En un amplio operativo policial, fue detenida Vania Queipul Millanao de 15 años, la hija del lonko de la Comunidad Autónoma de Temucuicui, Víctor Queipul Huaiquil, mientras desayunaba junto a sus compañeras, en el internado del Complejo Educacional de Collipulli.
Según el relato del padre de Vania, Víctor Queipul, mientras la niña era llevada al cuartel de la Policía de Investigaciones de Angol, tomó contacto telefónico con sus padres. La directora del establecimiento educacional conversó con el padre de la menor, quien le habría descrito la forma en que operó el grupo policial. “Me dicen que ellos entraron a detener a mi hija con mentiras, diciendo que eran familiares y que querían conversar con ella”, declaró Víctor.
La hija del lonko fue detenida el día en que el cuerpo de Jaime Mendoza Collio, fue entregado a la comunidad.
Al pasar la caravana de manifestantes por la ciudad de Collipulli, según indica el Fiscal, se produjo una quebrazón de vidrios en los ventanales de la Fiscalía del Ministerio Público, acto por el que responsabilizan a las niñas Cristina Millacheo y Vania Queipul.
Lo irregular del caso es que el fiscal del Ministerio Público, César Chibar, quien está a cargo de la investigación, es el único testigo presencial de los hechos.
Esta situación se suma a la del sobrino de Víctor, Patricio Queipul, también de 15 años, a quien se le ha aplicado la ley antiterrorista y está prófugo desde octubre del año 2009.
Fernando Lira, Presidente de la ONG Liberar, señaló que estas detenciones atentan contra todos los derechos de los menores, ya que “no pueden tener educación digna, no pueden acceder a salud ni educación adecuada; están sicológicamente aterrorizados y están siendo amedrentados”, declaró.
Lira añadió que estas no son las únicas detenciones que afectan a los niños en el sur del país y que estos hechos marcarían la nueva forma del Gobierno de enfrentar el conflicto mapuche.
Y si bien la menor se encuentra en libertad, su padre afirmó que “está muy afectada sicológicamente” a la espera de su audiencia fijada para el 10 de mayo. Víctor Queipul teme que su hija sea sometida a interrogatorios por parte de los agentes de investigaciones, y acusó una persecución política a toda su familia, “todo porque tengo a mi hijo y a mi hermano presos acusados por ley antiterrorista”.
Además, el lonko manifestó que el hostigamiento por parte los aparatos represivos del Estado Chileno no tiene límites y que no es capaz de entender cómo los gobiernos de turno atropellan los derechos básicos del pueblo Mapuche.
Al respecto, el abogado Matías Meza del Observatorio Ciudadano señaló que si bien por ley los niños mayores de 14 años son imputables, hay que reflexionar respecto a las causas de su detención y evaluar si estar “realmente ameritan pena aflictiva, porque si no, la detención estaría fuera del marco de la legalidad”, declaró.
Matías Meza recordó que Chile ya está siendo constantemente monitoreado por los organismos internacionales de derechos humanos y que estos procedimientos “deben ser revisados a la luz de los acuerdos internacionales en derechos humanos”.
Además, añadió que el trato a menores en situaciones tan delicadas como el conflicto Mapuche, debe ser doblemente cuidadoso para evitar así incurrir en una violación de sus derechos fundamentales.
En un amplio operativo policial, fue detenida Vania Queipul Millanao de 15 años, la hija del lonko de la Comunidad Autónoma de Temucuicui, Víctor Queipul Huaiquil, mientras desayunaba junto a sus compañeras, en el internado del Complejo Educacional de Collipulli.
Según el relato del padre de Vania, Víctor Queipul, mientras la niña era llevada al cuartel de la Policía de Investigaciones de Angol, tomó contacto telefónico con sus padres. La directora del establecimiento educacional conversó con el padre de la menor, quien le habría descrito la forma en que operó el grupo policial. “Me dicen que ellos entraron a detener a mi hija con mentiras, diciendo que eran familiares y que querían conversar con ella”, declaró Víctor.
La hija del lonko fue detenida el día en que el cuerpo de Jaime Mendoza Collio, fue entregado a la comunidad.
Al pasar la caravana de manifestantes por la ciudad de Collipulli, según indica el Fiscal, se produjo una quebrazón de vidrios en los ventanales de la Fiscalía del Ministerio Público, acto por el que responsabilizan a las niñas Cristina Millacheo y Vania Queipul.
Lo irregular del caso es que el fiscal del Ministerio Público, César Chibar, quien está a cargo de la investigación, es el único testigo presencial de los hechos.
Esta situación se suma a la del sobrino de Víctor, Patricio Queipul, también de 15 años, a quien se le ha aplicado la ley antiterrorista y está prófugo desde octubre del año 2009.
Fernando Lira, Presidente de la ONG Liberar, señaló que estas detenciones atentan contra todos los derechos de los menores, ya que “no pueden tener educación digna, no pueden acceder a salud ni educación adecuada; están sicológicamente aterrorizados y están siendo amedrentados”, declaró.
