En el marco de la conmemoración del Día Internacional de la Mujer, la ex presidenta Michelle Bachelet Jeria fue una de las invitadas especiales a la ceremonia que se desarrolló en la Universidad de Chile, donde el foco estuvo puesto en dar cuenta de los avances y principales desafíos en torno a la igualdad de género.
La ex mandataria y egresada de la U. de Chile, dictó la charla magistral “Liderazgos para el futuro: educando para la igualdad de género”. Durante su intervención, entregó una mirada global respecto a los aportes y desafíos del feminismo para la creación de sociedades más justas, y cómo contribuyen en esto los liderazgos de las mujeres.
“Es tiempo de agregar a esta agenda de futuro la creación de condiciones para un verdadero equilibrio del poder. Esto es, que junto con eliminar barreras para acceder a posiciones (sean profesiones, cargos, referentes simbólicos), pongamos atención en aquello que permite la permanencia y el crecimiento de las mujeres en esas posiciones”, dijo.
Además, destacó la importancia de que existan espacios formativos con perspectiva de igualdad de género, y dar una mirada de futuro sobre el rol que cumplen las universidades públicas como espacios formativos para avanzar hacia una sociedad más igualitaria.
“¿Qué tal si damos un paso adicional? Las mujeres no pueden aspirar solamente a tener a una “primera” en una posición o llegar al 50% matemático. Creo que la igualdad de género tiene una agenda de futuro en torno a la superación de estereotipos, a la eliminación de la violencia de género, y al cierre de brechas inaceptables en pleno siglo XXI. Es tiempo de agregar a esta agenda de futuro la creación de condiciones para un verdadero equilibrio del poder”, afirmó.
Asimismo, reflexionó acerca de la urgente transformación cultural que necesitamos para eliminar la brecha de género, que se lograría en casi tres siglos más, unas diez generaciones de mujeres. Para esto invitó a pensar en prácticas que permitan realmente que ellas desarrollen trayectorias que aporten a su crecimiento y el de todo Chile.
En este sentido, la nueva Constitución es una oportunidad única para definir las bases necesarias para estos cambios. “Tenemos la oportunidad –tal vez la última en un buen tiempo– de elaborar una Constitución acorde a nuestro presente y que deje instaladas las bases para que las mujeres tengan el mismo espacio, en los hechos, que los hombres. Es en gran medida la ocasión de defender y profundizar nuestra democracia como base para garantizar libertades y derechos y para sumar a todas las personas en propósitos compartidos”, agregó.
La ceremonia se desarrolló en la Casa Central de la U. de Chile, y estuvo encabezada por la Rectora de la Universidad de Chile, Rosa Devés, quien destacó la labor que realiza la Casa de Bello para erradicar las brechas de género y la discriminación a través de sus distintas unidades y su comunidad, un trabajo que “hacemos sin autocomplacencia, con conciencia crítica, sabiendo que queda mucho camino por recorrer para que el principio orientador de nuestro modelo educativo de ‘igualdad de género y no discriminación’ se encarne en nuestras vidas dentro y fuera de la Universidad“.
“Hoy hemos hablado de nuestra responsabilidad en cerrar las brechas en la igualdad de género, injusticias inaceptables que aún persisten en la sociedad. Como Universidad, tenemos una responsabilidad principal de trabajar por su eliminación, se lo debemos a nuestra historia y a las muchas mujeres que desde aquí abrieron caminos, y también se lo debemos al futuro de nuestro país”, agregó la Rectora Devés.
En el marco de la conmemoración del Día Internacional de la Mujer, la ex presidenta Michelle Bachelet Jeria fue una de las invitadas especiales a la ceremonia que se desarrolló en la Universidad de Chile, donde el foco estuvo puesto en dar cuenta de los avances y principales desafíos en torno a la igualdad de género.
La ex mandataria y egresada de la U. de Chile, dictó la charla magistral “Liderazgos para el futuro: educando para la igualdad de género”. Durante su intervención, entregó una mirada global respecto a los aportes y desafíos del feminismo para la creación de sociedades más justas, y cómo contribuyen en esto los liderazgos de las mujeres.
“Es tiempo de agregar a esta agenda de futuro la creación de condiciones para un verdadero equilibrio del poder. Esto es, que junto con eliminar barreras para acceder a posiciones (sean profesiones, cargos, referentes simbólicos), pongamos atención en aquello que permite la permanencia y el crecimiento de las mujeres en esas posiciones”, dijo.
Además, destacó la importancia de que existan espacios formativos con perspectiva de igualdad de género, y dar una mirada de futuro sobre el rol que cumplen las universidades públicas como espacios formativos para avanzar hacia una sociedad más igualitaria.
“¿Qué tal si damos un paso adicional? Las mujeres no pueden aspirar solamente a tener a una “primera” en una posición o llegar al 50% matemático. Creo que la igualdad de género tiene una agenda de futuro en torno a la superación de estereotipos, a la eliminación de la violencia de género, y al cierre de brechas inaceptables en pleno siglo XXI. Es tiempo de agregar a esta agenda de futuro la creación de condiciones para un verdadero equilibrio del poder”, afirmó.
