La semana estuvo marcada por la reactivación del movimiento estudiantil, en esta oportunidad protagonizada por secundarios. A pesar de que hasta el momento no existe un o una interlocutora oficial del movimiento, han dejado en claro que exigen mejores condiciones para la educación pública del país.
Desde el regreso a las clases presenciales tanto estudiantes como profesores han demandado mejoras estructurales en los colegios. Principalmente en la infraestructura, debido a notables problemas en ese ámbito que van desde graves filtraciones y deficientes equipamientos para el ejercicio de sus funciones.
Las manifestaciones de hoy estuvieron concentradas en distintas áreas de las avenidas y calles principales de la Región Metropolitana, lo cual causó interrupciones en el funcionamiento del transporte público. Una masa se desplazó desde la altura del Metro Baquedano por Avenida Providencia hacia el oriente, mientras que otro grupo de escolares se movilizó a las afueras de la sede de Renovación Nacional para ser disipado rápidamente por las fuerzas de orden.
En vista de que los viernes se repiten las manifestaciones desde el estallido social, Metro anunció accesos controlados y el cierre de estaciones en la Línea 1 desde aproximadamente las 13.30 horas, a modo de prevención por una nueva jornada de movilizaciones estudiantiles.
15:46 hrs ❌Universidad Católica #L1 se encuentra cerrada por manifestaciones en el exterior.
Estaciones cerradas: Baquedano #L1 y #L5 (disponible para combinar)
✅El resto de la red está disponible.
Accesos controlados preventivos: Desde La Moneda hasta Los Leones #L1 https://t.co/8NVkDd6nVh
— Metro de Santiago – #NuevoViaje (@metrodesantiago) September 9, 2022
En conversación con Radio y Diario Universidad de Chile, Carolina López, estudiante del Liceo 4 ubicado en Santiago Centro, denunció el gran deterioro de la infraestructura y las deficientes condiciones de los equipamientos de su establecimiento educacional.
“Tenemos aguas turbias en los baños, las ventanas de las salas están rotas, tenemos estufas pero no tenemos gas, la comida es asquerosa y también tienen aguas turbias en la cocina (…) nos dan huevo con gusanos y con bichos”, declaró y agregó que tanto en la sala como en la cocina de su liceo hay goteras.
Asimismo, la estudiante manifestó su disgusto por el hecho de tener que “salir a las calles cuando la gente que salió para el estallido social votó rechazo”, al igual que su “pena por tener que luchar” por algo que no les corresponde. Así, reiteró que los y las estudiantes del país necesitan una educación digna y respuestas concretas desde las autoridades.