Lira añadió que estas no son las únicas detenciones que afectan a los niños en el sur del país y que estos hechos marcarían la nueva forma del Gobierno de enfrentar el conflicto mapuche.
Y si bien la menor se encuentra en libertad, su padre afirmó que “está muy afectada sicológicamente” a la espera de su audiencia fijada para el 10 de mayo. Víctor Queipul teme que su hija sea sometida a interrogatorios por parte de los agentes de investigaciones, y acusó una persecución política a toda su familia, “todo porque tengo a mi hijo y a mi hermano presos acusados por ley antiterrorista”.
Además, el lonko manifestó que el hostigamiento por parte los aparatos represivos del Estado Chileno no tiene límites y que no es capaz de entender cómo los gobiernos de turno atropellan los derechos básicos del pueblo Mapuche.
Al respecto, el abogado Matías Meza del Observatorio Ciudadano señaló que si bien por ley los niños mayores de 14 años son imputables, hay que reflexionar respecto a las causas de su detención y evaluar si estar “realmente ameritan pena aflictiva, porque si no, la detención estaría fuera del marco de la legalidad”, declaró.
Matías Meza recordó que Chile ya está siendo constantemente monitoreado por los organismos internacionales de derechos humanos y que estos procedimientos “deben ser revisados a la luz de los acuerdos internacionales en derechos humanos”.
Además, añadió que el trato a menores en situaciones tan delicadas como el conflicto Mapuche, debe ser doblemente cuidadoso para evitar así incurrir en una violación de sus derechos fundamentales.
En un amplio operativo policial, fue detenida Vania Queipul Millanao de 15 años, la hija del lonko de la Comunidad Autónoma de Temucuicui, Víctor Queipul Huaiquil, mientras desayunaba junto a sus compañeras, en el internado del Complejo Educacional de Collipulli.
Según el relato del padre de Vania, Víctor Queipul, mientras la niña era llevada al cuartel de la Policía de Investigaciones de Angol, tomó contacto telefónico con sus padres. La directora del establecimiento educacional conversó con el padre de la menor, quien le habría descrito la forma en que operó el grupo policial. “Me dicen que ellos entraron a detener a mi hija con mentiras, diciendo que eran familiares y que querían conversar con ella”, declaró Víctor.
La hija del lonko fue detenida el día en que el cuerpo de Jaime Mendoza Collio, fue entregado a la comunidad.
Al pasar la caravana de manifestantes por la ciudad de Collipulli, según indica el Fiscal, se produjo una quebrazón de vidrios en los ventanales de la Fiscalía del Ministerio Público, acto por el que responsabilizan a las niñas Cristina Millacheo y Vania Queipul.
Lo irregular del caso es que el fiscal del Ministerio Público, César Chibar, quien está a cargo de la investigación, es el único testigo presencial de los hechos.
Esta situación se suma a la del sobrino de Víctor, Patricio Queipul, también de 15 años, a quien se le ha aplicado la ley antiterrorista y está prófugo desde octubre del año 2009.
Fernando Lira, Presidente de la ONG Liberar, señaló que estas detenciones atentan contra todos los derechos de los menores, ya que “no pueden tener educación digna, no pueden acceder a salud ni educación adecuada; están sicológicamente aterrorizados y están siendo amedrentados”, declaró.
Lira añadió que estas no son las únicas detenciones que afectan a los niños en el sur del país y que estos hechos marcarían la nueva forma del Gobierno de enfrentar el conflicto mapuche.
Y si bien la menor se encuentra en libertad, su padre afirmó que “está muy afectada sicológicamente” a la espera de su audiencia fijada para el 10 de mayo. Víctor Queipul teme que su hija sea sometida a interrogatorios por parte de los agentes de investigaciones, y acusó una persecución política a toda su familia, “todo porque tengo a mi hijo y a mi hermano presos acusados por ley antiterrorista”.
Además, el lonko manifestó que el hostigamiento por parte los aparatos represivos del Estado Chileno no tiene límites y que no es capaz de entender cómo los gobiernos de turno atropellan los derechos básicos del pueblo Mapuche.
Al respecto, el abogado Matías Meza del Observatorio Ciudadano señaló que si bien por ley los niños mayores de 14 años son imputables, hay que reflexionar respecto a las causas de su detención y evaluar si estar “realmente ameritan pena aflictiva, porque si no, la detención estaría fuera del marco de la legalidad”, declaró.
Matías Meza recordó que Chile ya está siendo constantemente monitoreado por los organismos internacionales de derechos humanos y que estos procedimientos “deben ser revisados a la luz de los acuerdos internacionales en derechos humanos”.
Además, añadió que el trato a menores en situaciones tan delicadas como el conflicto Mapuche, debe ser doblemente cuidadoso para evitar así incurrir en una violación de sus derechos fundamentales.
