Este miércoles la Cámara de Diputadas y Diputados aprobó con 55 a favor, 47 en contra y seis abstenciones la interpelación que Chile Vamos esgrimió contra la ministra del Interior, Carolina Tohá. Una instancia en la que el sector descartó que la medida radique un punto político previo a las elecciones de consejeros constituyentes. De ahí que la interrogación a la secretaria de Estado fue agendada para el martes 16 de mayo, la que estará a cargo del diputado de Renovación Nacional e integrante de la Comisión de Seguridad de la Cámara, Andrés Longton.
Cabe destacar que son 12 las razones que esgrime la oposición para interpelar a la titular de Interior. En ellas imputan una falta de apoyo a Carabineros; la inexistencia de una agenda legislativa y el ausentismo de Tohá en la comisión de Seguridad de la Cámara; la incapacidad de frenar el explosivo avance del crimen organizado, el narcotráfico y los “narco funerales”; y el recrudecimiento de la crisis migratoria junto a la falta de control de la frontera.
Asimismo, acusaron un ineficiente destino de recursos públicos en materia de seguridad y un “inexplicable y opaco” pago de pensiones a víctimas del estallido; la existencia de criterios partidistas en la reestructuración de labores técnicas en la División Jurídica del Ministerio del Interior; la inexistencia de un plan para combatir el terrorismo; entre otro motivos.
El diputado y jefe de bancada UDI, Guillermo Ramírez, afirmó que una de las razones por las que la oposición levanta esta interpelación, es por la ambivalencia que ha manifestado la secretaria de Estado respecto de los énfasis de Socialismo Democrático y Apruebo Dignidad en materia de seguridad.
“La ministra y el Gobierno tienen un problema que son las dos almas de la izquierda que habitan en La Moneda. Un alma que está dispuesta a avanzar y lo reconocemos, nobleza obliga. Ellos han estado dispuestos a apoyar la agenda legislativa, que nosotros, y no el Gobierno, ha empujado, pero hay otra alma acomplejada que no está dispuesta a avanzar legislativamente en materias de seguridad”, señaló.
Por tanto, mencionó que “cuando venga la ministra Tohá al Congreso y le pidamos claridad y definiciones de ciertos temas, va a tener que quedar mal con una de las dos almas, va a tener que decir de manera oficial y frente a todo Chile de qué alma es ella, que es la encargada en seguridad”.
En tanto, el diputado de Renovación Nacional, Andrés Longton, indicó que “si hubiéramos querido hacer un punto político para las elecciones y tratar de sacarle partido y dividendo, lo habríamos hecho mucho antes para que se realizara antes del 7 de mayo”.
“Esto tiene que ver con que hay un control, una improvisación, una falta de agenda constante en materia de seguridad, principalmente porque el Gobierno está tironeado con sus coaliciones, el sector más radical que representa Apruebo Dignidad y eso le impide avanzar”, agregó.
Desde el oficialismo, el diputado y presidente de Convergencia Social, Diego Ibáñez, aseguró que la medida de la derecha no tiene asidero en los hechos. “Ha sido la ministra Tohá la que se ha tenido que hacer cargo de la situación que profundizó el gobierno del ex presidente Piñera, porque ha sido este gobierno el que ha aumentado históricamente el presupuesto en Carabineros, como lo reconoce el propio general director de Carabineros”, expresó.
Asimismo, destacó que “ha sido este gobierno el que ha renovado casi el 50% de la flota de vehículos policiales que estaba dado de baja cuando se comenzó este período, se ha comprado equipamiento nuevo, se ha creado la ley antinarcos. Entonces, la derecha lo único que hace es un acto de campaña, le quita tiempo al Congreso que debería estar aprovechando para votar el aumento del sueldo mínimo, el royalty a la gran minería o la fijación de precios de las isapres”.
A su vez, el senador del Partido Socialista, Gastón Saavedra, aseveró que con esto “la derecha no está respondiendo al llamado de unidad y demuestran que no tienen compromiso alguno para avanzar en temas de seguridad pública, negando la sal y el agua al Gobierno en todos los ámbitos”.
“Ellos no quieren seguridad económica cuando rechazan la reforma tributaria y el royalty y tampoco quieren seguridad social cuando ponen obstáculos a la reforma de pensiones”, criticó el legislador.
“No me parece que hayan motivos para una interpelación”
En conversación con Radio y Diario Universidad de Chile, exdirector de Seguridad Pública del Ministerio del Interior y académico de la Universidad de Santiago, Jorge Araya, afirmó que “es una irresponsabilidad muy grande pretender culpar a este gobierno a la ministra de problemas que vienen de hace años”.
En esa línea, consideró que “todos estos temas de seguridad son tan delicados, estamos viviendo en el país un momento tan delicado, que requiere de tanto esfuerzo en común, tanto acuerdo, que el hecho de que se plantee una interpelación no aporta nada” y añadió que en relación a la gestión de la ministra “uno puede tener críticas de que lo ha hecho bien o mal en esto, pero mi balance es que ha sabido responder a un tema que ha sido emergente, que ha surgido con mucha fuerza, sorprendiendo a buena parte del Estado chileno”.
“Creo que desde el Ministerio del Interior ha tenido la capacidad de reaccionar rápido, ir generando alternativas, soluciones, discutiendo con el aparato legislativo para llegar a acuerdo en determinadas normativas legales. Entonces, no me parece que hayan motivos para una interpelación, que se entiende por todo el mundo político como un cuestionamiento”, manifestó.
Por lo demás, Araya aseguró que “el no apoyo a Carabineros se puede revertir claramente el argumento mostrando que estaban en condiciones muy paupérrimas al salir del gobierno anterior, con la mitad de la flota de vehículos paralizados, en malas condiciones y que en este gobierno se le hizo un aumento de recursos muy sustancial, muy importante”.
Asimismo, indicó que el crimen organizado “es un tema para el cual el Estado chileno no estaba preparado en los últimos 20 años. Entonces, diría que ahora tenemos el desafío de preparar al Estado chileno para el crimen organizado y ahí se está discutiendo una ley contra el crimen organizado, se han tomado algunas iniciativas legales que ya permiten medidas intrusivas, por ejemplo, de poder tener informantes al interior (de la organización), de poder hacer interceptaciones telefónicas y ese tipo de cosas”.
Por último, relevó que “lo de inmigración también es un pecado del Estado chileno, porque a tiempo se tendría que haber tenido un control mucho más responsable de la migración. No para prohibir la entrada a cualquier migrante, sino para ver bien que la gente que ingresara no tuviera antecedentes penales y fuera justificado su ingreso al país. En eso el Estado falló, pero no es el gobierno actual”.