El estudio demuestra que el optimismo volvió a los consumidores, lo que podría ayudar a una reactivación más rápida.
Así como los mercados internacionales están mostrando ciertos signos de recuperación, el optimismo de los consumidores chilenos empieza a ubicarse en terreno positivo, dejando atrás la pesadumbre de la recesión.
Debido al efecto estacional y al devenir económico, en septiembre las positivas expectativas y percepciones del entorno económico se situaron en su nivel más alto del año, según la Encuesta de Percepciones y Expectativas Económicas del Centro de Microdatos de la Universidad de Chile.
El indicador subió 9,6 puntos porcentuales en el periodo y llegando a 106 unidades.Este es su mayor nivel desde el primer trimestre del año pasado, cuando en plena crisis el índice llegó a los 99 puntos.
Para entender el alza en el índice coyuntural, se debe observar qué sucedió con las variables que lo componen, vale decir, situación esperada, situación actual, situación familiar y momento del país.
Según la investigadora del Centro de Microdatos de nuestra casa de estudios, Pamela Jervis, en la mayoría de estos segmentos se evidenció un alza significativa, marcada por el comportamiento de la actividad económica y el empleo.
“Este aumento de la situación del país confirma el cambio de tendencia que estábamos sufriendo al principio por efectos del aumento de la inflación, luego tuvimos el efecto de la crisis suprime y ahora último la baja del desempleo. Como ustedes han visto todos esos temas han ido quedando un poco atrás y el desempleo ha ido mejorando en sus indicadores”, explicó.
A su vez, el economista de la U. de Chile, David Bravo, señaló que estos resultados se inscriben en el ciclo económico optimista del mercado y se seguir así podrían acelerar la reactivación del país, aunque recalcó que aún quedan problemas por resolver.
“El que la reactivación se produzca en el marco de un optimismo de las personas, claramente va a ayudar a que se produzca más rápido, no bastan las percepciones, pero podrían acelerar o rechazar cuestiones más objetivas. Desde ese punto de vista es una buena noticia, esto no quiere decir que los problemas objetivos no estén porque estas son curvas, en el caso del desempleo, sigue siendo un problema relevante”, señaló.
De acuerdo al sondeo aplicado a más de tres mil hogares de la capital, el principal problema de las personas en septiembre fue la seguridad ciudadana, relegando a un segundo lugar la falta de trabajo.
El estudio demuestra que el optimismo volvió a los consumidores, lo que podría ayudar a una reactivación más rápida.
Así como los mercados internacionales están mostrando ciertos signos de recuperación, el optimismo de los consumidores chilenos empieza a ubicarse en terreno positivo, dejando atrás la pesadumbre de la recesión.
Debido al efecto estacional y al devenir económico, en septiembre las positivas expectativas y percepciones del entorno económico se situaron en su nivel más alto del año, según la Encuesta de Percepciones y Expectativas Económicas del Centro de Microdatos de la Universidad de Chile.
El indicador subió 9,6 puntos porcentuales en el periodo y llegando a 106 unidades.Este es su mayor nivel desde el primer trimestre del año pasado, cuando en plena crisis el índice llegó a los 99 puntos.
Para entender el alza en el índice coyuntural, se debe observar qué sucedió con las variables que lo componen, vale decir, situación esperada, situación actual, situación familiar y momento del país.
Según la investigadora del Centro de Microdatos de nuestra casa de estudios, Pamela Jervis, en la mayoría de estos segmentos se evidenció un alza significativa, marcada por el comportamiento de la actividad económica y el empleo.
“Este aumento de la situación del país confirma el cambio de tendencia que estábamos sufriendo al principio por efectos del aumento de la inflación, luego tuvimos el efecto de la crisis suprime y ahora último la baja del desempleo. Como ustedes han visto todos esos temas han ido quedando un poco atrás y el desempleo ha ido mejorando en sus indicadores”, explicó.
A su vez, el economista de la U. de Chile, David Bravo, señaló que estos resultados se inscriben en el ciclo económico optimista del mercado y se seguir así podrían acelerar la reactivación del país, aunque recalcó que aún quedan problemas por resolver.
“El que la reactivación se produzca en el marco de un optimismo de las personas, claramente va a ayudar a que se produzca más rápido, no bastan las percepciones, pero podrían acelerar o rechazar cuestiones más objetivas. Desde ese punto de vista es una buena noticia, esto no quiere decir que los problemas objetivos no estén porque estas son curvas, en el caso del desempleo, sigue siendo un problema relevante”, señaló.
De acuerdo al sondeo aplicado a más de tres mil hogares de la capital, el principal problema de las personas en septiembre fue la seguridad ciudadana, relegando a un segundo lugar la falta de trabajo.
El estudio demuestra que el optimismo volvió a los consumidores, lo que podría ayudar a una reactivación más rápida.
Así como los mercados internacionales están mostrando ciertos signos de recuperación, el optimismo de los consumidores chilenos empieza a ubicarse en terreno positivo, dejando atrás la pesadumbre de la recesión.
Debido al efecto estacional y al devenir económico, en septiembre las positivas expectativas y percepciones del entorno económico se situaron en su nivel más alto del año, según la Encuesta de Percepciones y Expectativas Económicas del Centro de Microdatos de la Universidad de Chile.
El indicador subió 9,6 puntos porcentuales en el periodo y llegando a 106 unidades.Este es su mayor nivel desde el primer trimestre del año pasado, cuando en plena crisis el índice llegó a los 99 puntos.
Para entender el alza en el índice coyuntural, se debe observar qué sucedió con las variables que lo componen, vale decir, situación esperada, situación actual, situación familiar y momento del país.
Según la investigadora del Centro de Microdatos de nuestra casa de estudios, Pamela Jervis, en la mayoría de estos segmentos se evidenció un alza significativa, marcada por el comportamiento de la actividad económica y el empleo.
“Este aumento de la situación del país confirma el cambio de tendencia que estábamos sufriendo al principio por efectos del aumento de la inflación, luego tuvimos el efecto de la crisis suprime y ahora último la baja del desempleo. Como ustedes han visto todos esos temas han ido quedando un poco atrás y el desempleo ha ido mejorando en sus indicadores”, explicó.
A su vez, el economista de la U. de Chile, David Bravo, señaló que estos resultados se inscriben en el ciclo económico optimista del mercado y se seguir así podrían acelerar la reactivación del país, aunque recalcó que aún quedan problemas por resolver.
“El que la reactivación se produzca en el marco de un optimismo de las personas, claramente va a ayudar a que se produzca más rápido, no bastan las percepciones, pero podrían acelerar o rechazar cuestiones más objetivas. Desde ese punto de vista es una buena noticia, esto no quiere decir que los problemas objetivos no estén porque estas son curvas, en el caso del desempleo, sigue siendo un problema relevante”, señaló.
De acuerdo al sondeo aplicado a más de tres mil hogares de la capital, el principal problema de las personas en septiembre fue la seguridad ciudadana, relegando a un segundo lugar la falta de trabajo.
