, al norte de Tel Aviv. Un discurso que dice mucho sobre el posible futuro Primer Ministro, así como sobre la sociedad israelí: el nacionalismo religioso ya no se limita a los habitantes de los asentamientos judíos en Cisjordania o Jerusalén Este. Esta tendencia ideológica se ha convertido en algo difícil de sortear en un país cada vez más a la derecha, como demuestra la carrera de Naftali Bennett, que está dispuesto a liderar el próximo gobierno israelí.

Naftali Bennett, partidario de la colonización

Nacido hace 49 años en Haifa (norte) de padres estadounidenses, Naftali Bennett ha tenido varias facetas. Empresario de éxito de la alta tecnología, hizo su fortuna vendiendo su empresa de ciberseguridad Cyotta por 145 millones de dólares en 2005. Anteriormente había servido en varias unidades de élite del ejército israelí, incluida la prestigiosa Sayyeret Matkal, que contaba con un tal Benjamín Netanyahu en sus filas.

El Primer Ministro saliente y Naftali Bennett tienen otros puntos en común. Naftali Bennett trabajó junto a Benjamín Netanyahu cuando éste aún estaba en la oposición. Una generación separa a los dos hombres que dominan perfectamente los códigos de la comunicación política.

Con el apoyo de los judíos religiosos, Naftali Bennett ha construido su carrera política en el movimiento nacionalista religioso, también llamado sionista religioso. Este campo político estuvo representado durante mucho tiempo por Mafdal (acrónimo de Miflaga Datit Leumit: Partido Religioso Nacional). Desde 2008, Naftali Bennett se ha convertido en el líder de este movimiento, que tiene una sucesión de denominaciones: Habeit Hayehudi (“Hogar Judío” o “Casa Judía”), La Nueva Derecha y luego Yamina (“Derecha” o “Hacia la Derecha”).

Los nombres de estos partidos-coaliciones cambiaron, pero la ideología siguió siendo la misma: anexión de la mayor parte de los territorios palestinos ocupados, oposición al establecimiento de un Estado palestino independiente, conservadurismo religioso y liberalismo económico. Un programa político que, sin embargo, Naftali Bennett ha conseguido cambiar al mostrarse más abierto en cuestiones sociales. A su lado, la diputada Ayelet Shaked se ha convertido en otra estrella ascendente de la derecha radical al reivindicar una modernidad en la que el campo nacionalista religioso no se reconocía hasta entonces.

Bennett, antiguo protegido de Netanyahu

Mascarón de proa de un sionismo religioso rejuvenecido, Naftali Bennett se impuso primero como aliado privilegiado de Benjamín Netanyahu, que buscaba cada vez más a la derecha el centro de gravedad de sus coaliciones de gobierno. Así, Naftali Bennett ha ocupado una serie de carteras en los sucesivos gobiernos del inamovible “Bibi”: Economía, Diáspora, Educación, y luego Defensa en 2019-2020.

Aliado natural a la derecha de Benjamín Netanyahu, Naftali Bennett pasa a la oposición tras las elecciones de marzo de 2020. Un año después, nuevas elecciones (las cuartas en dos años): Netanyahu, salpicado por escándalos, no consigue formar una coalición. El mandato es para el centrista Yair Lapid, que recibe el apoyo de Naftali Bennett. Un mitin que tiene un precio político: si la coalición anunciada recibe el voto de la Knesset, Naftali Bennett será primer ministro hasta 2023, antes de ceder su puesto a Yair Lapid.

 

Por  Nicolas Falez.

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