Hay unos pocos lugares de comidas y bebidas que pueden congregar simultáneamente a al menos cuatro tipos de públicos: parroquianos, artistas, estudiantes y oficinistas. Es un misterio el tipo de combinaciones que se produce esa mezcla, pero aquellos que lo logran suelen convertirse en lugares entrañables. El Venezia, mítico restaurante del Barrio Bellavista, ha sido demolido después de décadas de historia y patrimonio cultural. Ante ello, uno de sus visitantes habituales, el destacado cantautor Eduardo Peralta, ha compuesto estas décimas que ha entregado en exclusiva Radio Universidad de Chile.
El Venezia
Hoy demuelen el Venezia,
Que nombré en una canción
Hace años (cuántos son?
La memoria es niña necia…)
Pero aún la lluvia arrecia
Y a ratos enternecida
Hace renacer la vida
Que por su magia florece,
Y también desentumece
La nostalgia entumecida…
El Venezia fue un prodigio,
Un ágora extraordinario,
Un refugio libertario,
Un local con gorro frigio…
Ya no quedará un vestigio
De los proyectos gestados,
De los besos inspirados
De estudiantiles bellezas,
De sándwiches y cervezas
Y versos improvisados!
Alguna vez con el Payo
Compartimos un almuerzo,
Me corregía algún verso,
Cantor de irónico rayo…
Si recordando no fallo,
con el gran Chere -mi hermano-
fuimos también “Venezianos”:
El cantaba que el Venezia
Era una especie de Iglesia
Para el público profano…
Más de un borrador de canto
Surgió en una servilleta
De un trovero, de un poeta
Que allí condensó su llanto
O su risa… Ni el espanto
Impidió que allí llegaran
Quienes al barrio alegraran
Con verso, danza o pintura,
Y que su atmósfera oscura
Con su alegría alumbraran…
En el Barrio Bellavista
hice casi mil conciertos,
Ante públicos despiertos
Que valoran al artista.
40 años de pista
en un Barrio y su bohemia,
que pese a la actual pandemia
sigue dándonos su beso…
El Venezia es parte de eso,
De su artística academia…
El Venezia es un local,
Como conocemos varios,
De aquellos extraordinarios,
Que tienen algo especial…
Al mundo municipal
Le pido algo posible:
Cada sitio irrepetible
De encuentro semisagrado
Debiera ser declarado
Un Patrimonio Intangible…
El Venecia es demolido
Pero queda en la memoria
Tanto instante, tanta historia
Que no quiere ser olvido.
Yo declaro conmovido
(como al cantar su canción)
A guisa de conclusión:
Hoy demuelen el Venezia,
Y también, sin anestesia,
Parte de mi corazón!