En conversación con la primera edición de Radioanálisis, el analista internacional y académico de la Universidad de Valparaíso, Guillermo Holzmann, se refirió a la renuncia de Liz Truss al cargo de primera ministra en Gran Bretaña.
Recordemos que este jueves la dirigente presentó su renuncia ante el rey Carlos III luego de una serie de críticas y movilizaciones sociales durante su gestión de 45 días marcada por una cuestionada política económica de reducción de impuestos a las grandes riquezas.
“Si uno quiere tratar de entender este proceso tan incierto que ha tenido Reino Unido hay que ir a lo que fue el plebiscito por el Brexit. Ese plebiscito fue en contra de lo que todos pensaban y terminó Reino Unido alejándose de la Unión Europea en un proceso que finalmente lo lleva a cabo Boris Johnson”, sostuvo Holzmann respecto de la génesis detrás de la crisis política que enfrenta ese país.
En esa línea, el analista agregó que “a partir de ahí hubo una serie de modificaciones en el Reino Unido que no se anticiparon adecuadamente y esto es porque estaba la certeza que era ilógico o impensado que el electorado dijera que sí al Brexit. Recordemos que el Brexit aparece como una discusión un poco farandulera al inicio y comienza a tomar forma con la decisión de David Cameron de llamar al referéndum, creyendo él que la ciudadanía votaría a favor de permanecer en la Unión Europea”.
Consultado por el director de Radio Universidad de Chile, Patricio López, respecto del modo en que la integración internacional suele incentivar la aparición de sentimientos nacionalistas, el académico señaló que “el proceso de globalización cuando se inicia en la década del 90 se basaba en el multilateralismo, es decir, la cooperación internacional. El Brexit fue la primera bandera de alerta respecto de que ese multilateralismo podría no tener las raíces necesarias o profundas dentro de la ciudadanía de esos países“.
Por lo mismo considera Holzmann que “esto da paso a los nacionalismos como el de Le Pen y ese nacionalismo empieza a tener una expresión electoral y que no resulta ser menor. Al lado de eso tenemos un debilitamiento de la democracia y luego los efectos no reconocidos de la pandemia que afectaron al multilateralismo y la cooperación”.
Respecto de los efectos que provocaron las medidas económica de Liz Truss, Guillermo Holzmann señaló que “el Partido Conservador está fragmentado porque se dedicó a ver cómo se mantiene en el poder y no a representar a las mayorías inglesas. Liz Truss fue considerada una buena capturadora de votos y ese cálculo demostró que el Partido Conservador se transformó un partido instrumental en busca de votos”.
“Liz Truss cuando compite al interior del Partido Conservador, ella habla del paquete económico que va a colocar y nadie le pregunta qué va a hacer, sino que ella se limita a decir que será un paquete que traerá crecimiento e inversión a la economía británica. Eso bastó y lo dijo y lo repitió hasta el cansancio y todos le creyeron que eso iba a ser así”, recalcó el académico.
El analista añadió que “el Partido Conservador está complicado, todo el mundo mira a Liz Truss, pero el error está en el Partido Conservador, en la lógica interna que tuvo para llegar a ella y no pensar en los costos que tuvo un Boris Johnson que tarde o temprano iba a ser cuestionado. La solidez ideológica del Partido Conservador está fragmentada y eso lleva a tomar decisiones con la calculadora electoral, pero en el fondo no tienen claridad respecto de cómo salir de la crisis porque la crisis hoy día se está viviendo en tiempo real con un Estados Unidos que le está imponiendo a Reino Unido muchas condiciones“.
Al respecto, Holzmann destaca que “en las propuestas económicas de Liz Truss estaba el aumento a un 3% del gasto en defensa. Es decir, la propuesta del Partido Conservador conlleva una ampliación y una profundización del gasto en defensa en Reino Unido que vamos a ver si se mantiene o no. Hoy el Partido Conservador tiene hasta el 28 de octubre para elegir un nuevo líder, pero eso no va a solucionar el problema que tiene y todo hace pensar en que tendrán que llamar a elecciones generales antes de lo previsto”.
Finalmente, respecto de la oposición británica, Guillermo Holzmann recalcó que “el Partido Laborista ha hecho un saludo a la bandera al llamar a elecciones, pero no se ha colocado en una oposición frontal para decir ‘sabe qué hagámoslo’. No ha llamado a sus fuerzas para hacer una presión política mayor porque mi impresión es que tampoco el Partido Laborista sabe cómo solucionar el tema“.
