En conversación con la primera edición de Radioanálisis, la Premio Nacional de Educación 2013 y académica del Centro de Investigación Avanzada en Educación, CIAE, de la Universidad de Chile, Beatrice Ávalos, se refirió a la decisión de la Agencia de Calidad de la Educación de suspender, de forma excepcional, la aplicación de la prueba Simce 2021.
Consultada por el director de Radio Universidad de Chile, Patricio López, la profesora Ávalos afirmó que “me parece que es una decisión adecuada. El Simce es una prueba que despierta reacciones distintas. Hay quienes creen que es una buena forma de diagnosticar, pero que tiene consecuencias para clasificación de las escuelas que no resultan ser una buena forma de estimular la calidad de la educación”.
En esa línea, la académica agregó que “este hecho nos debiese llevar a pensar cómo serán las futuras pruebas donde se quiera conocer el estado de aprendizaje de los estudiantes, pero ahora creo que la suspensión del Simce en estos momentos es una decisión adecuada”.
Respecto de la situación general de la educación en pandemia, la profesora Beatrice Ávalos señaló que “esta semana apareció un artículo en la revista The Economist sobre la situación del aprendizaje en el mundo y en una escala de 1 a 10, prácticamente no hay país que logre un aprendizaje de 6, entonces, es una situación que compartimos con muchos otros sistemas de educación (…) Entonces, hay necesidad de abrir las escuelas, con la mayor precaución posible, pero abrirlas de a poco”.
Respecto de la pugna que se ha creado entre el Ministerio de Educación y el Colegio de Profesores sobre este tema, la académica del CIAE, señaló que “son temas políticos en el fondo, no en el sentido partidista, pero ha habido una resistencia comprensible de parte del profesorado en comenzar las clases sin asegurar condiciones buenas de trabajo, sobre todo en términos de evitar contagios; y por otro lado está el gobierno que desde siempre ha querido abrir las escuelas”.
En esa línea la profesora Ávalos añadió que “tenía sentido resistirse a la apertura mientras no estuvieran las condiciones mínimas y una de esas condiciones mínimas era la vacuna (…) Hoy más y más personas están preocupados por los efectos en el aprendizaje, pero también por los temas de desarrollo psicológico y otra cosa importante es la diferencia por nivel socioeconómico por nivel de aprendizaje, una diferencia que ya conocíamos, pero que ahora se ha acentuado. Entonces, la vuelta a clases programadas, con seguridad, es necesaria”.
La Premio Nacional de Educación recalcó en la importancia de la presencialidad más allá de lo estrictamente académico “en gran medida consiste en tener un mundo social diferente, encontrarse con jóvenes de la misma edad, poder conversar, jugar, intercambiar opiniones, todo esto ahora se pierde. Es parte del desarrollo y del crecimiento y ya son casi dos años que eso no se da y que va a significar un impacto, difícil de medir hoy, pero preocupante hacia el futuro“.
Finalmente, respecto de cómo se debería llevar a cabo el regreso a clases presenciales, Ávalos señaló que “creo que el problema del gobierno es que ha hablado en un lenguaje universal, cuando este es un tema que se debería discutir en cada comunidad educativa. Es la comunidad escolar la que tiene que decidir y resolver las condiciones para el regreso a las clases presenciales, las comunidades acompañadas de los grupos como municipios, servicios locales y ver si están las condiciones para la realización de clases híbridas o de otro tipo”.
En conversación con la primera edición de Radioanálisis, la Premio Nacional de Educación 2013 y académica del Centro de Investigación Avanzada en Educación, CIAE, de la Universidad de Chile, Beatrice Ávalos, se refirió a la decisión de la Agencia de Calidad de la Educación de suspender, de forma excepcional, la aplicación de la prueba Simce 2021.
Consultada por el director de Radio Universidad de Chile, Patricio López, la profesora Ávalos afirmó que “me parece que es una decisión adecuada. El Simce es una prueba que despierta reacciones distintas. Hay quienes creen que es una buena forma de diagnosticar, pero que tiene consecuencias para clasificación de las escuelas que no resultan ser una buena forma de estimular la calidad de la educación”.
En esa línea, la académica agregó que “este hecho nos debiese llevar a pensar cómo serán las futuras pruebas donde se quiera conocer el estado de aprendizaje de los estudiantes, pero ahora creo que la suspensión del Simce en estos momentos es una decisión adecuada”.
Respecto de la situación general de la educación en pandemia, la profesora Beatrice Ávalos señaló que “esta semana apareció un artículo en la revista The Economist sobre la situación del aprendizaje en el mundo y en una escala de 1 a 10, prácticamente no hay país que logre un aprendizaje de 6, entonces, es una situación que compartimos con muchos otros sistemas de educación (…) Entonces, hay necesidad de abrir las escuelas, con la mayor precaución posible, pero abrirlas de a poco”.
Respecto de la pugna que se ha creado entre el Ministerio de Educación y el Colegio de Profesores sobre este tema, la académica del CIAE, señaló que “son temas políticos en el fondo, no en el sentido partidista, pero ha habido una resistencia comprensible de parte del profesorado en comenzar las clases sin asegurar condiciones buenas de trabajo, sobre todo en términos de evitar contagios; y por otro lado está el gobierno que desde siempre ha querido abrir las escuelas”.