Asimismo, reflexionó acerca de la urgente transformación cultural que necesitamos para eliminar la brecha de género, que se lograría en casi tres siglos más, unas diez generaciones de mujeres. Para esto invitó a pensar en prácticas que permitan realmente que ellas desarrollen trayectorias que aporten a su crecimiento y el de todo Chile.
En este sentido, la nueva Constitución es una oportunidad única para definir las bases necesarias para estos cambios. “Tenemos la oportunidad –tal vez la última en un buen tiempo– de elaborar una Constitución acorde a nuestro presente y que deje instaladas las bases para que las mujeres tengan el mismo espacio, en los hechos, que los hombres. Es en gran medida la ocasión de defender y profundizar nuestra democracia como base para garantizar libertades y derechos y para sumar a todas las personas en propósitos compartidos”, agregó.
La ceremonia se desarrolló en la Casa Central de la U. de Chile, y estuvo encabezada por la Rectora de la Universidad de Chile, Rosa Devés, quien destacó la labor que realiza la Casa de Bello para erradicar las brechas de género y la discriminación a través de sus distintas unidades y su comunidad, un trabajo que “hacemos sin autocomplacencia, con conciencia crítica, sabiendo que queda mucho camino por recorrer para que el principio orientador de nuestro modelo educativo de ‘igualdad de género y no discriminación’ se encarne en nuestras vidas dentro y fuera de la Universidad“.
“Hoy hemos hablado de nuestra responsabilidad en cerrar las brechas en la igualdad de género, injusticias inaceptables que aún persisten en la sociedad. Como Universidad, tenemos una responsabilidad principal de trabajar por su eliminación, se lo debemos a nuestra historia y a las muchas mujeres que desde aquí abrieron caminos, y también se lo debemos al futuro de nuestro país”, agregó la Rectora Devés.
En el marco de la conmemoración del Día Internacional de la Mujer, la ex presidenta Michelle Bachelet Jeria fue una de las invitadas especiales a la ceremonia que se desarrolló en la Universidad de Chile, donde el foco estuvo puesto en dar cuenta de los avances y principales desafíos en torno a la igualdad de género.
La ex mandataria y egresada de la U. de Chile, dictó la charla magistral “Liderazgos para el futuro: educando para la igualdad de género”. Durante su intervención, entregó una mirada global respecto a los aportes y desafíos del feminismo para la creación de sociedades más justas, y cómo contribuyen en esto los liderazgos de las mujeres.
“Es tiempo de agregar a esta agenda de futuro la creación de condiciones para un verdadero equilibrio del poder. Esto es, que junto con eliminar barreras para acceder a posiciones (sean profesiones, cargos, referentes simbólicos), pongamos atención en aquello que permite la permanencia y el crecimiento de las mujeres en esas posiciones”, dijo.
Además, destacó la importancia de que existan espacios formativos con perspectiva de igualdad de género, y dar una mirada de futuro sobre el rol que cumplen las universidades públicas como espacios formativos para avanzar hacia una sociedad más igualitaria.
“¿Qué tal si damos un paso adicional? Las mujeres no pueden aspirar solamente a tener a una “primera” en una posición o llegar al 50% matemático. Creo que la igualdad de género tiene una agenda de futuro en torno a la superación de estereotipos, a la eliminación de la violencia de género, y al cierre de brechas inaceptables en pleno siglo XXI. Es tiempo de agregar a esta agenda de futuro la creación de condiciones para un verdadero equilibrio del poder”, afirmó.
Asimismo, reflexionó acerca de la urgente transformación cultural que necesitamos para eliminar la brecha de género, que se lograría en casi tres siglos más, unas diez generaciones de mujeres. Para esto invitó a pensar en prácticas que permitan realmente que ellas desarrollen trayectorias que aporten a su crecimiento y el de todo Chile.
En este sentido, la nueva Constitución es una oportunidad única para definir las bases necesarias para estos cambios. “Tenemos la oportunidad –tal vez la última en un buen tiempo– de elaborar una Constitución acorde a nuestro presente y que deje instaladas las bases para que las mujeres tengan el mismo espacio, en los hechos, que los hombres. Es en gran medida la ocasión de defender y profundizar nuestra democracia como base para garantizar libertades y derechos y para sumar a todas las personas en propósitos compartidos”, agregó.
La ceremonia se desarrolló en la Casa Central de la U. de Chile, y estuvo encabezada por la Rectora de la Universidad de Chile, Rosa Devés, quien destacó la labor que realiza la Casa de Bello para erradicar las brechas de género y la discriminación a través de sus distintas unidades y su comunidad, un trabajo que “hacemos sin autocomplacencia, con conciencia crítica, sabiendo que queda mucho camino por recorrer para que el principio orientador de nuestro modelo educativo de ‘igualdad de género y no discriminación’ se encarne en nuestras vidas dentro y fuera de la Universidad“.
“Hoy hemos hablado de nuestra responsabilidad en cerrar las brechas en la igualdad de género, injusticias inaceptables que aún persisten en la sociedad. Como Universidad, tenemos una responsabilidad principal de trabajar por su eliminación, se lo debemos a nuestra historia y a las muchas mujeres que desde aquí abrieron caminos, y también se lo debemos al futuro de nuestro país”, agregó la Rectora Devés.