En conversación con la primera edición de Radioanálisis, el analista internacional y académico de la Universidad de Valparaíso, Guillermo Holzmann, se refirió a la renuncia de Liz Truss al cargo de primera ministra en Gran Bretaña.
Recordemos que este jueves la dirigente presentó su renuncia ante el rey Carlos III luego de una serie de críticas y movilizaciones sociales durante su gestión de 45 días marcada por una cuestionada política económica de reducción de impuestos a las grandes riquezas.
“Si uno quiere tratar de entender este proceso tan incierto que ha tenido Reino Unido hay que ir a lo que fue el plebiscito por el Brexit. Ese plebiscito fue en contra de lo que todos pensaban y terminó Reino Unido alejándose de la Unión Europea en un proceso que finalmente lo lleva a cabo Boris Johnson”, sostuvo Holzmann respecto de la génesis detrás de la crisis política que enfrenta ese país.
En esa línea, el analista agregó que “a partir de ahí hubo una serie de modificaciones en el Reino Unido que no se anticiparon adecuadamente y esto es porque estaba la certeza que era ilógico o impensado que el electorado dijera que sí al Brexit. Recordemos que el Brexit aparece como una discusión un poco farandulera al inicio y comienza a tomar forma con la decisión de David Cameron de llamar al referéndum, creyendo él que la ciudadanía votaría a favor de permanecer en la Unión Europea”.
Consultado por el director de Radio Universidad de Chile, Patricio López, respecto del modo en que la integración internacional suele incentivar la aparición de sentimientos nacionalistas, el académico señaló que “el proceso de globalización cuando se inicia en la década del 90 se basaba en el multilateralismo, es decir, la cooperación internacional. El Brexit fue la primera bandera de alerta respecto de que ese multilateralismo podría no tener las raíces necesarias o profundas dentro de la ciudadanía de esos países“.
Por lo mismo considera Holzmann que “esto da paso a los nacionalismos como el de Le Pen y ese nacionalismo empieza a tener una expresión electoral y que no resulta ser menor. Al lado de eso tenemos un debilitamiento de la democracia y luego los efectos no reconocidos de la pandemia que afectaron al multilateralismo y la cooperación”.
Respecto de los efectos que provocaron las medidas económica de Liz Truss, Guillermo Holzmann señaló que “el Partido Conservador está fragmentado porque se dedicó a ver cómo se mantiene en el poder y no a representar a las mayorías inglesas. Liz Truss fue considerada una buena capturadora de votos y ese cálculo demostró que el Partido Conservador se transformó un partido instrumental en busca de votos”.
“Liz Truss cuando compite al interior del Partido Conservador, ella habla del paquete económico que va a colocar y nadie le pregunta qué va a hacer, sino que ella se limita a decir que será un paquete que traerá crecimiento e inversión a la economía británica. Eso bastó y lo dijo y lo repitió hasta el cansancio y todos le creyeron que eso iba a ser así”, recalcó el académico.
El analista añadió que “el Partido Conservador está complicado, todo el mundo mira a Liz Truss, pero el error está en el Partido Conservador, en la lógica interna que tuvo para llegar a ella y no pensar en los costos que tuvo un Boris Johnson que tarde o temprano iba a ser cuestionado. La solidez ideológica del Partido Conservador está fragmentada y eso lleva a tomar decisiones con la calculadora electoral, pero en el fondo no tienen claridad respecto de cómo salir de la crisis porque la crisis hoy día se está viviendo en tiempo real con un Estados Unidos que le está imponiendo a Reino Unido muchas condiciones“.
Al respecto, Holzmann destaca que “en las propuestas económicas de Liz Truss estaba el aumento a un 3% del gasto en defensa. Es decir, la propuesta del Partido Conservador conlleva una ampliación y una profundización del gasto en defensa en Reino Unido que vamos a ver si se mantiene o no. Hoy el Partido Conservador tiene hasta el 28 de octubre para elegir un nuevo líder, pero eso no va a solucionar el problema que tiene y todo hace pensar en que tendrán que llamar a elecciones generales antes de lo previsto”.
Finalmente, respecto de la oposición británica, Guillermo Holzmann recalcó que “el Partido Laborista ha hecho un saludo a la bandera al llamar a elecciones, pero no se ha colocado en una oposición frontal para decir ‘sabe qué hagámoslo’. No ha llamado a sus fuerzas para hacer una presión política mayor porque mi impresión es que tampoco el Partido Laborista sabe cómo solucionar el tema“.
