Desde el 2019 hasta ahora, marzo 2022, hemos estado expuestos a desafíos planetarios como, el Covid, su variante Omicrom y ahora la tensión de la guerra entre Rusia y Ucrania, más el telón de fondo que sigue siendo la crisis climática.

Estos mismos acontecimientos que son de orden geopolítico, económico y con intereses muchas veces encubiertos para el común de la ciudadanía, también pueden ser observados a través del impacto que producen los liderazgos de quienes ejercen influencia a nivel mundial. Así, por ejemplo, el discurso espontáneo del presidente de Ucrania, Zelenski, en el parlamento europeo, el pasado 1 de marzo, fue comentado en múltiples medios por su fuerza emocional para pedir ayuda en una clara posición de desventaja en los recursos militares frente a Rusia, sin embargo, lo dejó en una amplia ventaja moral que puede cambiar el curso de la guerra.

En este contexto mundial el 11 de marzo, asume un nuevo gobierno para Chile, abriendo paso al liderazgo de Gabriel Boric y junto a él, 14 chilenas asumirán, 14 ministerios y tendrán el desafío de liderar soluciones para nuestro país.

Si seguimos observando el escenario nacional desde la mirada del liderazgo, habría que preguntarse si esta fuerza femenina podrá hacer la diferencia. Nunca antes tuvimos tanta oportunidad las mujeres de influir en el acontecer nacional y la toma de decisiones.

Estudios recientes de los investigadores, Zenger & Folkman, con más de 20 años de investigaciones en liderazgo, han concluido, “(…) de acuerdo a un análisis de miles de evaluaciones 360°, que las mujeres superaron en puntaje a los hombres en 17 de 19 competencias que diferencian a los líderes excelentes de los líderes promedio o mediocres.” Así mismo, concluyeron que “(…) Las mujeres son percibidas por sus gerentes, particularmente hombres, como ligeramente más efectivas en todos los niveles jerárquicos y en prácticamente todas las áreas funcionales de una organización. Incluso en áreas tradicionalmente identificadas con los hombres, como TI, operaciones y legal. Las competencias en las cuales la diferencia a favor de las mujeres es mayor, son: Tomar la iniciativa; Actuar con resiliencia; Practicar el auto-desarrollo; Promover la obtención de resultados; Mostrar gran integridad y honestidad.” www.zengerfolkman.com

El liderazgo femenino, tendrá una oportunidad, como nunca antes, de tomar decisiones y serán los altos estándares del desarrollo de sus competencias, o no, los que marcarán la diferencia que darán forma al porvenir de los ámbitos de acción de esos ministerios y seremos testigos del sello, impacto de esa influencia.

Eva Fuenzalida M. es docente de Teoría Organizacional, Experta en Competencias, Coach y consultora D.O. e integrando de la Fundación Hay Mujeres.