Este martes 04 de febrero, Benjamín Netanyahu abordará cuestiones como “la victoria contra Hamás, el regreso de todos nuestros rehenes y la lucha contra el eje iraní en todas sus dimensiones”, según afirmó el mismo primer ministro de Israel antes de subir al avión que lo llevará a Washington para reunirse con Donald Trump, mandatario de los Estados Unidos. Durante su primer mandato, Trump repitió que Israel “nunca había tenido un mejor amigo en la Casa Blanca”.
Tras el ataque de Hamás del 7 de octubre de 2023, su predecesor, Joe Biden, ofreció pleno apoyo a su aliado israelí aunque a veces mostró cierta distancia por el gran número de víctimas civiles de la guerra en Gaza y la insuficiente entrada de ayuda humanitaria en el territorio palestino. En pocos días, Trump ha establecido un nuevo marco y entre otras cosas propuso “limpiar” Gaza y trasladar a los palestinos a lugares “más seguros” como Egipto o Jordania.
También desbloqueó la entrega a Israel de bombas de 2 mil libras (unos 900 kilos), que su predecesor había suspendido. Además canceló las sanciones financieras contra los colonos israelíes de Cisjordania, acusados de violencia contra los palestinos. “Para Netanyahu, tener una relación privilegiada con la Casa Blanca es una herramienta esencial”, señaló Céline Touboul, codirectora de la Fundación para la Cooperación Económica (ECF), en Tel Aviv.
El presidente de Estado Unidos, Donald Trump, y el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu. Foto: Haim Zach / GPO
“Estabilizar la región
Trump aspira a mantener el alto el fuego tanto en Gaza como en el sur del Líbano, entre Israel y Hezbolá. Según el Soufan Center, un grupo de expertos con sede en Nueva York, los asesores de Trump creen que “la reanudación de los combates en Oriente Medio le impediría abordar (…) sus prioridades más urgentes”, como la inmigración ilegal desde México o la guerra entre Rusia y Ucrania. “Trump quiere redirigir su prioridad hacia Asia-Pacífico”.
Así lo apuntó David Khalfa, investigador de la Fundación Jean Jaurès en París. “Como sus predecesores cree que primero debe estabilizar la región y crear una coalición antiraní con sus socios estratégicos”, Israel pero también Arabia Saudita.
En este sentido ,es probable que Trump intente arrancar concesiones a Netanyahu para que normalice las relaciones entre Israel y Arabia Saudita. Desde los ataques del 7 de octubre, los sauditas afirman que la normalización solo será posible con una solución duradera y viable para los palestinos. Esta semana está prevista la reanudación de las negociaciones, a través de mediadores, entre Israel y Hamás sobre la segunda fase el alto el fuego que debería permitir la liberación de los últimos rehenes, unos cincuenta, vivos o muertos, y el fin definitivo de la guerra.
Netanyahu abordará esta cuestión el lunes con Steve Witkoff, el enviado especial de Trump para Oriente Medio, que se reunirá esta misma semana con el primer ministro de Catar y altos funcionarios egipcios. “Si Trump le pide que haga concesiones a los palestinos para lograr la normalización entre Israel y Arabia Saudita, Netanyahu tendrá que elegir entre una relación privilegiada con el presidente estadounidense o mantener su coalición” de gobierno, que depende de partidos de extrema derecha, apuntó Touboul.