En esa línea la profesora Ávalos añadió que “tenía sentido resistirse a la apertura mientras no estuvieran las condiciones mínimas y una de esas condiciones mínimas era la vacuna (…) Hoy más y más personas están preocupados por los efectos en el aprendizaje, pero también por los temas de desarrollo psicológico y otra cosa importante es la diferencia por nivel socioeconómico por nivel de aprendizaje, una diferencia que ya conocíamos, pero que ahora se ha acentuado. Entonces, la vuelta a clases programadas, con seguridad, es necesaria”.
La Premio Nacional de Educación recalcó en la importancia de la presencialidad más allá de lo estrictamente académico “en gran medida consiste en tener un mundo social diferente, encontrarse con jóvenes de la misma edad, poder conversar, jugar, intercambiar opiniones, todo esto ahora se pierde. Es parte del desarrollo y del crecimiento y ya son casi dos años que eso no se da y que va a significar un impacto, difícil de medir hoy, pero preocupante hacia el futuro“.
Finalmente, respecto de cómo se debería llevar a cabo el regreso a clases presenciales, Ávalos señaló que “creo que el problema del gobierno es que ha hablado en un lenguaje universal, cuando este es un tema que se debería discutir en cada comunidad educativa. Es la comunidad escolar la que tiene que decidir y resolver las condiciones para el regreso a las clases presenciales, las comunidades acompañadas de los grupos como municipios, servicios locales y ver si están las condiciones para la realización de clases híbridas o de otro tipo”.
En conversación con la primera edición de Radioanálisis, la Premio Nacional de Educación 2013 y académica del Centro de Investigación Avanzada en Educación, CIAE, de la Universidad de Chile, Beatrice Ávalos, se refirió a la decisión de la Agencia de Calidad de la Educación de suspender, de forma excepcional, la aplicación de la prueba Simce 2021.
Consultada por el director de Radio Universidad de Chile, Patricio López, la profesora Ávalos afirmó que “me parece que es una decisión adecuada. El Simce es una prueba que despierta reacciones distintas. Hay quienes creen que es una buena forma de diagnosticar, pero que tiene consecuencias para clasificación de las escuelas que no resultan ser una buena forma de estimular la calidad de la educación”.
En esa línea, la académica agregó que “este hecho nos debiese llevar a pensar cómo serán las futuras pruebas donde se quiera conocer el estado de aprendizaje de los estudiantes, pero ahora creo que la suspensión del Simce en estos momentos es una decisión adecuada”.
Respecto de la situación general de la educación en pandemia, la profesora Beatrice Ávalos señaló que “esta semana apareció un artículo en la revista The Economist sobre la situación del aprendizaje en el mundo y en una escala de 1 a 10, prácticamente no hay país que logre un aprendizaje de 6, entonces, es una situación que compartimos con muchos otros sistemas de educación (…) Entonces, hay necesidad de abrir las escuelas, con la mayor precaución posible, pero abrirlas de a poco”.
Respecto de la pugna que se ha creado entre el Ministerio de Educación y el Colegio de Profesores sobre este tema, la académica del CIAE, señaló que “son temas políticos en el fondo, no en el sentido partidista, pero ha habido una resistencia comprensible de parte del profesorado en comenzar las clases sin asegurar condiciones buenas de trabajo, sobre todo en términos de evitar contagios; y por otro lado está el gobierno que desde siempre ha querido abrir las escuelas”.
En esa línea la profesora Ávalos añadió que “tenía sentido resistirse a la apertura mientras no estuvieran las condiciones mínimas y una de esas condiciones mínimas era la vacuna (…) Hoy más y más personas están preocupados por los efectos en el aprendizaje, pero también por los temas de desarrollo psicológico y otra cosa importante es la diferencia por nivel socioeconómico por nivel de aprendizaje, una diferencia que ya conocíamos, pero que ahora se ha acentuado. Entonces, la vuelta a clases programadas, con seguridad, es necesaria”.
La Premio Nacional de Educación recalcó en la importancia de la presencialidad más allá de lo estrictamente académico “en gran medida consiste en tener un mundo social diferente, encontrarse con jóvenes de la misma edad, poder conversar, jugar, intercambiar opiniones, todo esto ahora se pierde. Es parte del desarrollo y del crecimiento y ya son casi dos años que eso no se da y que va a significar un impacto, difícil de medir hoy, pero preocupante hacia el futuro“.
Finalmente, respecto de cómo se debería llevar a cabo el regreso a clases presenciales, Ávalos señaló que “creo que el problema del gobierno es que ha hablado en un lenguaje universal, cuando este es un tema que se debería discutir en cada comunidad educativa. Es la comunidad escolar la que tiene que decidir y resolver las condiciones para el regreso a las clases presenciales, las comunidades acompañadas de los grupos como municipios, servicios locales y ver si están las condiciones para la realización de clases híbridas o de otro tipo”.
