“La CUT no puede seguir actuando cuando todo ya ha pasado”, señalaron de manera tajante desde la Confusam, frente al llamado a paro hecho este domingo por la multisindical para el próximo 31 de mayo, diez días después de la cuenta pública que hará la Presidenta en Valparaíso.
Los funcionarios se reunirán este lunes y pretenden que el Ejecutivo respete el protocolo que ya fue suscrito, mientras la Cámara de Diputados votará este martes el proyecto que entrega un bono de 200 mil pesos.
Colegios profesionales y organizaciones de trabajadores manifiestan la necesidad de cambios estructurales en el sistema de salud y enfatizan que el tema debe debatirse en las próximas elecciones.
La comisión de Trabajo de la Cámara Alta vota la iniciativa este lunes. En el oficialismo siguen las diferencias por las “adecuaciones necesarias” en caso de huelga, la restricción a los beneficios colectivos y la titularidad sindical. Mientras, los trabajadores también se muestran críticos.
Los trabajadores del sector público en Atacama cumplieron su primera jornada de paro indefinido, en rechazo a la suspensión de la entrega del “Bono Atacama”. Luego de una reunión de coordinación, donde participaron parlamentarios por la región, resolvieron mantener la movilización hasta que el Gobierno entregue el beneficio, según lo comprometido en el protocolo de acuerdo, firmado en 2014.
La movilización se realizó frente a La Moneda para demostrar el rechazo de la ciudadanía en contra del TPP. Carlos Inzunza, Dirigente Nacional de la ANEF enfatizó que esta protesta es la primera instancia para decir a los parlamentarios que rechacen el tratado que afectará gravemente la soberanía de Chile.
En una carta, los trabajadores de la salud municipal responsabilizaron a algunos representantes de la mesa del Sector Público en la demora y posterior fracaso en las negociaciones del reajuste salarial. A su vez, cuestionaron a los diputados del PC que cambiaron su votación inicial.
Este jueves los trabajadores públicos se movilizan nuevamente a la espera de la votación en la Cámara de Diputados, que podría determinar el paso del proyecto, que fija el reajuste salarial en un 4,1 por ciento, a una comisión mixta. “El Gobierno y particularmente el Ministerio de Hacienda han decidido no llegar a acuerdo con los trabajadores y legislar a la fuerza”, acusan desde la Mesa del Sector Público.
El delicado escenario que atraviesa la salud en Chile puede explicarse desde distintos puntos de vista. Mientras algunos apuntan a cobrar responsabilidades políticas al gobierno de Bachelet, diversas organizaciones señalan como elemento clave a la reforma del sistema, impulsada por Ricardo Lagos.
Este viernes se retoman las negociaciones del reajuste del sector público, donde las posturas entre el Gobierno y la Mesa que representa a los trabajadores, están más que lejanas. Previo al encuentro, los funcionarios estatales protestaron por el bajo reajuste salarial ofrecido y adelantaron que inician un proceso de movilización en el que no se descarta ninguna acción.
Desde el PS el diputado Juan Luis Castro llamó a los diputados oficialistas a respaldar a la secretaria de Estado. “La derecha lo que quiere es instrumentalizar los problemas de la salud, que no son de hoy, pero que se han agravado, para darle un golpe a la Presidenta Bachelet y descabezar, como lo hizo en el 2007, a una ministra de Estado. No vamos a aceptar eso”, dijo.
En entrevista con Radio Universidad de Chile, Esteban Maturana, presidente de la Confusam, calificó de “lógica electoralista” la propuesta de construcción de los 60 nuevos hospitales. Su llamado es a fortalecer el sistema existente, alejándose de las ideas asistencialistas.