En conversación con la primera edición de Radioanálisis, el analista internacional y académico de la Universidad de Valparaíso, Guillermo Holzmann, se refirió a la renuncia de Liz Truss al cargo de primera ministra en Gran Bretaña.
Recordemos que este jueves la dirigente presentó su renuncia ante el rey Carlos III luego de una serie de críticas y movilizaciones sociales durante su gestión de 45 días marcada por una cuestionada política económica de reducción de impuestos a las grandes riquezas.
“Si uno quiere tratar de entender este proceso tan incierto que ha tenido Reino Unido hay que ir a lo que fue el plebiscito por el Brexit. Ese plebiscito fue en contra de lo que todos pensaban y terminó Reino Unido alejándose de la Unión Europea en un proceso que finalmente lo lleva a cabo Boris Johnson”, sostuvo Holzmann respecto de la génesis detrás de la crisis política que enfrenta ese país.
En esa línea, el analista agregó que “a partir de ahí hubo una serie de modificaciones en el Reino Unido que no se anticiparon adecuadamente y esto es porque estaba la certeza que era ilógico o impensado que el electorado dijera que sí al Brexit. Recordemos que el Brexit aparece como una discusión un poco farandulera al inicio y comienza a tomar forma con la decisión de David Cameron de llamar al referéndum, creyendo él que la ciudadanía votaría a favor de permanecer en la Unión Europea”.
Consultado por el director de Radio Universidad de Chile, Patricio López, respecto del modo en que la integración internacional suele incentivar la aparición de sentimientos nacionalistas, el académico señaló que “el proceso de globalización cuando se inicia en la década del 90 se basaba en el multilateralismo, es decir, la cooperación internacional. El Brexit fue la primera bandera de alerta respecto de que ese multilateralismo podría no tener las raíces necesarias o profundas dentro de la ciudadanía de esos países“.
Por lo mismo considera Holzmann que “esto da paso a los nacionalismos como el de Le Pen y ese nacionalismo empieza a tener una expresión electoral y que no resulta ser menor. Al lado de eso tenemos un debilitamiento de la democracia y luego los efectos no reconocidos de la pandemia que afectaron al multilateralismo y la cooperación”.
Respecto de los efectos que provocaron las medidas económica de Liz Truss, Guillermo Holzmann señaló que “el Partido Conservador está fragmentado porque se dedicó a ver cómo se mantiene en el poder y no a representar a las mayorías inglesas. Liz Truss fue considerada una buena capturadora de votos y ese cálculo demostró que el Partido Conservador se transformó un partido instrumental en busca de votos”.
“Liz Truss cuando compite al interior del Partido Conservador, ella habla del paquete económico que va a colocar y nadie le pregunta qué va a hacer, sino que ella se limita a decir que será un paquete que traerá crecimiento e inversión a la economía británica. Eso bastó y lo dijo y lo repitió hasta el cansancio y todos le creyeron que eso iba a ser así”, recalcó el académico.
El analista añadió que “el Partido Conservador está complicado, todo el mundo mira a Liz Truss, pero el error está en el Partido Conservador, en la lógica interna que tuvo para llegar a ella y no pensar en los costos que tuvo un Boris Johnson que tarde o temprano iba a ser cuestionado. La solidez ideológica del Partido Conservador está fragmentada y eso lleva a tomar decisiones con la calculadora electoral, pero en el fondo no tienen claridad respecto de cómo salir de la crisis porque la crisis hoy día se está viviendo en tiempo real con un Estados Unidos que le está imponiendo a Reino Unido muchas condiciones“.
Al respecto, Holzmann destaca que “en las propuestas económicas de Liz Truss estaba el aumento a un 3% del gasto en defensa. Es decir, la propuesta del Partido Conservador conlleva una ampliación y una profundización del gasto en defensa en Reino Unido que vamos a ver si se mantiene o no. Hoy el Partido Conservador tiene hasta el 28 de octubre para elegir un nuevo líder, pero eso no va a solucionar el problema que tiene y todo hace pensar en que tendrán que llamar a elecciones generales antes de lo previsto”.
Finalmente, respecto de la oposición británica, Guillermo Holzmann recalcó que “el Partido Laborista ha hecho un saludo a la bandera al llamar a elecciones, pero no se ha colocado en una oposición frontal para decir ‘sabe qué hagámoslo’. No ha llamado a sus fuerzas para hacer una presión política mayor porque mi impresión es que tampoco el Partido Laborista sabe cómo solucionar el tema“.
