En conversación con la primera edición de Radioanálisis, el abogado constitucionalista y exconvencional, Jaime Bassa, se refirió al fin del trabajo de la instancia encargada para redactar una nueva constitución y al inicio de la campaña para el plebiscito del próximo 4 de septiembre.
“Cumplimos muy escrupulosamente las reglas que nos fueron dadas en un comienzo, lo hicimos cumpliendo con nuestro reglamente interno y cumpliendo además con el plazo que se nos estableció. Es muy digno de destacar que como sociedad en su conjunto hayamos sido capaces de levantar un proceso constituyente como este para hacer frente a la crisis de 2019” destacó el abogado Bassa a propósito del cierre del trabajo de la Convención.
El exvicepresidente de la instancia confesó además que hubo un momento en que incluso se temió por la continuidad del proceso. “Hubo varios momentos en el que con la presidenta Loncon temimos que esto pudiera terminar de mala manera, pero estamos muy conformes con el año de trabajo que hemos tenido”.
Consultado por el director de Radio Universidad de Chile, Patricio López, respecto de las afirmaciones que sostienen que la Convención hizo mal su trabajo, el abogado Bassa reconoció que “durante el proceso se cometieron errores que fueron mermando la credibilidad que tenía la Convención, pero el punto es que se trató de errores individuales y fácilmente reconducibles a algún constituyente en particular”.
En esa línea, el académico agregó que “la Convención no se puede hacer cargo como institución de cuestiones como la de Rojas Vade, así como el Senado no se puede hacer cargo de casos como el del senador Moreira o de Orpis. Sin perjuicio de eso, hay una dimensión, efectivamente, que como institución manejamos mal, pero por otro lado lo miro con escepticismo dado que desde muy temprano vimos que una de las críticas que se haría a la Convención era el menosprecio a la calidad de su trabajo, pero la verdad yo no he encontrado argumentos que sostengan esa afirmación. Yo no encuentro capítulos que hayan quedado malos lo que hay es una diferencia política de distintos sectores que no están de acuerdo con algunas propuestas concretas y eso es legítimo“.
Sobre el resultado de algunas encuestas que otorgan una ventaja a la opción Rechazo, Jaime Bassa señaló que “las encuestas dicen lo que dicen, yo no soy experto en encuestas para poder hacer un juicio de valor respecto de su metodología pero podría hacer el juicio de que acá faltan todavía dos meses de campaña que serán dos meses importantes y donde tendremos un despliegue muy distinto al que hemos tenido hasta ahora”.
Por lo mismo, sostiene Bassa, “ahora hay un texto sobre la mesa, ya no hay una Convención a la cual criticar y vamos a tener un despliegue mucho más centrado en los efectos que la propuesta de nueva Constitución genera para el país y ya no en los chascarros, en los errores o en las fake news que han distorsionado el debate público“.
A propósito de la proliferación de las noticias falsas en redes sociales, el exvicepresidente de la Convención Constitucional afirmó que “esta estrategia de recurrir a la mentira como una forma de acción política es efectiva y esto tiene una finalidad bastante concreta. Como los detractores no están en condiciones de reconocer cuáles son las propuestas de nueva constitución en contra de las cuales ellos se están levantando, levantan noticias falsas”.
“Esa mentira como forma de acción política tiene por finalidad distorsionar la forma en la cual se construye la opinión pública, confundir a la ciudadanía avivando los temores más atávicos que existen y que están vinculados a la propiedad privada y a la propiedad sobre nuestras casas con el fin de ocultar y esconder la verdadera intención que hay detrás de algunos sectores para oponerse a la nueva Constitución”, añadió Bassa.
Respecto de los llamados a aprobar para reformar la nueva Constitución el académico sostuvo que “rechazar para reformar en la práctica significa tratar de construir la legitimidad del orden constitucional de la misma manera en la que la hemos hecho en los últimos 30 años y tengo la impresión de que eso no ha resultado. En cambio, la idea de aprobar para reformar respeta la legitimidad democrática que ha tenido este proceso y eventualmente reformar ese texto va a significar que en caso que no exista acuerdos la norma por defecto que regirá va a ser una Constitución adoptada democráticamente por el pueblo de Chile y eso marca una diferencia fundamental”.
Finalmente, respecto de las principales razones por las cuales habría que votar Apruebo en el plebiscito de salida, Jaime Bassa destacó que “este proceso nos da un ejemplo importante de que los problemas político-sociales se pueden enfrentar democráticamente y no por caminos de facto. Esa es una razón suficiente para dar un voto de confianza a la democracia”.
En esa línea, el abogado recalcó que “respecto de los derechos fundamentales hay un cambio muy significativo respecto de lo que ha sido el orden constitucional vigente y que históricamente ha sido bastante modesto en reconocer derechos y en particular de aquellos grupos que históricamente han sido postergados. El catalogo de derechos de la propuesta es genuinamente inclusivo y además el fortalecimiento de las regiones va en una línea de profundizar la democracia”.