El Colegio de Profesores comenzó en las últimas horas el período de negociaciones con el Ministerio de Educación, con la finalidad de conseguir mejoras para el sector, entre ellas aumentar la Renta Básica Mínima Nacional (RBMN), poner fin a la Prueba Simce y que la evaluación docente sea voluntaria.
En conversación con la Radio y el Diario Universidad de Chile, Carlos Díaz, presidente del Magisterio indicó que oficialmente se hizo entrega al MINEDUC de un pliego de demandas, varias de ellas históricas que se han planteado a los diferentes gobiernos y que “lamentablemente no han sido recogidas por ninguna de las autoridades pasadas. Esto tiene que ver fundamentalmente con temas que hoy día nosotros hemos catalogado sobre cómo avanzar hacia un nuevo modelo educativo”.
Díaz sostuvo que hay una serie de políticas que se han ido generando en las últimas décadas y que llevaron a un sistema escolar competitivo y “un sistema educativo que lamentablemente no está respondiendo a las necesidades y a los requerimientos que implica la formación de niños, niñas y adolescentes. Por ello, creemos que hay que generar cambios importantes a la jornada escolar completa”.
Respecto a este último tema, el presidente del Colegio de Profesores recordó que cuando se instauró esta modalidad se pensó como una iniciativa destinada a alargar la jornada para poder dar más espacio de diálogo, de reflexión para los estudiantes, para el deporte, para el arte. “Sin embargo, la lógica estandarizada que está presente hoy día en el sistema educativo, nos ha llevado a que la jornada escolar completa se traduzca en más lenguaje y más matemática que es lo que mide la Prueba Simce y creemos que, por supuesto, eso no avanza hacia lo que debiera ser la formación integral de nuestros estudiantes”, sostuvo el representante.
Carlos Díaz, manifestó, al mismo tiempo, que “un tema central tiene que ver con mejorar el actual sistema escolar, lo que significa reformar la jornada escolar completa, terminar con la Prueba Simce que le ha hecho mucho daño a la educación chilena. Debemos avanzar hacia diversos sistemas de medición que no sean competitivos, que sean formativos, que no sancionen, que no castiguen”.
Otra de las demandas del Colegio de Profesores es la necesidad de avanzar hacia un nuevo modelo de evaluación docente que permita entregar instrumentos para que los profesores puedan mejorar sus prácticas pedagógicas y sea formativa, contextualizada, “y no la evaluación docente que tenemos hoy día que no significa ningún aporte real a lo que es la labor de nuestros docentes”.
Las demandas económicas
Según el presidente del Magisterio, también dentro de las demandas de los profesores, hay materias económicas que son relevantes para el sector.
“Saber qué es lo que va a ocurrir con el Bono de Retiro después de junio de 2024 que es la fecha hasta la que rige. Nos parece fundamental avanzar en un nuevo bono de retiro, mejorar la Renta Básica Mínima Nacional, igualarla y resolver demandas históricas que quedaron pendiente en la negociación pasada como es el caso del pago a la mención de los profesores de educación diferencial y a las educadoras de párvulo”, puntualizó.
Agobio laboral
Un tema que forma parte de las preocupaciones del Colegio de Profesores y que se contempla en el petitorio entregado al Ministerio de Educación apunta al agobio laboral que sufren los docentes, sumado a las situaciones de violencia que se están generando en el sistema escolar y que, a la fecha, pareciera ir en aumento. A juicio a Carlos Díaz, “la educación chilena, hace muchos años debió tener un viraje sobre cómo se viene desarrollando, particularmente, el modelo que tenemos. Con la pandemia todo esto se ha recrudecido”, indicó en conversación con los periodistas Juanita Rojas y Claudio Medrano.
El dirigente planteó que en términos de estrés y agobio que afecta a los profesores, “tenemos un serio problema en el país, donde, lamentablemente, cada día son menos los jóvenes que quieren estudiar pedagogía y eso tiene que ver en gran parte con las condiciones laborales en las cuales se ejerce la profesión docente. Tenemos que terminar con el tremendo agobio”.
Díaz señaló que el gremio ha hecho públicas las denuncias referidas a situaciones de violencia al interior de los establecimientos educacionales en el país. “Lo que más aparece, lo que más se muestra en los medios son los colegios emblemáticos, pero sabemos de situaciones de violencia en otros lugares. Estuve ayer en Renca con profesores de un establecimiento educacional, donde se golpea a un profesor; en Curanilahue los profesores han marchado en señal de protesta por las balaceras que se producen en las afueras de los colegios”.
Agregó que “hay diversas expresiones de lo que es hoy día la violencia, pasando por las golpizas que han recibido muchos profesores al interior de los establecimientos educacionales de parte de los apoderados. Lamentamos y repudiamos los hechos de violencia, pero creemos que eso da cuenta también de una realidad que existe en nuestro país y sobre la cual se requiere una política nacional concreta sobre el tema de la violencia, sobre el tema de la convivencia escolar, sobre la salud mental de los docentes”.
El presidente del Magisterio manifestó que “las condiciones en las que se está ejerciendo la profesión docente en Chile son muy lamentables, son muy precarias y eso indudablemente afecta por cierto a la educación, pero también afecta lo que significa nuestra profesión y la posibilidad de que nuevos jóvenes puedan aspirar a ser docentes. Hay un déficit de profesores y mientras no mejoren las condiciones, la situación va a ser cada vez peor”.
Deuda histórica
Sobre la deuda histórica, Carlos Díaz sostuvo que el gremio está esperanzado de que avance. “Son 41 años, en los cuales las profesoras y profesores han esperado el pago, la reparación. Hace 41 años, el Estado le debe a los profesores, lo que es reconocido por todos, pero nadie se hace cargo”.
El dirigente recordó además que existe un compromiso del Ejecutivo en este sentido y que también fue anunciado hace un par de meses por el ministro de Educación, Marco Antonio Ávila, ya que forma parte del programa de gobierno.
Añadió que el objetivo, planteado por el Presidente, Gabriel Boric, es enviar al Congreso, en diciembre de este año, un proyecto de ley de la Deuda Histórica que permita en 2023 iniciar esta reparación. “Tenemos la confianza expresada en que el Gobierno cumplirá su palabra”.