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Los desafíos de Chile ante la OCDE

La entrada de Chile a la Organización para Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) según algunos expertos, es sinónimo de prosperidad y mayores beneficios para el país. Para otros, significa mayores exigencias y la obligación de cumplir con estándares más altos en diversas materias en las que Chile aún tiene deficiencias gigantescas.

Francisco Mardones

  Jueves 3 de diciembre 2009 22:46 hrs. 
Radio-Uchile

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En entrevista con el programa Economía al Día de nuestra emisora, la representante chilena ante la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), Karen Poniachik, manifestó que con la entrada de Chile al “club de los países desarrollados” habrá muchos beneficios para diversos sectores del ámbito nacional.

Sin embargo, existen una serie de responsabilidades que vienen aparejadas con ello, que tienen que ver con el cumplimiento de altos estándares de calidad en materia de políticas públicas, que serán constantemente monitoreados.

Según Poniachik, tendremos que rendir exámenes permanentemente por lo que se hace necesario corregir las principales debilidades.

“Nos van a evaluar en lo que tiene que ver con la educación. La OCDE hizo un informe muy crítico respecto de la enseñanza superior. Además, se revisarán nuestras políticas laborales, de salud y medio ambiente. Esto va mucho más allá de las finanzas y la economía porque en el corto y mediano plazo es beneficioso para Chile tener las mejores prácticas en todos estos aspectos”, subrayó la autoridad.

Y es que esta entidad internacional ha hecho importantes observaciones con el fin de mejorar las condiciones de vida en Chile.

Informes acerca de economía, educación, salud, medioambiente, derechos laborales y de consumidores son sólo algunos de los tópicos  propuestos por el organismo.

Si nos centramos en medioambiente, necesariamente hay que decir que en 2005, la OCDE emitió una dura evaluación en la que criticó la débil institucionalidad, la falta de regulación y la nula política pública de planificación urbana.

Manuel Baquedano, presidente del Instituto de Ecología Política, manifestó que el primer desafío de Chile va a ser implementar lo que está firmado en el papel, es decir, crear un ministerio y una superintendencia del Medioambiente.

De todas formas, destacó como positivo que la entrada de Chile a la OCDE significará estándares más altos de exigencia en normativas que hoy son débiles como la que tiene que ver con los contaminantes.

“Desde el punto de vista técnico profesionales formados para llevar a cabo estos procesos, pero yo no sé si hay mucha voluntad política para asumir una actitud proactiva. Este va a ser un tema muy discutido porque creo que estamos preparados, pero las autoridades son muy reacias a gastar todo el dinero que se requiere para adoptar estas normas”, sentenció Baquedano.

En materias de salud, el organismo ha puesto énfasis en la necesidad de poner más recursos en el presupuesto anual del Estado que actualmente bordea el 1,6 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), para reforzar económica y técnicamente el Sistema de Salud Municipalizado.
En educación, las recomendaciones iban destinadas a mejorar las condiciones de igualdad en el ámbito superior, así como aumentar los fondos destinados a investigación y desarrollo.

Sin embargo, para Mario Waissbluth, académico del departamento de Ingeniería Industrial de la Universidad de Chile y líder del movimiento Educación 2020, los desafíos primordiales están centrados en mejorar la enseñanza previa a la universitaria.

Para el experto la entrada de Chile a la OCDE es un hecho inflado, hiperventilado y sin mayores consecuencias y pese a que se ha hecho ver como algo absolutamente positivo por parte de las autoridades, a su juicio, la clase política no tiene la voluntad política para cambiar la realidad de la educación en nuestro país.

“México entró a este organismo hace más de quince años y no ha pasado gran cosa con eso. El tema y el proyecto país de Chile es la educación preescolar, básica y media. Si no arreglamos eso y seguimos sacando de la secundaria a un 40 por ciento de jóvenes que no entienden lo que leen, entonces no hay sistema universitario que tenga arreglo. O comenzamos a resolver el problema desde la base o todo el resto son fantasías”, afirmó el académico.

Según Waissbluth, la mayoría de los 30 países miembros de la OCDE están a años luz de Chile en ingreso per cápita, equidad, educación, salud, medioambiente y un sinfín de otras materias.

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