Pese a que el ministro Jaime Bellolio aseguró que la libertad de expresión “tiene un límite en la dignidad del otro”, descartó que en este caso se tomen acciones para limitarla. “Cosa distinta es que alguien pretendiera, por ejemplo, producir un taco o una manifestación sin pedir ciertos permisos”, señaló el Vocero de Gobierno.
La presidenta de la Agrupación Lésbica Rompiendo el Silencio afirmó que quienes promueven la venida del “Bus de la Libertad” buscan imponer su visión de mundo a través de discursos que incitan a la violencia.
Marcela Aranda, una de las líderes del autodenominado “bus de la libertad”, ha citado un estudio publicado en The New Atlantis para defender su postura. La publicación proviene del Ethics & Public Policy Center (EPPC), una organización cristiana y conservadora y, según una investigación del Huffington Post, cuenta con serios errores metodológicos.
El representante del Movilh, Rolando Jiménez, indicó la agrupación llevará a las calles otro vehículo llamado ‘Bus de la diversidad’ para manifestarse contra la iniciativa de la fundación ultraconservadora “Hazte Oír”. Asimismo, indicó que llevarán a la Justicia el debate: “Difunde discriminación y negación de derechos fundamentales de una parte de la población del país”, dijo.
